Los últimos maestros Jedi

XXV

Sheilak POV:
La boda de mi hermano fue muy íntima. Estábamos en el bosque,además mi hermano Mark y su novia, también estaban Obi-Wan, Poe Dameron, BB-8, algunos solados amigos de mis hermanos y de la novia. Leia oficiaba la ceremonia. Yo estaba sentada al lado de Obi-Wan.
-La verdad es muy bonito como dos personas se demuestran su amor -me dijo Obi.
-Se lo merecen, sobre todo Erik. Me alegra verle feliz y formar una familia.
-Seguro que Erik será un padre estupendo. Arous tiene suerte de tenerle.
Mi hermano y Arous se dieron el sí quiero y se besaron.
Todos nos levantamos y lo felicitamos. Me alegraba mucho por él, se merecía ser feliz por una vez.
Arous quería lanzar el ramo para que lo cogiéramos algunas de las mujeres. Yo me aparte. No estaría bien visto que una Jedi atrapase el ramo.
Me quede junto a Obi.
-¿No quieres atraparlo? -me pregunto.
-Creo que no estaría bien. Supuestamente yo no debo de enamorarme y creo que un Jedi se case no estaría bien visto...pero a veces pienso que es injusto que a un Jedi le prohiban tantas cosas.
-Yo también pienso lo mismo, además nosotros nos hemos enamorado y creo que ha sido mejor que ocultar esos sentimientos. Puede que ahora no estemos preparados para decirles que estamos juntos, pero con el tiempo lo entenderán.
-Por esas cosas que dices me enamoro más de ti. Eres un gran hombre y me alegro de que estemos juntos.
Los dos nos agarramos la mano. Sentía como su energía traspasaba a mi mano.
Arous lanzó el ramo y jamás imagine lo que iba a pasar. El ramo vino hacia a mi y lo agarre con las manos antes de que me diera en la cara.
-Ya sabes cuñada, de una boda sale otra -dijo Arous.
-Lo..no..no puedo aceptarlo. Yo no..-no podía terminar de hablar.
-El ramo te ha elegido a ti y no hay nada más que hablar -me dijo Arous y después me abrazo.
Después se fue de nuevo con mi hermano.
-¿Obi tú no habrás utilizado la fuerza para atraerlo no? -le pregunte.
-No, jamás haría eso -me respondió y al mirarle a los ojos supe que no me mentía.
-Te creo...bueno será mejor que vuelva A mi habitación. Tengo que terminar una cosa.
-¿Quieres que te acompañe a tu habitación? -me pregunto Obi.
-Claro -le dije y le dediqué una sonrisa.
Nos despedimos de los invitados, ellos también se iban a sus habitaciones. Mañana saldríamos rumbo a Jakku.
Al llegar a la habitación de Obi, me invitó a que entrara. Cerró la puerta y los dos nos acercarnos. Nuestras caras se acercaron y nos dimos un beso muy intenso. Nos faltaba el aire y cuando no podíamos más nos separamos. El ramo cayó al suelo y Obi lo dejó en la mesa
-Tenia que hacerlo, no podía aguantar las ganas -me dijo Obi.
-Yo apenas me podía aguantar, al darme la mano me faltó nada para besarte -me agarre a su cuello y nos besamos de nuevo.
Nuestras capas cayeron al suelo y Obi me llevo a la cama. Las ropas empezaban a molestarnos.
-¿Estas segura? -me dijo Obi mirándome con sus ojos azules.
-No me puedo resistir con esos ojos...pero quiero hacerlo y más si es contigo.
Empezó a besarme por el cuello y era como si la electricidad recorriera mi cuerpo.
Yo empecé a quitarme las botas y luego la túnica de Obi.
El hizo lo mismo, primero las botas y luego empezó a quitarme mi túnica.
Nos quedamos con el torso desnudo y yo todavía conservaba e sujetador. Pero vi como estaba perfectamente trabajado el cuerpo de Obi. Nos miramos mutuamente y comenzamos a quitarnos los pantalones. Solo nos quedamos en ropa interior.
Nos volvimos a mirar a los ojos y los besos comenzaron de nuevo. Cada vez eran más salvajes y buscábamos más contacto físico uno del otro.
Yo no podía parar de pasar mis manos por su torso.
Obi desabrocho mi sujetador, mis pechos quedaron al aire. Empecé a temblar un poco.
-Ven, vamos dentro de la cama.
Los dos nos introdujimos en ella y los besos continuaban. Nos quitamos la ropa interior que nos quedaban y nuestro contacto físico era mayor.
Podía notar como mis pechos tocaba sus pectorales.
Sentía como su miembro estaba erecto.
-¿Preparada? -me pregunto.
-Si...es mi primera vez...solo tengo un poco de miedo.
-Tranquila, también es la mía. Somos Jedi ¿lo recuerdas? -los dos nos reímos - iré despacio. No te dolerá.
Los besos comenzaron otra vez, pero esta vez Obi se fue a mis pechos. Empezaba a besarlos y morderlos con suavidad. Cada vez me excitaba más. Con la otra mano, me tocaba el otro pecho y solo podía jadear.
Volvió a mis labios y nos besamos de nuevo.
Nos miramos a los ojos y sabía lo que venía.
Abrió un poco mis piernas para que él se colocara. Poco a poco empezó a introducirse en mi.
Me besaba para que el dolor fuera más a menos. Hasta que estuvo dentro de mi.
Primero empezó con movimientos muy suaves y las respiraciones iban aumentando conforme él iba moviéndose. Empezaba a aumentar el ritmo y el dolor se convirtió en placer.
Cada ritmo era más rápido y estábamos más excitados cada vez. Los besos eran más cortos pero más salvajes.
No se cuento tiempo estuvimos haciendo el amor y disfrutando del momento. Pero hubo un momento en lo que los dos nos pudimos más y sentí como él se venía dentro de mi.
El acabó exhausto encima de mi. Después se apartó para la derecha y me abrazo.
-Creo que para nuestra primera vez no ha estado tan mal -dijo Obi.
-Pues no. Jamás me imagine que viviré este momento -me giré hacia a él -Te quiero Obi-Wan.
-Yo también te quiero -me dijo y nos dimos un beso.
-Bueno, será mejor que me vaya a mi habitación.
-Puedes pasar la noche aquí si quieres -me dijo.
-Otro día mejor, tengo que terminar una cosa para mañana.
-Esta bien, te veo en la cena.
-Vale -le dije y le di un beso antes de levantarme.
Nos vestimos tranquilamente y no podíamos parar de mirarnos y sonreír tontamente.
Antes de irme, Obi me dio otro beso. Abrió antes la puerta para que saliera sin que nadie me viera. Me hizo una señal y pude salir.
Volví a mi habitación y me sentía diferente. Algo había cambiado en mi.
Fui al escritorio y quería terminar la capa de Obi. La suya estaba ya muy gastada y la nueva le vendrá perfecta.v
No me di cuenta de la hora que era, pero nada más terminarla me quede dormida en la cama.