Hay tanto que contar, no se por donde empezar. Lo cierto es que a lo largo de estos años, que ya van siendo 28, han pasado tantas cosas , entre Buenas , no tan buenas, malas y remalas (incluyendo las tristes).
Si bien es cierto, creo que el problema remonta desde mi concepción. No por obra y gracia del espíritu Santo, sino por dos inexpertos que jugaron a ser mayores, ¿pensaron en las consecuencias? No lo sé.
Pero les tocó aceptarlo.
No se como hubiese sido la vida de ella, si no me hubiese dado cabida en su vientre por 9 meses. Lo cierto es que lo hizo. En algún momento pensé; "no debió" . Y es que haberla visto llorar, lastimada, fue algo muy feo.
Pensar "por mi culpa" ... eso es lo que piensa un niño que no sabe nada de la vida.
Cada dia gris lo tengo en mi memoria.
Recuerdo también que se separó de papá , de él, mi memoria a borrado todo lo malo y dejo sólo un par de imágenes; tocando la guitarra y cantando para ella.
No se supe de él sino hasta los doce años, era totalmente distinto a la imagen que me había recreado en mi cabeza, decepcionante, sin mas.
Quedé sin ganas de volverlo a ver, y así lo hice a ecepcion de contadas veces no mas de tres, y por fuerza mayor.
Pensé; lo mejor que pudo haber hecho ella, fue alejarme de él y de ese entorno tan miserable que el ofreció a los hijos, (con su nuevo compromiso).
La última vez que lo vi, fue en el sepelio de mi abuelo, que sé por mi madre, fue el único que se encargó y preocupó por mi, cuando recién nacida.
Al borde de morir, poco antes del primer año de nacida, el abuelo sería quien comprara medicinas, Leche y pañales. Aquel gran cobarde que se hace llamar mi padre (ahora) hasta llegó a negarme como hija (condenandose así mismo) para su mala suerte tengo todos los razgos a su familia, más razgos que los propios hijos a quienes si reconoció y dio su apellido.
No me importa tener su apellido, no me sirve de nada.
El abuelo fue siempre bueno conmigo y oraba por mi; eso dice ella siempre que lo recuerda, es notable la gratitud que siente hacia él.
Cuando ella se cansó del exceso de mala vida que aquel le daba, se fue lejos, llevándome consigo, como suelen hacer pocas madres.
Todo pasó tan rápido, que ni tiempo de capturar los momentos en mi memoria tuve!
Cuando me di cuenta ya estaba viviendo en una casita muy modesta con mi madre, y con quien llamé "papá" .
Eran apenas tres años los que tenía, y aun puedo recordar mi vestido favorito; blanco con lunares rojos, que llevaba puesto aquella mañana, en la que le preguntaba a ella por "aquel"
Sería la última vez que mencionaría su nombre, porque ella me pidió que nunca más se lo mencionara, y así fue. Solo hasta los doce años volví a recordar aquel nombre, antes de eso, solo tenia un padre, el que me había dado ella, quien me cargaba en sus hombros y me consentía como a una princesa, no tengo fotos de aquellos tiempos, pero los mejores momentos lo tengo grabados en mi memoria, tan íntimos, tan míos, tan hermosos días, que no duraron mucho, (lamentablemente).
En estas líneas comienza a abrirse la llave del grifo en mis ojos, pero como es típico de mi, escondo el sentimiento. Debo hacerlo para poder seguir escribiendo, y de hecho, sobreviviendo en este mundo, que dicen muchos religiosos, pronto acabará (Amén).
Febrero del 92, todo empezaría a cambiar, para desdicha de una inocente y para ella, que tenía esperanza de que el segundo intento fuera mejor.
Aquel a quien llamé papá, ya tendría a su propia hija, sangre de su sangre y es cierto eso que dicen: "la sangre llama" porque el cariño que mostraba con ella, su hija, seria muy distinto al que me mostró cuando su hija era yo.
Cambió, ya no era el mismo, nació una nueva yo, supongo que desde ahí se fue creando este carácter del diablo que me manejo.
Omitiré las largas líneas donde podría describir palabra por palabra, los maltratos que observé de él hacia ella y hacia mi, la culpa era del "alcohol" así decían los adultos.
Fueron años feos, y así como guardo los más hermosos, en el mismo álbum están los espantosos, pero muy escondidos, para que no cualquiera los vea.
Entre ellos pueden encontrar, navidades infelices, palizas, intento de suicidios, insultos, entre otros. No es agradable ver esos recuerdos.
Sin embargo, en los momentos que se trataba de vivir en paz, hubieron buenos recuerdos, que tal vez ellos también los tengan guardados, por ejemplo;
(Es tan difícil encontrar alguno)
Cuando tenía 10 años la alegré a ella, terminaría la primaria y con honores! Abanderada! Pero por corrupción entre el director y una señora extrabagante, me bajaron a escolta.
Ese día ella estaba contenta estuvo tan contenta que Hasta se olvido de tomar las fotos, no hay recuerdo tangible de eso, más que un diploma de cartón que esta a punto de desparecer de lo viejo que se ha puesto. Pero eso no es excusa para que no conserve el momento, cuando tiene oportunidad, presume de aquello y otras cosas más.
Aunque después de aquello, no sería mucho el tiempo que viviera junto a ella; cuatro años después me desprenderia de su mano.
En ese lapso de cuatro años, ya vivíamos solas, ya no éramos tres , éramos cuatro! Con ella al frente.
Se podría decir que éramos felices!
Me decidí a hacer lo que tanto me gustaba, cantar y bailar!
Si, pasé burlas. Y es que los años que viví con quien sería mi padre, forjé una conducta algo racea en cuanto a amistades.
Era algo tímida para esto de cantar y bailar, pero en el fondo era mi mayor anhelo.
Lo hacía mal!
-ja ja tieza! -decían los "amigos" del barrio. Eso, era apenas una de sus "ofenzas".
No me importaba, porque sabía que no era cierto, simplemente en público se me hacia difícil soltarme.
Cuando estaba sola, en casa, me veían bailar y se sorprendían de la facilidad de movimiento de caderas, y lo bien formada que tenia mi silueta, eran aquellos momentos en los que me daba por imitar a una cantante de origen árabe-colombiano, que estaba en todo su apogeo en aquellos días, por ahí por el 97...
Cabe resaltar que fuera de mi casa, parecía un niño, si, un niño. Con pantalonetas, tenis, overol, muchas veces sin zapatos, jugando al trompo, las bolillas, al fut, entre otros, dignos de todo varón.
Yo no despertaba el interés de ningún niño .
Mis amigas, ya para eso, todas estaban con novios y yo, yo lanzandome al estero a nadar y echar a andar las balzas que hacía con mis amigos, todo un varoncito yo!
La única vez que me veía como niña, era cuando iba al colegio con mi falda, mis zapatos de muñeca y con una cola de caballo .
No pensaba en eso de andar de novia, yo no le gustaba a ninguno de los chicos del barrio -todos eran mis amigos [aunque un beso me sembró la duda]...
Un beso del niño de ojos de miel y labios de fresa, pero, eso es otra historia.
En el colegio había un niño que me miraba mucho, y empezaba a inquietarme esa mirada, con esos ojitos verdes que tenia, a toda niña se inquietaba.
Era un compañero de clases, que volvió a coincidir conmigo en un mismo salón, nos reconocimos, pero no fue más.
No me importaba eso de andar de novia.
Mis amigas del barrio ya se daban besos!
-que asco- decía yo.
Mi mundo era cantar, bailar, jugar indoor. ..etc.
Empezaba a verme más señorita, mi cuerpo se desarrollaba cada vez más! Y yo lo escondía con camisas grandes, pantalones flojos...
En el colegio, no se ocultaba. Llegué a llamar la atención de quien sería una "primera ilusión" (primera vez que se me declaraban) pero no pasó más que una declaración de su parte, un -No- De respuesta mía y un beso robado de aquel tarado brinquillo.
Segunda decepción: "a los hombres les gusta andar con una y otra" mi teoría.
Eso no fue excusa para que empezara a entrar en ese mundo de adolescentes, fiestas, amigas, cartas, secretos, novios. Muy precoz a mi pensar de ahora.
En esos días de adolescente llegó el; P.P.A.O
Mostrando el lado bonito de tener un novio, y es que la historia con el, fue muy linda, única, la primera para mi.
Dos años creciendo juntos, compartiendo risas, conversas, consejos, tristezas...
Amé, lo llamo amor, porque es el rostro que quiero personificar con todo lo vivido juntos, la inocencia, el sentimiento.
Lo vivido con el, es aquello que quieres volver a vivir, aquello que te viene a la mente cuando te preguntan; ¿si pudieras viajar en el tiempo, a que momento de tu vida quisieras volver?
-a ese tiempo, ese es el tiempo de mi regreso, de los más felices de aquellos años.
Aunque, pensándolo bien , me gustaría ser un ángel de la guarda y cuidarlo desde muy pequeño, haber cuidado cada uno de sus pasos, y evitarle caída alguna, o golpes en su cabeza, para que cuando crezca, no muera por un derrame cerebral, causado por caídas en la infancia (eso dijo el doctor) si, cuidarlo. Y coincidir con el en la vida, y verlo siendo feliz, aunque no en mí historia, pero vivo y feliz.
Se fue muy pronto, se fue la felicidad de mi adolescencia, simplemente desgarrador.
No fue todo, después de unos meses se fue mi tío, a quien amara como a un padre, y quien me mostraba el mismo afecto. Si P.P.A.O se llevó la mitad de mi alma, la otra mitad se la llevó él, mi tío. El hacia mis navidades; alegres, mis días de escuela; felices, mis logros; valiosos. En mi historia ellos dos han sido hasta ahora, las pérdidas más dolorosas.
Se que no serán las únicas, pero fueron las primeras, y las que hasta ahora me duelen.
Ya contaré más de ellos.
-cuanto los extraño!
(En lo ficticio hay una realidad)
