Julianne y yo nos quedamos mirando por al menos un minuto, el minuto más largo que he pasado, sus ojos me decían todo y nada, era una mezcla de sentimientos que no sabía explicar. Me removí inquieta en la silla, seguía sintiendo vergüenza de lo que pasó con Jared, pero también me sentía herida por sus palabras de días atrás.
-Dejé a mi esposo porque estoy perdidamente enamorada de ti-Julianne parecía enfadada- no hacía y no hago más que pensar en ti en todo el maldito día !A cada instante¡ No puedo sacarte de mi cabeza Nalia-se había levantado y caminaba de un lado a otro detrás de su escritorio-no sé que has hecho conmigo que estoy dispuesta a dejarlo todo por ti...
-¿Dejaste a tu esposo por que te lo pedí o porque querías hacerlo?-insistí aún ahogando sus palabras dentro de mí.
Julianne golpeó la mesa y yo pegué un salto, estaba alterada, nunca había conocido esa faceta descontrolada de mi profesora y ahora la tenía ante mis ojos.
-!Claro que lo dejé por ti¡-me iba a levantar para irme, pero Julianne volvió a gritar-lo dejé porque no puedo estar con nadie más que no seas tú-lo último lo dijo en un susurro-ya no aguantaba estar con él
!porque solo te imaginaba a ti en su lugar¡Me quedé de brazos cruzados mientras Julianne se acercaba, estaba confundida, con su actitud, con su sonrisa abierta que hacía que mi corazón aleteara.
-Así que era esto cuando uno se vuelve "loco de amor"- Julianne unió su frente con la mía- estoy loca por ti ¿No te das cuenta? Me cautivas de una forma que nadie ha hecho en mi vida, cada vez que te veo me sucede lo mismo, mi corazón se dispara y quiero tenerte entre mis brazos al instante.
Sí, Julianne me estaba cautivando cada vez más con sus palabras, ¿Y cómo no!? Sus frases eran las más lindas que nadie me había dicho en mi vida...
-Nunca dudes de lo que hago amor mío-Julianne depositó un dulce beso en mis labios- porque estoy dispuesta a ir al mismo infierno por ti.
Esta vez yo uní su boca con la mía, nos unimos en un beso desesperado, sediento, diciéndonos cosas que solo un beso podía decir, Julianne entrelazó nuestras lenguas y comenzamos un juego de dominación y pasión que me hizo terminar sobre su escritorio, Julianne estaba entre mis piernas y no tardó en comenzar a quitar mi ropa, ya nada importaba, solo el querer tener su piel junto a la mía. Quedé media vestida, mi falda fue arrancada salvajemente y se hallaba tirada en el suelo, Julianne depositó besos por mi cuello y yo la acerqué más hasta mi, quería sentirla en cada parte de mi cuerpo y así fue, nos apegamos más la una a la otra, volvió a mis labios y yo la besé con gusto, una de sus manos iba bajando lentamente por mi cadera, la necesitaba y pronto, sus toques y lamidas me tenían mojada y delirando.
-Julianne..por favor-gemí cuando rozó mi centro.
-Esto pasa cuando te besas con un chico en medio de la escuela-me susurró provocadora- te torturaré hasta que no puedas mas...
Sus palabras me excitaban más, su cuerpo apegado al mío, nuestras respiraciones mezclándose, sus dulces besos...todo me tenía en una nube, necesitaba sus toques para llegar a mi máximo placer y ella lo sabía, solo que no lo haría por el momento.
Rozó nuevamente mi centro y yo gemí angustiosamente, necesitaba provocarla para salir de este interludio sin fin..-Julianne...-me acerqué a su oído- te necesito...te necesito dentro de mí-mordí su oreja y ella gimió en respuesta. No fue suficiente, aún me tenía en el limbo del placer y el orgasmo, necesitaba, la necesitaba...
-Profesora...-volví a susurrarle-hazme tuya Julianne-ella se estremeció- penetrame...
Julianne con el último mensaje comenzó a rozar mi clítoris con más ímpetu, me agarré a un esquina de la mesa mientras uno de sus dedos entraba en mí, solté un sonoro gemido que ella acalló con su boca. Comenzó a darme placenteras embestidas mientras entró en mí con otro dedo, me estaba llevando al cielo y mis gemidos se lo hacían saber. El escritorio se movía de acuerdo a mi, las embestidas de Julianne comenzaron a ser más rápidas, entraba y salía de mí con rapidez y luego de unos segundos un potente orgasmo arrastró las últimas fuerzas que me quedaban, Julianne me sostuvo entre sus brazos mientras yo me recuperaba de todas las sensaciones que aún recorrían mi cuerpo.
-Espero que comprendas que si te vuelvo a ver de la mano con ese chico no respondo de mis actos-Julianne se alejó de mí pero yo le agarré y la traje de vuelta a mi cuerpo.
-Prometido profesora-le sonreí-eso fue maravilloso...
-Lo sé-sonrió- recuérdame hacerte mía otra vez en este escritorio, ahora siempre me recordará este momento...
La volví a besar y ella también lo hizo, sonó la campana de receso y la miré asustada ¿Cómo había pasado tan rápido el tiempo?
-Quiero seguir contigo aquí Nalia-besó mi mejilla-pero debemos ser precavidas, si alguien nos escuchó...sería nuestro fin.
-Lo sé-me estremecí-¿Quieres que me vaya?-la miré triste.
-Quiero que te quedes, pero no puedo...tengo reunión ahora y sería sospechoso que no fuera-tocó mis labios con sus dedos- pero hoy quiero estar junto a ti ¿Quieres salir conmigo después de la escuela?
-Sabes que trabajo...
-Solo por hoy pide no ir..-me miró suplicante-por favor..
Me lo pensé y no tardé en asentir, Julianne me besó y tuve que bajarme rápidamente de su escritorio porque iba retrasada, nos despedimos entre besos y nos fuimos en diferentes direcciones cuando salimos. !Estaba perdidamente enamorada de Julianne¡
*
Quedaban algunos minutos para salir e intenté arreglarme lo más que pude, mi falda por suerte no había pasado por más tirones y se hallaba en buen estado, me maquillé el rostro y para cuando sonó la campana de salida miré mi reflejo en el espejo del baño y asentí feliz ¡Ahora estaría con Julianne! Caminé hasta afuera de la escuela y dos manzanas más, allí me estaría esperando mi profesora que me había hecho estar en las nubes todo el día recordando nuestra mañana !La amaba¡ !Amaba todo de ella¡ Y lo mejor era que ella también me amaba a mí, por primera vez me sentía tan bien y feliz, era un sueño del que no quería salir.
Ví el coche de Julianne dar la vuelta y esperé, abrió la puerta del copiloto y yo subí, ella me miraba sonriente y guardé ese momento en mi memoria, me abalancé contra ella y llené su rostro de besos mientras reíamos como locas, luego del pequeño ataque de risas volví a mi asiento y le cuestioné donde íbamos.
-¿Te parece ir al cine?-me sorprendí de su pregunta-¿Qué!?
-Nada, nunca hemos ido...-le sonreí-me parece bien !Justo hay una película de acción que quiero ver!
Fuimos animadas hablando de cualquier cosa, pero tranquilas y felices, nos lanzábamos miradas sonrientes y de vez en cuando me acercaba y le daba besos, definitivamente esto era la felicidad. Llegamos al cine más cercano y caminamos agarradas de la mano sin ningún pudor, me gustaba eso, ser libres de todo, de los prejuicios...
Compramos dos entradas y fuimos por palomitas, refrescos y algún dulce, reíamos por todo y nada, aún agarradas de las manos caminamos hasta la fila para entrar a la película, habían pocas personas y miré un rostro que me congeló la sangre, tardé en reaccionar porque el shock me dejó paralizada.
-¿Nalia?-Julianne me movía-¿¡Nalia qué pasa!?
Era muy tarde, porque cuando Julianne miró la dirección que yo miraba él ya estaba frente a nosotras.
-¿Mamá?-Albert me miró luego a mi-¿Nalia? ¿!Qué hacen aquí!?
N/A: ¡Gracias por sus votos! ¿Qué les pareció el capítulo? Recuerden que pueden dejarme sus comentarios❤ Que tengan un buen día!
ESTÁS LEYENDO
Malos Tiempos(temática lésbica)
Любовные романыNalia tiene dieciocho años, hija menor de una familia con pocos recursos, el desempleo de su padre y con la venida de un nuevo hermano a la familia decide trabajar durante el verano en un prostíbulo ¿Qué pasaría si en su nuevo trabajo se encuentra c...