El mayor salio de la cocina enojado. Caminaba rápido y sus pasos resonaban duramente contra el suelo de la cocina a la sala. Estaba mas que molesto. Se podía incluso ver la vena de su cuello que combinaba perfectamente con su rostro rojo. Si fuera otra ocasión, diría Ho Seok que parecia una cereza.
-¡¿POR QUE LA NEVERA ESTA VACÍA Y NADIE DIJO NADA?!-se cruzo de brazos una vez llego a la sala y se coloco en medio. Observo a todos los chicos presentes, esperando una simple respuesta que claro, lo molestaría.
-Jin hyung, calmesé, si Yoongi hyung se despierta se va a enojar.-Tae dijo desde el sillon en el que tambien estaba sentado Jungkook.-Si quiere vamos al super todos y reunimos lo de la semana.
-Bien-respondio aguantandose el grito de ira que queria dar, en su mente el mayor ya estaba atacandolos con su chancla rosada con pedreria-Pero ya vamonos, tengo que hacer la cena y no creo que quieran pasar hambre de nuevo.
-Nam hyung!-grito Hoseok-¡Vamos a la tienda!¡Rápido!-y acto seguido, el esperanzo corrio a la entrada del departamento, apurado.
-Ok, esperenme un poco, hace frio afuera-dijo saliendo de su habitacion mientras se ponia una chaqueta. Esa chaqueta de cuero que le quedaba increiblemente sexy. En la mente de uno de aquellos ojos que le observaban hubo un pensamiento bastante...erótico, un pensamiento para nada inocente.
-Donde esta Jiminnie?-pregunto Jin, no habia visto al enano desde hacia unas horas-¿Vendra con nosotros? ¿O se quedara?
-Jin hyung, Jiminnie esta dormido en su habitacion, y Yoongi hyung igual-jungkook imito a Nam joon y se puso una chaqueta gruesa. Una roja con detalles negros, y una vez puesta, puso sus manos en los bolsillos.
Salieron y al escucharse el golpe de la puerta cerrandose, pasados unos minutos, de una habitacion se asomo un rostro sonriente. Una sonrisa inocente y juguetona para aquella persona, el más amargado del grupo.
-Jiminnie~ estamos solos~-Yoongi se acerco a la puerta del mas joven y la abrio, encontrandose con unos brazos que lo rodearon y unos labios que le rozaron los suyos. Una risita pequeñita se formo en el contrario.
-Hyung...-un puchero se formo como suplica al mayor.-Baby se siente solito...A sido un niño muy malo...¿merece un castigo no cree?-dejo su puchero y movio el cuello hacia un lado al sentir el apreton en su cuello y cadera, obligandole a pegarse a la pared. Jadeo al sentir el frio, su sudsdera fue removida un poco.
El mayor rápidamente beso repetidas veces su cuello y gritaba que era de su propiedad. JiMin solo sentia la necesidad de ser abrazado y solo por su hyung.
-Hyung...folleme como solo usted sabe hacerlo...-su rostro era una obra de arte. Labios hinchados y rojos, sudor bajando por su cuello, ojos llenos de lujuría y el amor claro que sentía por el hombre que lo estaba aprisionando fuertemente.
-Daddy te hará sentir muy bien, baby boy-la risa ronca del mayor solo hizo que el menor soltara un sonoro gemido gutural.
Se besaron de nuevo, en tanto se movian a rastras a una habitación que era cercana. Risas complices iban y venían junto con gemidos.
...
-¡Nam joon te dije que no tocaras nada y fue lo primero que hiciste!-Jin regañaba al pobre chico que su unico error fue haber tocado con su dedo un estante haciendo que cayera de la nada.-¡Tiraste un estante de vinos! ¡¡Y son caros!!-le golpeo en el hombro, y más que molesto, había pasado un susto al ver el incidente.
-Perdoneme Jin hyung, me tropece...-bajo la cabeza mientras los menores reian. Era vergonzoso que eso pasara cada que salian. A cualquier parte que fueran, el peligro tenia nombre y apellido: Kim Nam Joon.
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CONFESIÓN
FanfictionLa confesion de algo, tan dulce y adictivo. -Dejeme besar sus labios, porfavor-ruega el chico de ojos miel. -¡Ven aquí mocoso, te enseñare lo que es un beso!-refunfuña el mayor.