Narra Melissa
Jeremy había huido cuando me dijo sobre su pequeña. Estos últimos cuatro días me habían servido para pensar sobre la situación en la que nos encontrábamos. Nunca lo hubiera pensado y ni siquiera puedo imaginármelo. Yo misma había visto nuestro futuro y no había ni un sólo rastro del pasado. Y ahí estaba yo, arrodillada en el césped frente a un lago, preguntándome si la luna se equivocó al mostrarme mi futuro.
- La luna nunca se equivoca, Meli, es probable que sólo estés confundida. - se escucha la voz de Tyler a mis espaldas, pero no volteo.
Tyler y Karla se sientan a mi izquierda, mientras que Denise y Jack lo hacen a mi derecha. No quería que nadie supiera de la batalla que tenía en mi interior, era sólo algo que me concernía a mi misma.
- Jeremy sólo quería protegerte. - habla Karla, provocando que mi vista se posara en ella rápidamente. - Está bien......él sólo quería protegerse.
- La idea de haber perdido a un hijo debió quemarlo por dentro, Mel. - susurra Denise tomando la mano de su alma gemela.
- Pero él se culpa. - susurro yo mirando mi reflejo.
El silencio reinó por varios segundos. Una pequeña sonrisa se forma en mi rostro al pensar que tal vez, sólo tal vez, mi hija ya crecía en mi vientre. Pero no sé porqué ahora tengo miedo de lo que pueda pasar cuando ella llegue. ¿Y si la perdía? ¿Y si por mi culpa le llegaba a pasar algo?
Sin darme cuenta ya estaba de pie mientras me debatía en mi interior. Mi miedo hacía que temblara ligeramente, nunca había estado tan aterrorizada en mis casi diecinueve años de vida. Comienzo a retroceder mientras los chicos me veían extrañados, pero yo sólo quería escapar de ése miedo que había comenzado a consumirme sin yo haberme dado cuenta.
- ¿Meli? - Jack se levanta del suelo y se acerca a mi con cuidado. - ¿Estas bien?
Parpadeo y salgo de mi ensoñación. Todos me miraban preocupados y Jack esperaba mi respuesta, pero no podía decirle que no estaba bien, no podía decirle que estaba aterrorizada, y no podía decirle el porqué.
<Todo va a estar bien, yo estoy contigo ¿recuerdas?>
Sí, gracias Ash.
Mi loba había logrado tranquilizarme un poco, pero no por completo. Sentía una enorme opresión en el pecho, algo no andaba bien, algo estaba a punto de pasar. Algo en mi interior amenazaba con destruirme, ¿que era ése malestar que sentía? Les hecho un último vistazo a los chicos y salto convirtiéndome en Ashanty. Comienzo a correr por el bosque con los pensamientos nublándome la vista, algo me hacía daño, algo estaba inquietándome. Siento un dolor tremendo en mi cabeza y aullo por ello. Sin saber porqué, me dirijo a un lugar en específico. Mis patas se ensuciaban de barro, me salpicaba en el rostro, pero seguía corriendo hacia ésa dirección desconocida.
Llego al lugar en donde el bosque se divide de la carretera. Una batalla brutal estaba teniendo lugar frente a mis ojos. Mi padre y Jeremy estaban moliendo a golpes a un Drake que no paraba de reír. El hierro no paraba de brotar por sus heridas, pero me sorprendí al escuchar las palabras de Ashanty.
"No dejes que lo lastimen"
Los ojos verdes de Ashanty no se apartaban de Drake. Sentía la angustia crecer en mi interior y es cuando no supe lo que hacía. Comienzo a correr hacia donde se encuentran y aullo haciendo que se detengan.
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¿Enamorarme de un lobo? ¡JAMÁS!
FantasyLicántropos y vampiros, creados por el mismo ser y enemigos por naturaleza. Nadie podía recordar porqué tanto odio, sólo sabían que aquello estaba destinado a ser una guerra sin fin. Melissa Harrison es hija del líder del único clan mayor existente...