Estando en busca de sus respuestas que tanto quería encontrar con respecto a las habilidades de la manipulación de la oscuridad que la bestia divina Kurasa le había otorgado a su padre tiempo atrás, Sorato seguía con su búsqueda en la cámara dentro de la montaña, en donde se encontraba el templo principal dedicado a Kurasa y otro zorro que podría ser la bestia divina de la luz. En el tiempo actual, Sorato y Nozomi se encontraban mirando por los alrededores del templo, buscando algo que pudiera servirle como una respuesta o una pista para encontrar las respuestas que estaban buscando.
-Pues parece que no hay nada que pueda ayudar a mi cariño en estos momentos.
Comentando eso de una forma un poco desanimada, Nozomi estaba mirando la base donde estaba sentada una estatua pequeña de Kurasa, la cual estaba levantando con su mano derecha.
-Espero que a mi cariño le esté yendo mejor del otro lado.
Por otra parte, detrás del templo en donde también se encontraban estalagmitas con estatuas de los dos tipos de zorros, Sorato estaba rodeando una estalagmita de una estatua de Kurasa, mirándola con atención como si tratara de encontrar alguna clase de mecanismo oculto o algo por el estilo.
-No hay, no hay nada...
Desesperándose cada vez más, Sorato dejó de darle vueltas a la estalagmita para ponerse erguido delante de la estatuilla de Kurasa, mirándola de forma fija.
-No hay nada, por más que hemos buscado no hemos sido capaces de encontrar algo que me ayude a encontrar respuestas a mis dudas, incluso intenté comunicarme con Kurasa dentro de la habitación del templo por medio de oraciones, pero nada funcionó...
Mostrándose cada vez más frustrado, Sorato comenzó a rascar su cabeza con su mano derecha a fin de poder encontrar algo que le fuera de utilidad dentro de su cabeza, todo mientras miraba a los ojos verdes de la estatuilla de Kurasa delante de él.
-No, es inútil.-Declaró al apartar su mano de su cabeza.- No soy capaz de encontrar algo de utilidad en estos momentos, tal vez Nozomi esté corriendo con mejor suerte, debería de ir a verla.
Arrojando un suspiro al aire, Sorato comenzó a caminar hacia el costado derecho del templo. Llegando a la parte delantera del mismo, Sorato de inmediato se encargó de fijar su mirada en Nozomi, quien estaba mirando debajo de una estatuilla de Kurasa que estaba levantando. Viendo la mirada de frustración que Nozomi estaba mostrando en algunos momentos Sorato fue capaz de notar que ella se encontraba en las mismas condiciones que él, incapaz de encontrar algo que sea de utilidad.
-Así que está en las mismas...
Nozomi dejó la estatuilla sobre la estalagmita que le correspondía, arrojando un suspiro de desilusión.
-Pues parece que tampoco hay algo de utilidad aquí para mi cariño.
-Parece que te encuentras en las mismas que yo, Nozomi.
Al escuchar la voz de Sorato, Nozomi de inmediato desvió su atención hacia el templo, viendo a Sorato mirándola desde un lado de los escalones de madera.
-Sí, parece que todavía no soy capaz de encontrar algo que te sea de utilidad, cariño.-Reportó llena de infelicidad e insatisfacción.
-Sí, ya me lo imaginaba, Nozomi.
Arrojando otro suspiro de desilusión al aire, Sorato fue hasta los escalones de madera y tomó asiento sobre el segundo de ellos, sin dejar de ver a Nozomi.
-Pero no te preocupes, Nozomi, ya no es necesario que sigas buscando de forma inútil entre las estalagmitas y las estatuillas de los zorros.
-¿Eh? ¿Qué dices, cariño?-Preguntó llena de sorpresa.
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La mayor desgracia de dos historias (2 Gaidate no saidai no fuko)
ActionEl joven Furukawa Sorato, un estudiante normal como cualquier otro, al menos para él y algunos de sus conocidos, estará por descubrir que es más de lo que imaginaba y que su vida dará un giro de 180 grados cuando sepa la verdad de sus orígenes y de...