𝑨𝒎𝒂𝒏𝒕𝒆𝒔 𝒅𝒆 𝒍𝒂 𝒍𝒐𝒄𝒖𝒓𝒂 • 𝑫𝒆𝒔𝒕𝒊𝒆𝒍 𝒔𝒆𝒎𝒊 𝒂𝒖

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El ángel y el demonio llevaban una semana juntos, se habían ido a un pequeño pueblo en el estado de Oregón y estaban hospedados en un hotel. La cacera les dio el cuarto mas grande y más alejado gracias a los encantos del rubio.

El pueblo era lindo y al ojiazul le gusta porque había muchas abejas con las que se divertía.
Pero ese día no le fue posible salir a jugar pues una fuerte lluvia se extendía por el lugar.

En cambio estaba a punto de hacer otra de sus cosas favoritas a parte de jugar con abejas, tener sexo con el demonio. Tenerlo en la cama de esa manera lo hacía ponerse duro sólo de verlo, bendita Internet que le dio esa idea hace unos días.

-¿Qué tan importante es el lápiz labial para ti Dean? -dijo pasando los dedos de su mano derecha por la piel desnuda del menor-

El rubio trato de hablar pero el trapo en su boca de lo impedía. Castiel lo tenía atado con unas cuerdas con símbolos anti-demonio que no le permitían zafarse, estaba indefenso boca abajo en la cama sin poder ver al ángel.

El ojiazul sacó un labial de color rojo de un bolsillo de su gabardina, puso una buena cantidad en sus labios y lo volvió a guardar. Se posicionó en la cama, encima del ex-cazador, con una pierna a cada lado de las cadera del contrario. Puso sus manos en las caderas del rubio y comenzó a dar besos en los lugares accesibles, fue descendiendo hasta llegar a esas redondos nalgas, las lleno de besos dejando la marca de sus labios y de vez en cuando soltaba una que otra mordida, ganándose así gemidos de parte de su pareja. Cuando el labial había desaparecido por completó bajo a la entrada del menor y comenzó a lamer como si su vida dependiera de ello, con sus manos se ayudó a separar las mejillas para tener mayor acceso, no bastandole al ángel, con su lengua embestia la rosada entrada, haciendo que el demonio se retorciera y soltara gritos de placer.

Cuando se despegó de ahí un hilo de saliva quedo suspendido, la respiración de Dean era errática y acelerada.

-Joder Cas, sólo follame de una vez - el ojiverde se retorcida por querer liberarse-

- Como tu órdenes Dean - el ángel lo volteo para que quedará de frente-

El rubio estaba sudado y con el pelo hecho un desastre, su rostro se encontraba rojo por la presión contra las almohadas. Para el inocente Cas eso era algo hermoso. Se quito la gabardina y la demás ropa junto a sus zapatos, quedando completamente desnudo frente a su amante.

Tomo a Dean de las rodillas y las separo lo más que pudo, se posicionó en medió y de una sola estocada entro en él, el ex-cazador solto un gruñido.

-Maldicion Cas, ¿porque no me preparaste antes? Esto duele como el infierno.

- No creo que el dolor se asemeje al infierno Dean -dijo el ángel viendolo a los ojos-

- Como sea, eres un animal por entrar de esa manera en mi - se quejó el rubio, aunque no iba a admitir que le gustaba que fuera rudo con él -

- Lo siento Dean, pero ya no podía esperar, te ves tan bien de esta forma  - se disculpó el ser celestial-

-S-solo muevete Cas -volteo su rostro para no verlo a los ojos-

El ojiverde no tuvo que pedirlo otra vez pues el moreno comenzó con un lento vaivén de caderas, adentrándose  cada vez más profundo. Con una mano lo sostenía de las caderas y con la otra se encargaba de masturbar el miembro ajeno. 

Pronto los gemidos del demonio se   escuchaban más fuertes, cuando el ángel tocaba el punto exacto un gruñido salía de esos labios pecadores. Sin darle tregua alguna siguió embistiendo en ese  punto pero de manera más  rápida haciendo que prácticamente comenzará a ver estrellas.

-C-cas más rápido, más rápido -el ángel había quitado las  cuerdas de las manos del menor y este se aferró a las sábanas-

-Dean estas tan apretado, tan caliente que sólo con estar dentro me podría correr -aumento los movimientos de su pelvis llegando hasta lo profundo del ojiverde-

Arqueo la espalda y sintió una corriente recorrer hasta su bajo vientre, de su miembro comenzó a brotar el característico líquido blanco y este mancho el pecho del ángel y el suyo. Mientras tanto el ángel sintió como la entrada del rubio lo envolvía deliciosamente y soltando un gemido se corrió dentro de su pareja, llenando su interior con su semilla. Se dejó caer recargando su frente en el hombro del menor y sin salir de él.

-Joder, eso ha estado maravilloso, deberíamos repetirlo después -
dijo Dean con la respiración agitada mientras repartia besos en el hombro del moreno-

El ángel solto una risa, levanto la cara y miro sonriendo a su protegido, el Demonio se pregunto como algo tan puro podría estar con él aún siendo un moustro.

-Te voy a tomar la palabra justo a ahora Dean - el ángel se levantó enseguida y salió de su interior sacándole un gemido por el movimiento-

Como todavía estaba algo sensible por el reciente orgasmo el ángel lo volteo prácticamente sin ninguna dificultad, tomo una almohada  y la puso debajo del cuerpo del rubio dejando su trasero al aire y totalmente expuesto para él.

-Voy a volver a follarte Dean

Después de todo no era tan puro, pensó el ex-cazador, este Castiel demente le gustaba pues aunque fuera tan ínocente en varias cosas en otras no lo era, y la prueba era que ahora mismo lo estaba penetrando tan duro y sin mostrar una pizca compasión por su trasero. Llegaba hasta el fondo y tocaba su punto dulce, el moreno lo tomo del pelo y jalo mientras se movía velozmente dentro de él, el semen de su corrida anterior le facilitaba la tarea.

-Dean, mi pene dentro de ti se ve muy bien - dijo echando la cabeza para atrás cuando su segundo orgasmo estuvo cerca, unas cuantas embestidas más le bastaron para volverse a correr dentro del demonio-

Con la respiración agitada volvió a voltear al ojiverde que estaba igual que él tratando de regular su respiración y sin ningún aviso metió el miembro ajeno en su boca, gandose un fuerte grito del menor, se entretuvo lamiendo un rato y succionando a veces en la punta, jugando un poco con sus testículos y mentiendolos a su boca, tomaba todo lo que podía y lo demas lo abarcaba con su mano, un par de minutos después sintió el tibio líquido en su boca y se encargó  de tragarlo completo, saboreando así la semilla del menor. Volvió a la altura de su pareja y envolvió sus labios con los ajenos, dándole a probarse él mismo.

-Sabes tan bien Dean, podría provarte siempre.

-Te dejaría hacerlo cariño pero necesito descansar y tu también, anda 

El ángel se acomodó quedando detrás del demonio y pegando su pecho a la espalda contraria, pasando su brazo por su cintura para atraerlo más a su cuerpo. Tomo la sábana que estaba casi tirada en el suelo y los tapó con ella.

-Deacansa Dean - dejo un beso en su nuca y escucho como el menor dormia casi al instante-
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20 mil años después, espero no me maten o si no ya no abra CAPITULO)? .-. Bueno, si les gustó voten y comenté 💕🌼