23 de julio

23 de julio del 2010

Julio 23 del 2010

" ¿Alguna vez te has preguntado qué ocurre luego de la muerte? Si tu respuesta es positiva, quiero
que sepas que no eres el único. Más de una vez me he quedado despierto por las noches,
deambulando en mi habitación pensando en que ocurrirá luego de que mi corazón deje de latir y mi
alma abandone mi cuerpo. La muerte es algo inevitable, por lo que no hay razón para tenerle miedo,
ahora si eres como yo, a lo que si le temes es al hecho de que no sabes cuando vas a morir, no sabes
cuándo será la última vez que tendrás la oportunidad de besar a la persona que te gusta o la última
vez que comas en tu restaurante favorito, o que le dirás "te amo" a tus padres. Estos pensamientos
me han llevado a solo creer y emocionarme por el presente ¿de qué sirve estresarme por cosas que
no se si algún día tendré?
Algo de lo que si estoy un poco más confiado es de lo siguiente: hacia donde sea que tu alma decida
ir luego de que abandone tu cuerpo, depende mucho de las decisiones que tomaste mientras vivo.
Las personas solo creemos en dos lugares a donde podemos ir luego de esta vida el Cielo y el Infierno.
Por otro lado, mis creencias me han llevado a la conclusión de que nosotros creamos nuestro Cielo y
nuestro Infierno, no pienso que sea esa ¨generalización¨ que se ve y estamos acostumbrados a
escuchar. Un ejemplo, si tu lugar feliz es un bar y estas destinado a ir al Cielo, pues estarás por toda
la eternidad en dicho bar, y así mismo lo que más te aterrorice o te repugne, será tu Infierno. Solo tu
controlas hacia dónde vas.

Mami, sé que tu encontraras esto y vas a pensar que lo que me paso es tu culpa, pero debes entender
que esta fue mi decisión como ser humano. No llores porque no estoy a tu lado; mejor alégrate
porque estoy en un lugar donde me aceptan y me aman como soy. Sabes que no soy creyente, que
Dios para mí es un personaje ficticio creado por sociedades antiguas para entender lo desconocido,
sin embargo, me estoy poniendo en tus zapatos en este momento y voy a rezarle a tu Dios para
pedirle que te cuide, porque ya no estaré yo para hacerlo.
Te amo mami
Y siempre lo hare
Att. Tu hijo, Mathew Younglane¨

Desde el 23 de julio del 2010, la señora Patty Younglane a estado en constante duelo por la muerte
de su único hijo, Mathew. Patty tiene aproximadamente 6 años preguntándose porque su hijo de 22
años tomo la decisión de quitarse la vida. Ella nunca se ha culpado por su muerte, pero si tiene un pequeño remordimiento interno por no haber  prestado más atención a los pequeños detalles, ya que desde hace tiempo cosas
empezaron a cambiar: esos fines de semana que el se quedaba en casa a pasar el rato, las
misteriosas flores que le llegaban al trabajo todos los viernes de junio y julio sin falta, el pidiendo
perdón sin ninguna razón aparente, la serenidad que iba creciendo en su rostro a medida que el día
de su muerte se acercaba. Y hoy, 23 de julio del 2016 le llega una carta a la Sr. Younglane, con la
misma fecha de la muerte de su hijo, la carta se nota que tiene tiempo estando esperado ser
enviada, pero, sobre todo, ser abierta y leída por alguien.
Luego de leer la carta que su hijo había escrito antes de morir, una ráfaga de paz invadió su cuerpo,
no sé cómo ella tuvo la capacidad de entender las razones de su muerte mediante un escrito tan
breve y poco detallado como este. Ella se levantó de la silla de donde estaba leyendo la carta y se
dirigió hacia el estante que se encontraba en la sala de su casa, se puso de puntillas hasta alcanzar
en libro que se encontraba en el estante más alto del librero y tomo un libro con la cara de su hijo en la portada, ella lo había mandado a hacer para tener los mejores momentos de este guardados en
un solo lugar. Guardo la carta en una página al azar, puso el libro en su lugar, y se fue a la cocina y
empezo a hacer la cena, ya que su esposo llegaría pronto a casa.

Espero les haya gustado este corto. Quisiera que, con honestidad, me dijeran si les gustaría que haga una novela en la cual explica mejor la historia de Mathew.
Déjenlo en los comentarios