think and dream. | stony, OS.

Única parte.

Situada en el final de Civil War.

Luego de leer la carta, Tony se quedó mirando fijamente el celular desechable que tenía en la mesa.

Aún en su mente vagaban pequeños recuerdos, pequeños flashes de la pelea con Steve y el imbécil de James Barnes.

"—Él es mi amigo. — Suelta Steve, como si fuera justificación suficiente para toda la situación. Como si fuera nada que estuviera defendiendo al asesino de sus padres en vez de estar a su lado, acabando con él.

—Yo también lo era."

En un impulso, arruga el papel y lo tira en alguna parte de la habitación. No puede seguir leyendo, porque sabe que con el paso de las frases escritas por el propio Steve, terminaría levantando el teléfono y llamándolo.

No puede llamarlo, quiere. Él se considera totalmente ateo, pero si existiera Dios... Dios sabría que él quería llamar con todas sus fuerzas a Rogers.

Piensa en como va a seguir adelante después de todo esto. Piensa en la posibilidad de seguir siendo un Vengador, pero sabe que es díficil. Difícil volver al campo de batalla con las mismas personas que hace unas horas estaban en filas enemigas.

Piensa en su ligero —y no tan ligero— cuelgue por el Capitán América y en cómo su traición dolía el doble.

Piensa en Natasha, en Clint y en Wanda. Incluso piensa en Thor y en lo confundido que estará cuando vuelva y se de cuenta de todo lo que ha pasado.

Piensa en su gran amigo Bruce y si la historia hubiera sido diferente con su presencia.

Piensa en todas las personas que han caído y han perdido. En Pepper y en Phil. Piensa en como Wanda perdió a sus padres y también a su hermano, Pietro.

Piensa en Laura y en los hijos de Clint. En lo enojada que estará cuando sepa que Barton quedó tras las rejas por culpa de él.

Pero sobre todo piensa en como intento hacer las cosas bien está vez, realmente él se esforzó. Pero todo se fue a la mierda.

Relee en su mente la carta de Steve, y llora.

Llora hasta dormir, y luego sueña con un mundo diferente.

Un mundo en dónde su padre si encuentra a Steve.

Dónde Tony es un chaval de sólo 18 años totalmente colado por él. Y Steve cree que sus ganas de vivir y de amar se quedaron congeladas en los años 40 pero Tony lucha contra eso. Y se enamoran.

Un mundo dónde él no tiene traumas y sólo se encarga de darle todo su amor a un soldado de los años 40 que lo ha pasado fatal.

En dónde sus padres siguen vivos y tienen pequeñas escapadas en familia a París donde obviamente llevan a Steve —ellos terminan en una habitación de hotel, con vista a la torre Eiffel, haciendo el amor al compás de promesas al oído—

Con el tiempo, Steve se da cuenta que quiere seguir sirviendo para su país, y a Tony no le queda más remedio que crear "Iron Man" y acompañarlo.

Conocen a Natasha, Clint y Bruce. Luego se les suma Thor, Wanda y Pietro. Y la familia se agranda.

Y con estos camaradas, pelean interminables batallas, millones de guerras pero juntos son invencibles.

Después de muchos años, se jubilan por fin.

Natasha y Bruce se quedan en una hogareña casa, formando una familia en Queens.

Clint se establece en una linda granja, con su amada Laura y su numerosa familia.

Wanda y Pietro son dueños de un horfanato en Sokovia, entregándole todo el amor que tienen a los niños.

Thor se enamora, y se establece en Londres con una hermosa chica, llamada Jane. En ocasiones, su hermano viaja desde su mundo y se queda unas temporadas con ellos.

Y él con su amado Steve, compran una casa, en las lejanías de Brooklyn. Que con el tiempo la llenan de gatos, perros y todo el amor que ambos se tienen.

Y justo, justo cuando Steve le está cantando al oído...

Tony despierta.

Y sólo tiene un cuello lastimado por dormir en la mesa, unos ojos hinchados de tanto llorar, un celular desechable —que sabe que no puede ocupar— y una carta arrugada en forma de bola en el suelo de la habitación, escrita por el amor de su vida.