la jungla del deseo

Capitulo 1

Qué diablos estaba haciendo el allí?
Cuando el helicóptero empezó a descender, Kihyun sintió que se le revolvía el estómago.

A sus pies, kilómetros y kilómetros cuadrados de selva tropical. El techo que formaba las copas de los árboles protegía y ocultaba los misterios de aquella hermosa tierra. En otro momento él se hubiera sentido cautivado por la belleza del paisaje que lo rodeaba, Pero no podía pensar en nada que no fuera la reunión que lo esperaba aquel día. La reunión y el hombre.

¿Qué diablos estaba haciendo ataviado con aquel ridículo y caluroso traje, volando por encima de la selva brasileña para ponerse a merced de un hombre que, aparentemente, no conocía el significado de esta palabra?

Son Hyun Woo

Genial, peligroso, herido... Le acudían tantas palabras a la cabeza cuando pensaba en él, Pero ningunas de ellas resultaba tranquilizadoras o amable. Increíblemente rico y con más poder que Reyes y presidentes, se decía que era tan hábil con los números que los periodistas de la prensa dedicada al mundo empresarial lo habían comparada con un ordenador andante. Para Kihyun, esta comparación no auguraba nada bueno, dada la aversión que él sentía por la tecnología.

— Tiene casas por todo el mundo — le dijo al piloto, mientras observaba el Salvaje paisaje que se extendía a sus pies —¿Por qué ha decidido vivir aquí?

—Por qué el mundo no lo deja en paz. Le gusta tener intimidad.

—¿Es un solitario?

—Bueno, yo no diría de él que es blando y suave como un osito de peluche si es eso lo que usted me pregunta. No obstante a los hombres y mujeres no parece importarles. Precisamente el hecho de que seas malvado y peligroso los atrae en bandas, además del poder y el dinero. He de decir que usted no me parece su tipo habitual de hombre.

¿Su tipo habitual de hombre? Sin poder creer que el piloto hubiera creído que él podía ser el novio de un multimillonario, Kihyun estuvo a punto de soltar una carcajada.

—Tengo una reunión con el señor Son. Su empresa realizó la inversión inicial de mi negocio. El señor Son es lo que se podría llamar un ángel de los negocios, pero, dado que usted trabaja para él supongo que ya lo sabrá.

— ¿Un ángel? — repitió el piloto, con una carcajada —¿Ha dicho usted que Son Hyunwoo es un ángel?

— Es una forma de hablar. Lo que quiero decir es que invierte en pequeñas empresas como la mía — dijo Kihyun. Efectivamente, había estado muy interesado en la suya hasta hace muy poco. De repente, volvió a experimentar un sentimiento de náuseas en el estómago, por lo que se agarró con fuerzas al ordenador para tratar de recuperar la seguridad en sí mismo.

El piloto, por su parte, no había dejado de reír.

— Ángel... Mire, no sé cómo gana el dinero, pero le diré una cosa. Ese hombre no es ningún ángel.

—Yo no creo todo lo que leo en los periódicos — afirmó el dispuesto a no dejarse intimidar.

—Evidentemente. si lo creyera no estaría aquí. Veo que usted es un hombre muy valiente y decidido y eso es bueno. Le servirá de mucho a aquí.

—Le aseguro que no hay que ser valiente para asistir a una reunión de negocios.

—Eso depende de con quien se celebre esa reunión. Y de donde. No hay muchas personas que tengan el valor de visitar al lobo en su guarida.

—¿Lo ha llamado lobo? — preguntó Kihyun, sintiendo que la decisión le iba fallando.

—Yo no así es como lo llaman los demás. Yo simplemente lo llamo jefe.