CAPÍTULO 30: EL FARSANTE

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POV NARRADORA

Es un día... ¡uf!

Ana sale corriendo del departamento que comparte con Christian. Desde que vive con él tienen sexo casi todo el tiempo; sólo descansan el uno del otro mientras trabajan y duermen un poco.

Christian ha tratado de encontrar el momento para terminar con Anastasia; o de decirle la verdad...

Si.

Leen bien.

Este pobre tarado ya no sabe qué quiere en realidad. No se atreve a darle un fin a esta situación; ni se atreve a darle un nombre a lo que tiene con Anastasia. De lo único que tiene certeza es de que la desea; quiere todo lo que ella quiere entregarle.

Ana... Pobre Ana.

No tiene ni idea de lo que le espera.

*   *   *

Ana llega a SIP corriendo y ve con asombro y agrado que toda la recepción fue remodelada y habilitada para trabajar en menos de un semana.

Ve al señor Javier vestido con un mono de trabajo color burdeos y bordado en letras verdes en escudo de su constructora. La señora Cristina viste también un overol rojo y se recoge el cabello en una coleta alta y se trepa a un andamio tras su esposo para juntos soldar un pilar de tridiloza que estará sobresaliendo desde el interior hasta el exterior del edificio.

-¡Wow! Ni idea de que hay junta más tarde como para que ellos dos estén trepados ahí arriba, ¿O si?- le comento a Jack que miraba como trabajan.
-Según dice uno de sus empleados, el señor Javier y su esposa le gusta involucrarse en sus proyectos. Eso hace un verdadero líder- responde Jack sin dejar de mirar las chispas que caen del techo.
-¿Y la junta?- pregunto nerviosa.
-No dudo que lo terminen. Se ve que para su trabajo los señores son muy dedicados. Seguramente estarán listos- le dice Jack con un claro gesto de admiración.

Se van los dos a sus lugares para prepararse. Tienen un día importante por delante.

*   *   *  

GREY HOUSE...

-Christian, tendré que cancelar la toma de posesión de SIP...- le avisa Ros por teléfono a Christian.
-¿Qué sucede, Ros?- le responde confundido al otro lado de la línea.
-Tengo que ir a Atlanta con Gwen. Ha fallecido su padre.
-Oh, Dios Lo lamento mucho. ¿Donde estás?
-Aún estoy en SIP...
-Vete ahora, Ros. Ordenaré que tengan listo en Gulfstream para que no demoren más...
-¿Me prestarás el "Grey Force One"? - le pregunta Ros burlona por su jet privado.
-Si, Ros. Será tuyo estos días...- le responde Christian poniendo los ojos en blanco.
-Mil gracias.
-Estará en el aeródromo Puget Sound. Tengan cuidado, y envíale mis condolencias a Gwen.
-De nuevo, Gracias, Christian.
-No se merecen.

Llamo a Andrea y es tan eficiente mi empleada que en dos segundos ya está en mi oficina.

-Lo escucho, señor Grey.
-Llama a Stephan y que tengan listo en el Puget Sound en Gulfstream. La señora Bailey parte rumbo a Atlanta. Y también llama a Taylor y dile que prepare el Audi para cuando baje. Iremos a SIP. Vendrá conmigo Barney. También avísale- le ordena el jefe a Andrea mientras se pone la americana y toma su celular y su maletín.
-En seguida, señor.

Nada más llega Christian a la recepción de Grey House, Taylor le abre la puerta del Q7 y aborda.

-¿A SIP, señor?- me pregunta Taylor.
-Por favor- le confirmo y lo miro a través del retrovisor. -Lleva a Ros a su casa, la recoges junto a Gwen y sus hijos y las escoltas al aeródromo.
-Lo se, señor. Gwen es mi amiga y estoy al tanto. Me da gusto poder ayudar- me responde mi guardaespaldas y continúa manejando por la quinta avenida.
-También a mi, Taylor.

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