Capítulo 22

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Esta mañana recibí un mensaje de Leo preguntándome por mi número de teléfono y se lo envíe sin dudar pero no le pedí el de él, no todavía.

Según él, lo necesitaba para llenar unos papeles, me estuvo un poco estúpida la excusa, para ser adulto tiene pretextos muy bobos.

Las primeras tres veces que me llamó no le contesté y le envié "sigue intentándolo, algún día contestaré"

A la quinta llamada le contesté. Quedé completamente enamorada de su voz, ronca, súper maduro. Hablamos de todo, es una chulería hablar con él.

Al final, me invitó a jugar play en su casa, que él me buscaba.  Y yo capté muy bien su invitación.

Él me encantaba, estaba loca de matar las ganas que le tenía. Cada noche los deseos por sentirlo dentro de mí eran más y más grandes, no aguanto.

Me encanta imaginar como será estar en la cama con uno que tenga mucha experiencia, alguien que me haga gritar de placer, que me hale por el pelo mientras me tiene en cuatro y me da como me gusta, que me erice la piel con cada roce y que sepa utilizar las manos, la lengua y que bese cabrón. Que me de como si fuera su última vez.

Mañana cumplo años y aún no sé que hacer, me encantaría verlo y dialogar, ya luego veremos como van fluyendo las cosas.

Sólo por un rato Donde viven las historias. Descúbrelo ahora