«Liars»

{32} Esa noche- Parte II

Luna's POV.

Todas las miradas recaían sobre mí, mientras que yo solo tenía en mi cabeza la voz de Yamila diciendo que ella conocía a Matteo y había salido con él. Me dolía, me decepcionaba, en todo este tiempo había sido la única persona que había logrado subir mi ánimo, ¿y si se había acercado a mi sólo para saber más sobre Yamila? ¿y si en realidad no le importe nunca? 

-Luna, por favor habla.- Escuché la voz de Yam con un tono tranquilo pero a la vez, bastante desesperado.- Te juro que te lo puedo explicar bien.- Finalizó mirándome y sentí que Ámbar acariciaba suavemente mi espalda.

-No es a lo que vinimos.- Dije seria, intentando olvidar lo que había pasado recién.- Luego podremos hablar de eso, pero ahora no hay tiempo.- Todas me miraban sin entender a que me refería.- Necesitamos saber que más pasó esa noche, Yamila.- Insistí y ella asintió con su cabeza.

Nina's POV.

-Bueno, seguiré contándoles entonces.-Nos dijo Yamila y tomó aire para continuar contándonos sobre esa noche.- Me bajé del auto de Matteo y cuando iba a entrar a la casa de nuevo, apareció Nina.-En ese momento quedé completamente en shock, ¿de qué mierda hablaba? ¿iba a inventar ahora?

-¿Qué mierda hablas, Yamila?- Le pregunté enojada, el resto de las chicas me miraban sin entender.

-Creo que el efecto del alcohol seguía en tu cuerpo, nos empezamos a pelear y vos te pusiste un poco violenta por decirlo de alguna forma.- Comenzó a explicar y en mi mente comenzaron a aparecer vagos recuerdos de lo que Yamila hablaba, incluso me veía a mi con una pala.- Y vos tenías una pala en la mano, Nina.- Me dijo mirándome. Mis ojos se inundaron de lágrimas sin entender como yo había podido olvidarme de algo así o mejor dicho, nunca haberme acordado.

-¿Yo te hice algo?- Pregunté con un hilo de voz sin querer escuchar la respuesta.

-¡No!- Gritó Yamila, logrando tranquilizarme por un momento.- En ese momento, yo salí corriendo. No te reconocía, te tenía hasta miedo para ser sincera.- Esas palabras dolían en mi corazón y me hacían pensar que realmente estoy loca.- Mientras corría, alguien golpeó mi cabeza con algo que se sintió como una piedra.- Mi preocupación volvió a aparecer, ¿y si había sido yo?

-¿Viste quien había sido?- Preguntó Delfi un poco preocupada, parecía que además intentaba unir las historias de esa noche, es que realmente todo había sido un descontrol. 

-No, no vi.- Dijo Yamila y largó un suspiro.- Lo siguiente que me acuerdo es que me desperté en un hotel, al lado mío había ropa y una identidad falsa pero con mi foto, como las que yo usaba para ir a las fiestas.-Nos contó mientras jugaba con sus dedos, intentando calmar sus nervios.- Y una carta, una carta que decía que todos pensaban que yo estaba muerta y que me habían enterrado, que me convenía quedarme alejada de Rosewood.-Finalizó mirándonos.

-La carta estaba firmada por A, ¿verdad?- Preguntó Ámbar, increíblemente usando su cerebro.

-Exactamente.- Afirmó Yamila.- Desde ahí solo vine a Rosewood la noche de la iglesia, que pasó lo de Mariano. Pero nunca más lo volví a ver, yo no lo maté.- Nos dijo y parecía sincera, mire a Luna de reojo y noté que en su cara no había ni una expresión. 

-Entonces nos estás pidiendo que mañana declaremos que sos inocente, ¿verdad?- Esta vez preguntó Delfi.

-Es que lo soy, chicas.- Volvió a hablar Yam mientras las lágrimas corrían por sus ojos.- Tienen que creerme, se los ruego.- Finalizó y ninguna de nosotras fue capaz de articular una palabra.

-Nos vemos mañana en el juzgado, Yam.-Dijo Luna después de haber estado horas sin hablar y se paró para irse de ahí, nosotras nos miramos y en seguida la seguimos, dejando a Yam sin decirle nada más. 

Desde que llegué a mi casa, no pude hablar absolutamente con nadie. Tenía un nudo en la garganta que no me permitía avanzar ni pensar en otra cosa, habían tantas cosas que me quedaban por saber que me aterraba. Pensaba en mi y en esa noche en la cual hice cosas que no recuerdo, pensaba en Luna y lo que se había enterado de Matteo, pensaba en Yamila que si está diciendo la verdad debe estar pasando el peor momento de su vida, pensaba en todas. 

-Nina, ¿puedo pasar?- Escuché la voz de Tamara mientras la puerta se abría lentamente, me pareció extraño ya que nunca hablábamos pero así y todo le dí el sí.- Necesito que hablemos, por favor.- Parecía casi que me rogaba, me sentí confundida porque realmente jamás habíamos hablado sin gritarnos.

-Me estás asustando, Tamara.- Le admití y ella soltó una leve risa para luego sentarse al borde de mi cama. 

-Me voy a ir a Europa, Nina.-Soltó como si se hubiera liberado del mayor peso, abrí mis ojos sorprendida pero en seguida sonreí, no quería que se sintiera mal.- Pero no puedo irme sin contarte la verdad.- Finalizó y ahí me senté en la cama, ¿de qué verdad hablaba? 

-¿La verdad de qué?- Pregunté asustada y ella tomó aire para luego mirarme a los ojos.

-La verdad de la noche de la desaparición de Yamila.- Me respondió y mis ojos se abrieron como dos platos, ¿ella tenía las respuestas?- Las vi discutir desde la ventana de casa, yo no pretendía hacer nada obviamente y me iba a ir a dormir, hasta que escuché que Yamila gritaba más fuerte de lo normal. En ese momento miré de nuevo y tenías una pala en la mano.- Me comenzó a contar y noté que coincidía con la historia de Yam.

-¿Le hice algo?- Pregunté desesperada y nerviosa, en seguida mi hermana continuó hablando.

-Me asusté y bajé las escaleras, pero cuando iba a salir mamá me detuvo con alguna pregunta estúpida.- Comenzó a hablar rápido, nerviosa.- Cuando pude salir vi una persona tirada, con sangre en su cabeza y la pala al lado.- Ella comenzó a llorar e igual lo hice yo.- Pensé que la habías matado y no pude mirarle la cara, así que asumí que era ella y me encargué del cuerpo, pensando que te estaba ayudando.- Finalizó mientras secaba sus lágrimas.

-¿De quién era ese cuerpo?- Pregunté secando las mías.

-De la chica que velamos pensando que era Yamila.- Me respondió y en ese momento la abracé, ella se había preocupado por mi y había intentado salvarme. Ella correspondió mi abrazo y en ese momento, mi celular volvió a sonar con un mensaje después de tanto tiempo. 

« La verdad sale a la luz, cuida tus secretos. Nos vemos mañana en el juicio. A.»    

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En el próximo capítulo va la parte de la historia entre Matteo y Yamila ☺

Espero que lo disfrutennn!