¡DÍA DE LAS MADRES!
Cuando lo imposible se hace verdad profunda,
cuando intensos dolores se tornan alegrías;
cuando la fe más fuerte devuelve tu esperanza
y la palabra AMOR recupera sentidos,
Dios se ha manifestado... ¡Y ahí están las MADRES!
No hay palabras, decisiones ni acciones suficientes para expresar todo el amor que merecen a los seres más especiales del planeta: las madres.
Continuando mi tributo de esta semana, hoy quiero compartir un poema escrito hace algún tiempo, en el cual integro el amor que se siente por esa compañera en la que se unen cuatro divinas condiciones: ser una gran persona generosa, sincera y querida por todos, una dulce mujer amante y entregada a su hombre, una hija y hermana siempre amorosa y presente, y una MADRE única, especial y tremenda para sus hijos amados. Para esa MUJER mayúscula y esa MADRE sin igual que Dios bendice hoy, mañana y siempre, ¡muchas felicidades en tu Día!
POEMA: La gloria de sentirte mi mujer, siendo madre
No sólo son tus hijos quienes te hacen ser madre;
no sólo es ese amor el que derramas al mundo.
Eres inagotable fuente de amor; tan grande
que inundas el planeta de amor, limpio y profundo.
Eres un poco madre de todo el que te aborda;
tu alma buena prodiga maternos sentimientos.
Quien te busca, en ti encuentra manantial que desborda
de comprensión y apoyo, de fe y de buen aliento.
Mi corazón se siente con tu amor bendecido.
Eres mi luz, mi fuerza, mi ilusión, mi semilla.
Me acunas en tu seno cual bebé protegido
y repletas mi hombría de dulces maravillas.
Mi camino es más tierno, más cálido y ardiente
desde que compañera te hiciste de mis pasos.
Con tus ardores de hembra calientas mi simiente,
con maternal dulzura me meces en tus brazos.
Cada detalle cuenta, nunca descuidas nada;
atiendes con presteza las cosas de tu hombre.
Eres al mismo tiempo el escudo y la espada
que protegen mi tiempo, del Gran Dios en Su Nombre.
Un día nací en tu alma, cuando entraste a mi vida;
eres el gran regalo que me dedicó el Padre.
Eres, por tanto, Madre de mi amor; bendecida
la gloria de sentirte mi Mujer, siendo Madre.
