*Día 2- parte 2*
Mi cabeza... Me dolía la cabeza. ¿Pero que fue lo que paso? No lo entiendo. Estaba abriendo mis ojos poco a poco y podía escuchar una voz llamándome.
-¿Ellie, cariño?.-era James el que me llamaba.
-Ja... James.-mi garganta estaba muy seca. ¿Cuanto dormí?.-Me duele... La cabeza, ¿Por cuanto tiempo estuve dormida?
-Una día y medio. Me tenias muy preocupado preciosa, la curandera de la manada vendrá enseguida para verte.-sostuvo mi mano con la suya y luego le dio un beso. Mi cuerpo se erizo completamente.
U
n día y medio estuve inconsciente pero, ¿Que lo causo? Ayer estaba muy bien y la comida no pudo hacerme tanto daño, además si ese fuera el caso; a James le habría pasado lo mismo.
James había estado conmigo la mayor parte del día, seguía teniendo un enorme dolor de cabeza y no entendía el porque. James hizo todo lo que podía para hacerme sentir mejor y aunque odie admitirlo, me gustaba que estuviera pendiente de mi. Me hacia sentir muy especial e importante.
-Ellie.-estábamos viendo la televisión en su habitación y yo estaba recostada en su pecho.- Lamento no haber ayudado en un momento así.
-¿A que te refieres?
-Debí estar mas pendiente de ti.-se acomodo en la cama de modo que nos mirábamos a los ojos.-Estuve esperando por ti durante muchos muchos años y cuando te encontré tenia una enorme necesidad de marcarte y hacerte mía, joder no sabes cuanto lo deseo. Pero sabia que debía aguantar estas enormes ganas e ir a el ritmo que tu desees porque no quiero agobiar te, temería que si voy tan deprisa tu decidas irte. Cuando te desmayaste no sabia que hacer, tenia miedo a perderte cuando recién te encontré. Ellie, cuando un hombre lobo encuentra a su mate tiene la necesidad de hacerla suya, darle todo lo que siempre a querido; quiero darte todo lo que siempre has deseado, se que tu sueño es vivir como una humana normal pero sabes que eso ya no sera posible, pero puedo darte todo lo que siempre has querido aquí... Conmigo, en nuestra manada.
-James... Yo...
-Shh, no digas nada ahora. Te daré el tiempo que creas correcto pero al menos permite me esto. Por favor.
Fue acercando su rostro al mio hasta que nuestras respiraciones se volvieron una y nuestros labios se rozaron levemente. Todo mi cuerpo se erizo y por alguna razón deseaba que me besara, mi cuerpo lo pedía desesperadamente. Cuando nuestros labios se juntaron todo mi cuerpo se calentó y ansiaba mas que un suave y lento beso. ¡No aguantare!
Dispuesta a aumentar aquel beso, me senté en sus piernas y esta vez era yo quien marcaba el ritmo. Estaba excitada y el igual, mi cuerpo ansiaba mas y mas; necesitaba mas.
-Preciosa, si sigues así no voy a poder detenerme.-pero quiero parar.
-Entonces no te detengas.-¿Pero que fue lo que dije? Ellie, detente.
James lanzo un pequeño gruñido cuando mordi su labio inferior, quiero detenerme pero mi cuerpo no lo permite; ¿Que es lo que sucede? James me había recostado en la cama y ahora era el quien tenia el control, mi cuerpo se excito aun mas cuando una de sus manos empezó a recorrer todo mi cuerpo. Mi cuerpo quería mas, pero yo quiero detenerme. James seguía tocando me y besando me ferozmente hasta que escuchamos unos leves golpes en la puerta.
-Maldita sea.-James se separó de mi y agradecí volver a tener mi propio espacio. Cuando James llego a la puerta se podía escuchar la voz de una mujer mayor.-Ellie, quiero presentarte a alguien... Ella es Josefina, la curandera de la manada.-aquella mujer a pesar de tener sus años seguía manteniendo su encanto con sus ojos color avellana y un cabello blanco.
-Mi luna, es un placer. He venido para hacerle un chequeo que el alpha este seguro de su bienestar.
Josefina empezó a tocar mis puntos vitales y su rostro era cada vez mas confuso. ¿Que esta mal?
-Señor, debo hablar con usted.
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Hola, hola!
Lo se, volvió a pasar lo mismo... He tenido varios problemas que me han impedido actualizar... Pero hice lo posible para poder traerles este cap hoy..
Disfruten lo lobitas!
Les quiero!
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Alpha Rey
Hombres LoboEllie Pierce es una chica que creció siendo utilizada por unas bestias llamadas "Hombres Lobos" que siempre se aprovechaban de su debilidad humana hasta que James Lexington apareció en su vida, ¿Acaso el sera igual?¿Qué sera de ella? 《-Eres tan pat...