En tu compañía, por AnnaKat |Mini fic|

3.

El corazón de Hyoyeon se aceleró por una razón que no pudo entender. Ver a Seohyun de esa manera inquietaba su cabeza. No sabía qué le pasaba. Aquella era la primera vez que podía verla a una distancia tan milimétrica. Hyoyeon se dio cuenta pues de que sus ojos eran almendrados, tenía una cicatriz apenas perceptible en el párpado izquierdo, su nariz simulaba la de un conejo y sus labios se caracterizaban por ser ligeramente gruesos en un color rosado. Tenía el pelo largo con pequeñas ondulaciones. Era una chica muy guapa, del tipo de belleza típica, a decir verdad, pero muy bonita. Aquella imagen, sin duda alguna, le gustó a Hyoyeon, aunque tampoco es que fuese una persona que se preocupara mucho por la apariencia de las personas. No podía evitar sentir que la belleza de aquella chica le interesaba más de lo que estaba dispuesta a admitir.

—¿Qué pasa?

Hyoyeon vio que sus mejillas se pintaban de un rojo intenso. Y eso le agradó también.

Sonriendo, echó un suspiro al aire y quitó importancia a su propia percepción sobre ella. Seohyun no sería la primera ni la última chica guapa que vería en su vida.

—Nada, es sólo que... tus ojos son lindos.

Ella esperó que sus palabras no fueran inoportunas.

Sin embargo, sí que lo fueron puesto que Seohyun se sonrojó un poco más y entonces bajó la cabeza para mirar el ejercicio que había estado resolviendo. Luego, la escuchó decir un tímido "gracias". Hyoyeon se rio, sintiendo algo extraño en su pecho.

—En fin, terminaré el ejercicio... Promete que seguirás prestando atención.

Hyoyeon observó que Seohyun asentía, prometiéndole así que mantendría toda su atención para entender lo que estaba haciendo. Un momento posterior Hyoyeon volvió a concentrarse y reanudó el ejercicio de matemática.

Más temprano que tarde, las cosas cambiaron.

Su fría presentación y hermetismo, ahora se había convertido en una inesperada amistad. Ambas chicas se volvieron amigas, cosa singular tanto para Hyoyeon, como para Seohyun. Las dos habían aprendido a vivir en la soledad por motivos diferentes, no obstante, un clic parecía haberles juntado en el peor momento.

El viernes de esa semana se celebraría la fiesta anual de la universidad ya que poco faltaba para que el curso terminara. Sólo quedarían unas semanas más y no volverían a verse.

Aquello, por alguna indescriptible razón, había mantenido a Hyoyeon un poco alicaída. Había aprendido a estar con esa chica, a verla todos los días. Seohyun había entrado en su vida completamente. Ella pensaba que era normal que esto sucediera. Las personas solían acostumbrarse con facilidad a ciertas situaciones. Y aquella situación era así. Convivir con Seohyun había sido opuestamente a como ella vaticinó al conocerla aquel día. Estar con ella era tan fácil... echarla de menos era más que fácil. Porque eso era. Su corazón parecía emocionarse de más al pensar en Seohyun y parecía extrañarla de una distinta manera a la normal.