Matrimonio a primera vista

Capítulo I: La solicitud

Era la quinta vez que leía el e-mail y aún no estaba seguro de qué responder. Era claro que ya que había llegado hasta aquí la única opción era aceptar, pero éste era un paso gigante que no debía tomarse a la ligera, terminó optando por cerrar la laptop y la lanzó al otro lado de la cama, miró al techo y respiró profundo hasta quedarse dormido.

Cada mañana el oji azul salía a correr con Sasha y Ben, sus dos perros y al ver a todas esas parejas en su rutina diaria de ejercicios Charles no podía dejar de sentir más que envidia hacia todos aquellos que tenían a alguien con quien compartir sus días, él se había enfocado tanto en su carrera que había dejado el aspecto del romanticismo de lado. Hacía ya varios años que había terminado la relación con su expareja y desde entonces no había salido con nadie más aunque eso no significaba que no lo intentó pero quizá no lo intentó lo suficiente.

Moira y Charles habían salido desde que estaban en la escuela secundaria y se habían comprometido al ingresar a la Universidad, más por pedido de ella que por el deseo de Charles. Sin embargo las cosas no funcionaron bien para la pareja, pues el compromiso se fue alargando cada vez más por proyectos de ambos hasta que la fecha de la boda se hizo cada vez más incierta. Charles se enfocó en sus estudios, en obtener sus doctorados y en las campañas altruistas de las cuales era fundador, Moira se volvió presidenta del consejo estudiantil y consiguió un trabajo de medio tiempo que al terminar sus estudios le ofreció un mejor pueso e otra ciudad y al mudarse ella, el compromiso se fue extinguiendo hasta desaparecer. A pesar de haber roto su compromiso la ex pareja aún tenía comunicación, Moira había sido una parte importante de su vida como para sacarla de ella, se habían ayudado a crecer y Charles creía que no sería el mismo sin ella.

A diferencia del oji azul, su querida exprometida había encontrado el amor y hacía casi 8 años que estaba felizmente casada, tenía dos hermosos chicos que gustaban de llamarlo "Tío" cada vez que los visitaba.

Charles sabía que a pesar de haber salido con una sola chica durante gran parte de su vida, sus gustos iban más inclinados a la compañía de los varones. El hecho de haber estado soltero tanto tiempo solo significaba que había tenido la oportunidad de experimentar y no habían sido pocos los hombres que pasaron por sus sábanas pero Charles ya estaba cansado de llegar a una casa vacía, amaba el calor que Sasha y Ben le brindaban pero en ocasiones deseaba acurrucarse entre los brazos de alguien que le hicera mimos a él y no al revés, deseaba tener alguien que despertara a su lado cada mañana y que fuera la razón por la que cocinara. Estaba cansado de escabullirse de la habitación de extraños y de que olvidaran su nombre. Su respuesta llegó en uno de sus productivos fines de semana "analizando" la programación de la Tv.

Se había despertado temprano en contra de su voluntad, como suele suceder al llegar a cierta edad y gracias a la costumbre de tener que madrugar, se preparó el desayuno y lo tomó en la alcoba. A esas horas de la mañana realmente no había muy buena programación, a menos que te apasionen los infomerciales. Se entretuvo cambiando de canal uno a uno, pasando de un comercial sobre pestañas magnéticas, hasta almohadas con el poder de Morfeo y diferentes utensilios de cosina que quizá realmente necesitaba y no se había dado cuenta. Fue entonces que se encontró con un canal que nunca antes había sintonizado, la guía mostraba una película de misterio y terror y aunque el título era algo flojo la descripción parecía lo bastante interesante un sábado a las 5 de la madrugada, así que decidió permanecer en el canal y darle una oportunidad. La película tenía un tiempo que había iniciado sin embargo era sencillo familiarizarse con lo que ocurría, se trataba sobre un padre que le prohibía a su hija relacionarse con cualquier hombre del pueblo, la calidad del filme era muy discutible pero fue al ir a comerciales que conoció el reality que cambiaría su vida.

El título del programa fue lo primero que llamó su atención por lo poco convencional que sonaba, "Matrimonio a primera vista", al parecer se trataba de unir a la pareja perfecta para conseguir el "matrimonio perfecto".