Capítulo XXVI - Preocuparse u ocuparse.

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Cada una toma uno y lo lee:

"Deberíamos tener un periódico, esto se está haciendo costumbre, pero no nos pueden culpar, ustedes son los que hacen el chisme que contamos. En fin, como hoy es jueves, traemos un tbt de nuestra primera víctima: Sandra Fallon. Resulta que 'Sandie' se escapó todo el fin de semana gracias a un permiso falso, ella no fue capaz de hacerlo sola. Se preguntarán quién lo hizo, y lo mejor: con quién pasó el fin de semana si su novio está de viaje. Fácil, solo hay que ver de nuevo la foto de la primera nota que hicimos, parece que el Sr. Berry tiene unas formas muy extrañas de enseñar Inglés. Hasta la vista, Sandie".

Y como de costumbre, por el reverso de la hoja había una foto de Chris besándome.

Entre Hayley, Britney y yo intentamos quitar todos los papelitos que veíamos por ahí para que ya no los puedan leer

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Entre Hayley, Britney y yo intentamos quitar todos los papelitos que veíamos por ahí para que ya no los puedan leer. Aunque creo que es una idiotez, ya todo el Internado debe haber visto la foto. Puede que hasta el director la haya visto y se arme el lío del siglo.

—Ahora sí comenzaré a investigar quién está detrás de todo esto —les digo.
—¿Eh, ahora sí? —pregunta Britney, algo desconcertada. Hayley me da un codazo. Se me olvidó por completo que juré no decirle nada a Brit.
—Sí. Es que ya tenía la idea de investigar, pero esto es el colmo, ya no pueden seguir publicando esas cosas —explico.
—Yo creo que es mejor que lo dejes así. Ya se cansarán.
—Como quieras, Hayley. Entiendo que quieras permanecer al márgen —le digo en tono comprensivo.
—Es mejor que no sigan haciendo daño a nadie. Yo te apoyo. Quiero investigar contigo —expresa Brit.
—Está bien, luego nos ponemos de acuerdo. Ahora debo ir a hacer algo. Nos vemos después —les digo.

Todavía llevo una de las notas en mi mano derecha, por el enojo se arrugó un poco. Camino hasta el final del pasillo, me detengo por un momento frente a la puerta de la oficina de Chris, toco solo un instante y entro. Al voltear hacia mi, me mira desconcertado.

—Pensé que no querías saber nada de mi. ¿O ya cambiaste de opinión? —dijo en tono divertido.
—No, si no fuera importante no estuviera aquí.
—Dime, te escucho.
—Mira esto. —Puse sobre la mesa el pedazo arrugado de papel amarillo. Lo miró un segundo, lo tomó y lo leyó. La expresión de su rostro cambió, ahora se le veía preocupado—. ¿Qué te parece?
—Esto es grave.
—¿Te parece?
—¿Y por qué me atacas a mi?
—Porque si no se te hubiese ocurrido la genial idea de falsificar el permiso no estaría en este lío.
—Estaríamos, esto también me afecta.
—¿Sabes que ayer el director se dio cuenta del permiso falso?
—¿Qué?
—Sí, obviamente mis padres se enteraron y ahora tengo un problema muy grande. Estoy castigada y me voy a quedar todo el fin de semana estudiando. Y todo por tu culpa.
—Perdoname, lo tenía bajo control, pero el mensaje de Alice hizo que me olvidara de eso.
—Claro, Alice —respondo con fastidio.
—Dices que ya no te importo, pero te pones celosa.
—No estoy celosa, tu ya no me importas —miento—. Pero ella me sigue cayendo mal.
—¿En serio ya no te importo? —Se inclinó hacia adelante, quedamos muy cerca, podía sentir su agitada respiración—. No te creo.
—De nada vale que te siga queriendo, lo que me hiciste fue horrible —dije. Lo miré fijo.
—Eso quiere decir que me sigues queriendo.
—...
—Sandie, solo la llevé a cenar. No sé qué hacer para que me creas. No quiero que sigas molesta conmigo por algo que no hice.
—Yo tampoco quiero.
—¿Entonces, estamos bien?
—Supongo que sí.
—¿Cómo que supones?
—No puedo olvidar de un momento a otro lo que pasó. Pero definitivamente no quiero estar sin ti. Solo que no quiero más dramas, no quiero ningún otro problema, ya estoy cansada de todo eso, quiero que quede claro.
—Es decir, ¿me estás poniendo a prueba?
—Sí, eso es exactamente lo que quiero decir.
—No debes preocuparte, esta vez no habrá ningún problema.
—Eso espero. —Me toma la mano, nos damos un beso, sonreímos.
—Dime algo, ¿la nota la leyó mucha gente?
—Supongo que sí, pero mis amigas y yo quitamos todos los que estaban por allí.
—Sandie, esto no puede seguir pasando, tiene que parar, o puede terminar muy mal; podrías tener problemas muy serios con tus padres, incluso podrían expulsarte, y yo perdería mi trabajo, y mi carrera.
—Ya sé, tienes razón. Quiero que me ayudes a desenmascarar a quien está detrás de esas notas.
—Estoy de acuerdo.
—Cuando las notas anteriores hablaron mal de Brit, tenía pensado investigar con Hayley, ella me había dicho que no le contara a Britney. Ahora Hayley no quiere saber nada de eso y es Brit la que quiere investigar conmigo.
—Mmm.. Está bien, aunque no debemos confiar demasiado en los demás, aunque sea tu amiga. Dile a Britney que mañana nos vemos aquí.
—Entiendo —le digo, y en ese instante recuerdo que dejé de hacer cosas importantes por culpa de las notas—. Tengo que irme, aún no he hecho el informe de mañana.
—Espera, puedes hacerlo aquí. Si quieres te ayudo. —Acepto su oferta. Cuando termino me despido con un tierno beso y Chris me recuerda que nos veremos mañana.

Me voy a mi habitación a descansar, el estrés de hoy me agotó, así que me quedo dormida al instante.

* * *

La luz del sol se cuela por entre las ventanas. Me levanto, tomo una ducha fría para empezar el día con energía. Luego me visto y salgo a desayunar. Me reuno con mis amigas y nos vamos juntas a clases, no sin antes ir al locker.

En la clase de Biología aprendí muchas cosas interesantes. La profesora de Geografía me felicitó por mi informe, tuve una calificación muy buena. El cuento que había hecho le gustó tanto a la profesora de Literatura, que me dijo: —Van a hacer un concurso de cuentos, deberías participar. Eres muy buena escribiendo—. Y creo que tiene razón, voy a pensarlo. Podría ser divertido.

Fui a mi cuarto a darme una ducha y a cambiarme de ropa. Brit estuvo haciendo una tarea mientras me bañaba, luego se fue conmigo.

Abrí la puerta de la oficina inmediatamente después de dar dos golpecitos. Al verme, Chris se levantó y fue a saludarme con una amplia sonrisa en su rostro.

—Vine con Britney —le advertí. Cuando mi amiga asomó la cabeza para entrar y saludar, Chris cambió un poco la expresión.
—Eh, hola —saludó Brit.
—Hola —le respondió él—. Tomen asiento, chicas. Brit se sentó junto a mi. Hablamos de las notas, cada uno dijo si tenía algún sospechoso. Todo el rato fue un poco incómodo por Chris y Brit.

Sentí mi móvil vibrando en el bolsillo del pantalón y a los dos segundos comenzó a sonar. Miré la pantalla: una llamada perdida y un mensaje de Jeremy. Y estaba llamando de nuevo.

—Eh, chicos. Creo que Jeremy regresó. Ya vuelvo, debo contestar —dije. Chris tenía una expresión de fastidio en su rostro. Salí de la oficina para contestar la llamada.

Terminó la conversación y fui de regreso a la oficina, cuando entré vi algo que no me gustó: Chris y Britney muy cerca el uno del otro, apunto de... No, estoy loca.

—¿Qué pasa aquí? —pregunté.

Triángulo Amoroso ⚠ Juego Peligroso © No terminadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora