Capitulo 8 -. ¡Que Comience El Juego!

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Narracion Omnisciente

___-. Solo tendrás que conquistar, no es tan difícil... Espera si lo es, por ahora solo un chico lo pudo hacer... Pero me empezó a tratar tan mal... Que lo odio con el alma... ¡Y ahora esta pagando las consecuencias! - empezaba a reír la ladrona mientras que se se acercaba más al pobre demonio de Bill, que el no sabía como reaccionar, no sabía que decir, no sabia nada de nada.

Bill-. ¡¿C-conquistarte?!... No se hacer eso, además... No se si lo logre contigo, tu eres una chica muy linda y hermosa, y se que eres diferente a todas las demás, no se como, estoy pensando en miles de cosas pero... No se... No he conocido a alguien como tu, no lo puedo creer, mejor pídeme otra cosa, que mate a los Pines, que mate a todos los de esta ciudad algo más fácil, esto es imposible, conquistarte... Vaya eso es algo que nunca me habían pedido, es algo imposible - Bill empezaba a tartamudear tanto, que ni siquiera lo podría controlar, además que empezaba a sudar, se le quedaba mirando atentamente a la ladrona, suplicando por otra misión más fácil, una misión que sea posible de realizar.

___-. Que aburrido eres... Te daré... Tres semanas, si en esas tres semanas no me conquistas, tu cabeza estará a un buen precio, y todo esto será mio, o claro serás mi sirviente, veras los miles de Raromagedones que yo creare- digo la ladrona, mientras que miraba al demonio confundido y enojado, ella solo quería diversión así que hará todo lo posible para conseguirlo, guardo su pistola en un suspiro, saco una arma más pequeña y lo puso por encima del corazón del demonio.

Bill-. ¿Q-que haces? Deja el arma por favor, N-no hagas nada de lo que te puedes arrepentir... Baja el arma... - empezá a su corazón latir demasiado no se sabía controlar, quería retroceder pero sus piernas fallaba demasiado, apenas podía respirar.

___-. Solo quiero saber si entrarás al juego, no quiero cobardes que al día después se nieguen, ya que a esos los mato de una forma despiadada, por favor has el juego divertido, sin trampas - lo miraba con una sonrisa de oreja a oreja, mientras que aplastaba un poco el gatillo.

Bill-. Espera, quiero entenderlo todo, tengo tres semanas para conquistarte, en esas tres semanas tengo que esforzarme para saber como conquistarte, pero... Es difícil tu misma lo dijiste, es difícil, no se como hacerlo, no quiero hechar me atrás por que tu eres la única que necesito para completar mi plan, eres lo que necesito, pero no quiero perder... - sonaba serio, dejaba de tartamudear, no se movía mostrando fuerza hacia la ladrona, sin embargo en su mente esta dando vueltas y vueltas, miles de posibles resultados, no sabía que hacer, el demonio está perdiendo.

___-. Entonces no pierdas, tu tienes esa posibilidad de ganar, tienes una gran ventaja que no conoces, pero tienes que tener ese gran conocimiento para saberlo, tu sabrás cuando tienes la ventaja, mira, para que se te haga más fácil, tienes tu algo que me haces enamorar, tienes un toque que me enloquece, literalmente, así que tu puedes hacerlo, aparte, no será tan difícil si juegas muy bien tus movimientos, ya sabes tres semanas, ganas todo o pierdes totalmente todo, tu decides- lo miraba con una leve sonrisa, mientras que pensaba la ladrona que se iba a hechar hacia atrás el demonio, pensaba que ya era un caso perdido y el demonio no iba aceptar el juego, una perdida de tiempo seria.

El Demonio Bill Se quedaba pensando, nada ni nadie le había dicho algo así, es un juego que no puede ganar, ni sabe como dar el primer paso por dentro tiene una explosión de furia, de enojo, de miedo, de tristeza, de alegría, de emoción, no sabe que decir, o cual era su decisión final, solo pensaba que era lo correcto para el y para ella, pensar que tiene ventajas es lo que confunde más, piensa que necesita una ayuda, del primer amor de la ladrona pero tiene que saber quien sería, solo pensando en los miles de hombres que la quieren conquistar eso lo hace enojar, por que no esta tan fácil conquistar a una ladrona, además que para Bill conquistar a alguien es imposible, todos se enamoran de él, todas las chicas del universo se enamoran de él, por que ella tiene que ser tan diferente, además de que ella es la única que puede hacer todo esto posible, de hacer su sueño realidad, y obtener más cosas, es como ganar la lotería de la vida perfecta.

Un Demonio está en realmente en aprietos apenas puede ver un futuro de cinco minutos, y es uno donde está muerto, la ladrona está en su puesto a el no lo agrada eso, que una mujer está en su trono, sin él, pero, no sabe, por que a él le duele perderla, le duele más que ella se vaya a otro bando, a lo mejor con su hermano, a lo mejor con los Pines y que la ladrona no esté con el, siente que le duele más eso, que perder todo su imperio, tenerla a ella, por extraña razón la hace feliz, el tiene una respuesta, algo loca mientras que suspiraba y miraba a otro lado, quería sacar información, quería tener una respuesta en otro lado, así que pensó bien, y es mejor arriesgar todo y ganar.

Bill-. Muy bien acepto, jugare a este juego y te conquistare -sigo con un tono amable y divertido, la miro, mientras que le sonreía, la ladrona sonrió muy feliz.

___-. Muy bien Bill, ¡Que comience el juego! - ella sonrió tan feliz, aunque la verdad Bill al verla así solo sonrió al igual que ella, iba a decir algo más pero.

La ladrona le disparo, le dio un disparo justo en el corazón, ya que estaba tan cerca que ni Bill lo podía evitar, haciendo que Bill solo saliera un poco volando, mientras que ya tenía los ojos en blanco, como si ya le habría quitado su vida, pero no salió sangre ni nada, solo habría sido un desmayo, pero aun así... ¿Por que hizo eso la ladrona?...

___-. Yo ya tengo una ventaja... Ya tengo tu corazón Bill...

Una Ladrona y Un Demonio (Bill Y Tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora