Una luz tras la oscuridad

Prólogo

- Como primera cosa, he de decir que es mi primer relato escrito en Wattpad, también mi primera escritura con temática amorosa, amor, romance, etc..

-Espero que disfrutes leyendo mi narración, así como yo disfrute creándola.

-Quede inspirado para escribir acerca de esta temática por como fue que encontré a mi pareja, y como terminamos juntos. Basada en hechos reales, uwu.

-Espero apoyo para incitar a motivarme y poder seguir trabajando y seguir escribiendo acerca de diferentes temáticas.

1er Capitulo._-Identificación:

-Quizás pensabas que esta historia iba a empezar como cualquiera de un amorío, una pareja, feliz, problemas, etc. Pero no, lamentablemente nunca he tenido el agrado de poder pasar el tiempo con alguien, tengo 21 años, vivo en Paris, Francia, vivo acá, alejado de mi familia que vive en Chile, vine a terminar mis estudios humanistas, retomando el tema, siempre he tenido problemas para poder conseguir lo que quiero en cuento a relaciones se habla, volvamos a cuando tenia 8 años, era un niño educado, mimado por ser el hijo único, buen alumno, estudioso, siempre, veía a mis compañeros rodeados de mas chicos o chicas, con mejores amigos, o mejores amigas, y me pregunte; ¿Que estoy haciendo que no tengo amigos, o un mejor amigo?, entonces saque valentía para hablar con un chico con el cual compartíamos ciertos gustos, hablamos, la pasaba bien. Llego el día en que me compraron mi primer computador, donde instale un juego, al que mi "amigo" le gustaba, le pille gusto y vicio a la vez al juego, nos manteníamos unidos por nuestro igual gusto al juego, lamentablemente, llego el día en que a mi amigo ( Tobias ), lo tuvieron que operar, ese día maldito...aun lo recuerdo, fue un Martes, Tobias nunca volvió de la anestesia que le había aplicado, Tobias había muerto.

-Deprimido, busque otros amigos, pero nunca nadie compartía los mismos gustos por mi, me di cuenta que tanto juego y tanto tiempo que le dedicaba a este y a mi amigo, termine dejando un poco de lado mis estudios, entonces retome, sin opción a seguir el camino solo, aunque no lo quisiera solo eso me quedaba..., hasta que al siguiente semestre del año 1982, llega una chica a mi salón, esta se llamaba Catalina, al verla me enamore profundamente de todo de ella, era perfecta ante mis ojos, nada podía hacerme cambiar de opinión..., sus ojos café avellano, en los que decidí perderme en ese entonces...su largo cabello negro...su forma de caminar, su sonrisa que hacia brillar hasta el día mas nublado..., pero sobre todo, me encanto su inteligencia, su forma de tomar las clases, la manera en que cruzábamos miradas...yo la miraba como un bobo, fijamente (Hasta que se daba cuenta), entonces mi madre decidió que me viniera con la madre de Catalina a casa, ya que esta viva cerca mío,  entonces, en el trayecto fue cuando hablamos por primera vez, compartimos el gusto por la lectura y la escritura, nuestra pequeña porción de vanguardismo

-Al siguiente dia, hubo un acto en honor a un personaje religioso importante, no lo recuerdo bien, pero el hecho es que me senté a su lado, al lado de Catalina, la chica de la cual estaba perdidamente enamorado..., llego un punto del acto en que este se volvió muy aburrido y monótono, Catalina había recostado su cabeza sobre mis hombros...quede perplejo y en blanco, no podía reaccionar...luego, con valentía la abrace... sentía su aroma tan cerca mío... su suave cabello..., pero luego, al terminar el acto me tomo de las manos... y me negó lo que yo quería...,entonces quede destruido, deprimido porque la chica de la que estaba enamorado, me había rechazado..., nuevamente quede solo... me hacia demasiado daño verla allí, en la otra fila del salón, viviendo como si nada hubiera pasado...la supere, seguí solo, mis estudios, mi prioridad, ya no había nadie para mi, deje de intentarlo.

-Por cierto, no me he presentado, soy Ronald Barbera, nacido en la capital de Chile, Santiago, en una familia acomodada de clase alta, en un barrio llenos de gente de alta clase social, siempre he sido una persona de corazón humilde, que no busca sacar nada de nadie, solo vivo mi vida y ya esta.

-Unos años mas tarde, mis padres se separan, mi padre era un conocido empresario exitoso en Santiago, conocido por hacer buenos negocios y bellos condominios, mi madre, una mujer con estudios de Moda en Francia, conocidos desde 8vo Básico, terminan su relación a los 47 años, mi padre se va a vivir a Dinamarca, conoce otra mujer, crea otra vida, mientras nosotros, con mi madre, viviendo en una casa de 11500 UF, no podía mantenerla, nos mudamos, a un sector de clase media, decente, rodeado de buenas y trabajadoras personas. Seguimos nuestra vida como si nada hubiera pasado,  seguía yendo al colegio, pero el dolor de que mi padre no estuviera conmigo lo llevaba en la espalda, con problemas sociales en el colegio, dolores económicos, abandono de mi padre, sin ninguna explicación, así, llega mi depresión.

-Bipolaridad, problemas de ira, noches de insomnio, ojos rojos e hinchados de tanto llorar, muñecas cortadas, instintos suicidas, con lagrimas en las ventanas del alma, mi madre me lleva a una clínica siquiatrica, donde me recetan tres medicamentos, "volado", explica mi madre como andaba por esos días, "dopado", etc...

-En el colegio mi estado social no cambiaba, seguia siendo el mismo de hace años, solo, ya no sentía nada por nadie, hasta que en el pasillo del colegio, vi a aquella niña con cabello clarirubio, ojos color café bellota, un estilo de vestir simple, pero único. Cruzamos miradas, quedo como un bobo, perplejo por sufrir el amor a primera vista, ella me mira fijamente, y se retira, aquel día era el ultimo día de clases antes de vacaciones de verano, yo vestía mi suéter favorito, cuello V y de color rojo, mi sombrero habanero, pantalones mostaza, ella, con un suéter beige, cerrado, vaqueros azules semi-ajustados, mi verano, esta vez, seria muy diferente.

2do Capitulo._-Comienza mi juego

-Ese verano, fabuloso verano donde antes de terminar Diciembre, estaba con un pie en reposo debido a una mala caída, asistía a terapias cada 3 días en la Clínica, estaba de vacaciones en Chile para ver a mi familia lejana, el 14 de Diciembre, comencé a seguir a esa chica de la que no dejaba de pensar, me di cuenta, gracias a una de sus historias, que uno de sus hoobies era dibujar, al parecer era bastante buena, o yo muy malo, le comente; Que bien dibujas, me gustaría dibujar como tu :). Ella me respondió con un consejo de armonía y comprensión, le seguí hablando, hasta que enlazamos amistad, amistad que con el tiempo, en el 31 de Diciembre, le conté lo que realmente sentía hacia ella, supe lo que había pasado con ella en el pasado, pero aquel Viernes estrellado, con una hermosa luna y sus hermosas estrellas acompañantes, fue el escenario perfecto para declararme, ella me acepto, yo lee prometí mi amor, respeto, comprensión hacia ella, le aclare mis gustos por lo clásico, por el añejo y casi extinto amor de películas con el que todos alguna vez soñamos, salimos, el día 8 de Enero, emocionados, ambos, fuimos hacia nuestro lugar de encuentro, ambos, con el corazón en la mano, nos saludamos, caminamos en la calle rojos, como tomates, hasta llegar a el café de la ciudad, donde tomaríamos un suave y delicioso Capuchino con crema, estábamos allí, sacando temas de conversación al azar, ella golpeaba sus piernas con las mías, usaba brackets para ese tiempo.

-Llega el momento de retirarse, la primera cita la invito yo, como buen caballero, caminamos hacia el parque, encerrados en una burbuja, que nos aislaba de toda esa metrópoli, bulliciosa y contaminada, una burbuja donde solo estabamos los dos, conversando, con los ojos brillantes, sonriendo y sonrojándose, llegamos al parque, nos sentamos en el cesped, abajo de un árbol de Sequoia, sus hojas tapaban el sol, entonces, nos quedamos callados, y nos miramos mutuamente, con los ojos cerrados, nos fuimos acercando, hasta que podíamos sentir nuestra respiración, nuestros húmedos labios, con sabor a crema, se juntaban, podía sentir como perdida y ciegamente podía decir que ella era el amor de mi vida, se escuchaba como el viento soplaba en nuestras orejas, como las hojas de ese hermoso árbol caían con cada movimiento de nuestros labios, un momento mágico.