De la oscuridad a la Luz [Completada]

Capitulo 11

No entendía porqué el padre de Zack me había hecho sentir mal, pues ¿yo qué le hice?. Nada, ni a él ni a Zack ni a su familia. No hice nada que le provocara algo malo de mi persona. No lo entendía para nada.Por alguna extraña razón me importaba demasiado la opinión que tenían sobre mí los padres de Zack. No quería darles una primera mala impresión, sino, todo lo contrario. En verdad me importaba.

Cuando subimos al auto, no quise mencionar lo que había oído de los padres de Zack. Pensé que sería inapropiado hablar de este tema con él, y en esta situación.

- ¿A dónde vives? - me preguntó

- Como a cinco calles de aquí. Es cerca. Yo te indico el camino.

Después de un tiempo, mantuvimos silencio. Yo seguía pensando en lo que había ocurrido con sus padres. Me planteaba diversas teorías, hasta que Zack notó mi preocupación; me quedó mirando un buen rato, o lo que podía porque manejaba.

- ¿Qué te sucede? - me preguntó preocupado -. ¿Ocurrió algo malo? - se preocupó aún más al presenciar mi silencio.

- No nada. No te preocupes.

- Pues sí que me preocupo. Veo que te sucede algo. ¿Estas incomoda?

- No. Sólo que estoy preocupada porque se hizo tarde. Sólo por eso.

- En ese caso, relájate, no ocurrirá nada malo.

- Pero con mi padre tal vez si - susurre. Zack fingió no oír mi último comentario.

Por un momento se me pasó por la mente comentarle lo incómoda que me sentí con la cena, pero creí que por un lado le podría molestar que inculpara de alguna forma a su padre y por otro que le incomodara que le diera tanta importancia. Quedándome con la última opinión, me olvide y preocupé del tema.

- Así que... Tienes una hermanita... - comencé con otro tema para acabar el silencio

- Si - respondió

- No lo sabía

- En serio? Creí habértelo comentado

- ¿Cómo se llama?

- Emily

- Emily! Me gusta ese nombre

Él sonrió

- Y, ¿cuantos años tiene? - le pregunté

- Diez años

- Es pequeña aún.

- Sí.

- ¿Es por aquí? - me preguntó luego de un rato de silencio.

- Sí. A la siguiente dobla a la derecha, y yo te indico mi casa.

- Ok.

Hubo otro silencio. Ninguno de los dos sabía que decir.

- Aquí es. - le dije señalando mi casa.

- Que bella casa - dijo al detenerse.

- Gracias por traerme.

- No te preocupes, ya era tarde.

Abrí la puerta para bajarme. Las luces de mi casa estaban encendidas y se veía el auto de mi padre. Ya era de noche. Esto no iba a ser bueno. Para nada.

Mientras me bajaba escuché que Zack también lo hizo. Me iba a dejar a la puerta.

- No es necesario - le dije, al notar su decisión.

Mantuvo silencio. Cerró mi puerta.

- En serio, sería mejor si te quedas aquí.

- Descuida - Me dijo. Fingí una sonrisa.