Distancia [Victor Blade]

II. Bienvenida Al Raimon

Bajo las escaleras de mármol blanco con mucha pereza y me dirijo al comedor.

Allí me encuentro a Jude leyendo un periódico y bebiendo de su taza de café. Él levanta la vista y me mira de arriba a abajo escaneándole con la vista.

-La falda es demasiado corta -Bufa, mientras rueda los ojos con una expresión divertida en el rostro.

Y yo solo puedo reír, -Pareces un padre celoso Jude, nunca pensé que te oiría decir eso - y sigo riendo intentando regular mi respiración y no acabar con un ataque de risa en el suelo.

-No va en broma, de verdad pienso que esa falda es muy corta, pero bueno -Se encoge de hombros- ¿Quieres algo? ¿unos cereales...?

Le interrumpo -Quiero un café con leche por favor- Hace una mueca demasiado adorable para ser el -Más te vale dármelo si quieres que esté despierta todo el día.

Me dirige una ultima mirada asesina y llama a Arnau, quien amablemente le pide que me traiga un café con leche. Me siento en la silla delante de él, deja su taza encima de la mesa y me entrega el periódico.

-Creo que puede interesarte esta noticia.

Leo el titulo que está en negrita y algo más grande: El equipo del Raimon se enfrenta al sector V. Des de que empezó el camino imperial el equipo del Raimon, dirigido por su capitán Riccardo Di Rigo y su entrenador Marc Evans el ex jugador del legendario Inazuma Japón. Se han atrevido a desobedecer las ordenes escritas del sector V. Empezaron con el partido el colegio de empollones, antes incluso de que empezara el camino imperial, los resultados decían que el Raimon perdería 0-3, pero ellos se negaron marcando gol, quedando 1-3. Después en el primer partido de las pre-eliminares, se enfrentaron al colegio concertado del Vía Láctea, las ordenes dictaban que también perderían, pero los jugadores ganaron 2-1 a favor del Raimon, y por último, jugaron contra el Instituto Poderosa Fe, y como es de esperar las ordenes dictaban que tenían que perder, pero ganaron 3-2 a favor del Raimon. Todos los seguidores de este deporte se están preguntado que pasará ahora, y si el sector V seguirá permitiendo esta falta de respeto hacia ellos.

Y decido no leer más, pero una pregunta viene a mi mente -¿No se supone que, lo de que el sector V controla y regula el futbol solo lo saben los futbolistas y/o entrenadores? -Pregunto algo preocupada y me fijo en que Arnau ha traído mi taza de café mientras yo estaba sumergida en la lectura de la noticia, así que le doy un sorbo, y me relamo los labios.

-No lo saben, este diario es exclusivo para los grandes cargos del futbol, los futbolistas y los entrenadores. Como mucho también se vende a los directores de los Institutos, pero son casos muy extraños -Frunzo el ceño, esto cada vez me está gustando más, no entiendo como la gente puede hacerle eso a un deporte tan querido como es el fútbol.

-Utilizan la prensa para infligir miedo- Suspiro y cojo la taza de café para bebérmela de un solo trago, y otra ve me relamo los labios quitando todo rastro de café que pudiera quedar- Deséame suerte Jude -Me despido con la mano.

-Suerte preciosa -Le oigo gritar des del comedor.

[...]

Estoy delante de la entrada del Raimon, camino por un camino de piedras grises brillantes que están perfectamente colocadas formando una cuadrícula y a la derecha puedo ver el campo de futbol, solo tres están entrenando, miro el reloj y veo que aún es muy pronto.

-Hola -Escucho detrás de mí una voz muy fina- ¿Te interesa el futbol? -Pregunta entusiasmada la muchacha con un brillo especial en los ojos.

-¿Perdona? -Me ha tomado tan de sorpresa esa pregunta que mi cerebro es incapaz de formular un frase más complicada que esa.

-Uy si, perdona. -guiña uno de sus ojos azules- Me llamo Sky Blue, y soy de primero -me extiende su mano en forma de saludo.

Le estrecho la mano por unos segundos y luego la suelto -Me llamo Carina encantada -Sonrío.

La chica en cuestión tiene el pelo azul, cortado en media melena, la tez clara y lleva el uniforme establecido por el Instituto.

-Te preguntaba si te interesa el futbol... Como he visto que te quedabas mirando a Jp, Arion y Riccardo... -Hace un puchero de lo más adorable.

-Si, bueno, me gusta -Me encojo de hombros y desvío mi mirada, observando detrás de ella a los chicos aún dándose pases, pero ahora ya son cinc los que están practicando.

-Puedes unirte al club entonces -Sonríe cerrando los ojos en forma de media luna.

-Si, bueno me lo pensare. -Hago una pausa para retomar aire -Encantada de conocerte Sky Blue de primero -Y me giro para empezar a caminar tranquilamente en dirección al instituto. Este va a ser un día de lo más largo.

Llego al hall y no espero más para entrar, me dirijo al aula 18B, que en teoría allá se encuentra 1ro C, que en teoría según la información que me paso Willi será mi clase.

Solo espero que las clases aquí sean más entretenidas que en Inglaterra, si no será una mañana muy muy larga.

[...]

Y efectivamente había sio una mañana muy larga, me he pasado todas las horas presentándome o a los alumnos o a los profesores, que me miraban con mala cara cuando se daban cuenta de que no traía el uniforme establecido, pero luego sonreían cuando les entregaba mis méritos académicos (si, en este instituto es obligatorio que todos los profesores que tienes tenga uno de estos curriculums) también he conocido a Jp y Arion, los amigos de Sky, los cuales volvieron a preguntarme si me interesaba el futbol, lo que obviamente contesté con un si. También me preguntaron haber como era el futbol en Inglaterra, y no pude encontrar las palabras para explicarlo. Así que los pobres se quedaron con las ganas.

Ahora he conseguido escaparme de esos tres para ir en busca de Mark Evans, y como era de esperar lo encontré en la antigua caseta del Raimon. Cuando me vio no pudo disimular su alegría, ni yo tampoco. Por eso me abrazo levantándome del suelo, como cada vez que me ve después de mucho tiempo.

-¡Que alegria Carina! -Grita mientras me deja en el suelo- Hace mucho tiempo que no te veía, y mira lo grande que estas -Y por esas palabras me sonrojo.

-Dejad de hacer eso ¡jo! que me pones colorada -Rio- Yo también me alegro de verte -Sentencio sonriendo con los labios juntos.

-¡Carina! -Vuelve a chillar, sin duda, el no ha cambiado nada pero en cierta forma me alegra, también es cierto que me recuerda a su abuelo, el cual fue mi entrenador y que Dios echo de menos con todo mi corazón- Hora que lo pienso puedes unirte al club de futbol, contigo seguro que conseguimos la Revolución que estamos buscando -Coge su bazo como si pretendiera enseñar músculo.

Muevo la cabeza en forma de negación, y muero mi labio inferior, por suerte ayer antes de ir a dormir pensé en una excusa para poder negarme a entrar al club como jugadora -Lo siento Mark, pero en mí último partido me lesioné la pierna y los médicos me dieron reposo total, no podré jugar al futbol por una temporada -Hago una mueca- Pero... Puedo unirme como gerente si eso te basta -Sonrío- A demás lo de mi pierna lesionada fue una excusa para venir a Japón, siendo sincera echaba de menos todo esto -Cojo aire por la nariz- Pero en vez de eso me he encontrado con todo esto del fútbol regulado -Bufo con frustración.

Pone una cara triste, y pienso que no se ha tragado mi mentira, pero seguidamente la cambia a una más alegre -¡Claro! Siempre es bueno tenerte cerca pequeño terremoto -Me acaricia mi pelo descoloándolo completamente.

-¡Mark! No hagas eso  -Intento peinar mis pelos ahora enmarañados y suspiro frustrada mientras el rie a pierna suelta.

Pero para de reír y me extiende la mano. Yo lo miro sin entender muy bien lo que quiere, y me señala su mano con la cabeza. Yo la cojo sin saber que pretende -Bienvenida al Raimon señorita Uchiha, es un honor tenerla en calidad de gerente y como jugadora si usted se llega recuperar antes de lo previsto -Los dos sonreímos y nos dirigimos a la sede del club, la cual es enorme, los colores que destacan son el azul y el blanco, con un rayo amarillo pintado en el centro representando el logo del instituto Raimon. Se nota que es futbol tiene una gran importancia.