Capítulo 5 "Solicitud"

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- No quiero ir.

- Oh, por supuesto que irás, Daniela, di algo.

- Algo- Kath y yo la miramos mientras ella reía como loca, lo que me hizo pensar con qué clase de desquiciadas trataba, Dani paró de reír y me miró- hablándote seriamente, debes ir.

- Soy malísima para esas cosas, ustedes lo saben- dije haciendo un puchero mientras ambas se ponían de pie y estiraban mis brazos para levantarme de la cama- soy peso muerto.

- ¡Haz algo Kathleen!

- ¡Estoy tratando, pero parece que comer esa hamburguesa en el descanso le aumentó otros ochenta kilos!

- ¿Cómo que otros ochenta, babosa?- le reproché a Kath mientras dejaba de hacer fuerza para que no me levanten- eres una groserota.

- Tienes que ir o de otra forma, utilizaremos el método SN- dijo Dani con su mirada maliciosa.

¿Qué es el "método SN"?

Básicamente, consiste en que tomábamos fotos en ropa interior cuando nos cambiábamos en los vestidores o desprevenidas de cada una y las utilizábamos para chantajear a cualquiera de las tres, podíamos utilizarlo con lo estricto y necesario, únicamente.

¿De dónde venía el nombre?

Era la abreviación de "Send Nudes"

- No lo harán, no con esto.

- Parece que no nos conociéramos, amiga- dijo Kathleen colocándose del lado de Dani, quedando así, con ambas frente a mí cruzadas de brazos y con mirada de advertencia.

- ¿Están hablando enserio?- no se movieron de su posición, así que asumí que sí, era enserio- Está bien, lo haré, y hasta dejaré que escojan lo que me voy a poner.

- Sólo nos dejas hacer eso porque eres perezosa- dijo Kath con tono obvio.

- Sí, pero si las hace sentir mejor pueden pensar que es porque confío en su gusto para vestir.

Mis amigas rodaron los ojos con una sonrisa mientras yo me recostaba en la cama estirándome como un gato mientras las veía tomar perchas, mirarme y clasificarlas por "definitivamente no" o "posible infarto testicular".

Cerré los ojos mientras mis amigas hacían su trabajo, y sin notarlo, me quedé dormida.

Desperté, giré un poco hacia mi mueble de noche para tomar mi celular, habían pasado unas dos horas aproximadamente, estaba cubierta con una cobija, Kath y Dani ya se habían ido, pero dejaron una nota en la silla donde pusieron la ropa que iba a vestir mañana para el evento del Saint Bradley High.

Decidí revisar mi celular antes de levantarme de mi cama, y me encontré con nueve notificaciones, mensajes en WhatsApp y cinco de Facebook, respondí los mensajes de las chicas, agradeciéndoles por ser tan lindas y seguí con mis minutos de ocio, abrí Facebook, donde encontré varias solicitudes de amistad, pero una en particular llamó mi atención.

"Logan Geller te ha enviado una solicitud de amistad"

Y como notificación.

"Logan Geller ha reaccionado a tu foto de perfil"

Concluí en que iba a dejarlo esperar un poco más mientras pensaba en su actitud hoy.

Finalmente, me levanté de la cama y saqué los cuadernos de mi mochila para hacer tarea.

Tiempo después terminé con mis deberes y consecuentemente sentí mi celular vibrar.

"Logan Geller te ha enviado una solicitud de mensaje

-Sé que tratas de excluirme de tu Facebook porque de tu mente no puedes"

Leí mientras reía por las ocurrencias de ese chico raro.

Y aun así decidí no responderle, no hasta mañana.

Me puse pijama, cepillé mis dientes, me despedí de mis padres y decidí quedarme pensando un rato.

Sonreí.

Logan era un gran bobo, pero uno muy lindo.

Terminé por rendirme ante el sueño, y no reparé a analizar, que mi último pensamiento de la noche, había sido él.

Logan Geller.

***

A la mañana siguiente, desperté diez minutos antes de que suene la alarma, así que decidí apagarla y revisar mi celular, abrí mis redes sociales, pero me quedé en Messenger, donde encontré dos mensajes más de Logan como solicitud.

"Espero que hayas amanecido bien"

"Nos vemos hoy en el evento, espero sorprenderte"

Fruncí el ceño con una sonrisa y escuché el golpe en la puerta de mi madre.

- Arya, amor, levántate.

- Sí, mami, ya estoy despierta.

- Estar despierta no es lo mismo que levantarse, apresúrate.

- Voy- dije alargando la "o".

Me vestí rápidamente y beber mi extraño batido diario.

- Esta vez no preguntaré qué es- le dije a mi madre, tragando el líquido.

Subí al baño a cepillar mis dientes y cabello, aprovechando que tenía tiempo, estaba cantando frente al espejo con mi cepillo en mano, hasta que la puerta retumbó con los gritos de mi hermano, acababa de despertar.

Salí del baño y me senté a esperar en el sillón de la sala, mientras revisaba los mensajes de mis amigas, hablaban de una serie que según ellas era la mejor del mundo y que próximamente me obligarían a ver.

Mi hermano bajó, nos despedimos de papá y nos dirigimos a nuestras escuelas.

Después de tiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora