Las Llamas Doradas. (Completa).

Capítulo 1

Bien.

Hola, mi nombre es Clare Jackson, acabo de mudarme aquí.

Seguro se preguntan dónde es aquí exactamente. Esto es Belle, un

pequeño pueblo en el condado de Kanawha, en Virginia Occidental. A mi padre

lo transfirieron aquí por su trabajo, oh, por cierto, mi padre es administrador.

Seguro piensan, ¿qué demonios hará un administrador en un pequeño pueblo?

Pues bien, él administra una pequeña franquicia de helado de yogurt, Yo-yo-

gurt, lo sé, suena tonto, pero es el mejor helado de yogurt del mundo. Como

sea, sus jefes abrieron una tienda aquí en Belle y por un "ascenso" trasladaron

a mi familia a este lugar, un pueblito en la mitad de la nada.

Tampoco es que me moleste mucho, siempre hemos vivido en un lugar

pequeño desde que tengo memoria, antes vivíamos en Thunder Bay en Ontario,

era un lugar bastante deprimente, si puedo decirlo.

Belle me parece un lugar un poco más feliz, aunque no demasiado. Si

tuviera que describirlo, diría que es un lugar bastante austero, pacífico y

taciturno. No me quejaré, pero este sitio me da mala vibra. Es como si el lugar

en sí tuviera un secreto, uno que planea llevarse a la tumba.

Lástima que tengo un sexto sentido para los secretos, y vaya que los odio.

No me malentiendan, puedo guardar un secreto, es cuando me los guardan a

mí, que los detesto. A lo que iba, si este lugar planea intentar esconderme

algo... No lo logrará.

...

El día está bastante bonito, estamos descargando las cosas del auto, las

pocas cosas que no trae el camión de mudanzas. Éstas incluyen mi ropa,

laptop, fotografías, posters, CDs, y por supuesto, mis libros. No sé si lo había

mencionado, aunque creo que no, pero AMO leer. ¡Ja!, eso es un eufemismo.

Los libros son los planetas de mi sistema solar, y el leer es mi universo. Ok no.

No soy muy buena con las metáforas ni con las analogías, pero creo que ya me

entienden.

Mi género favorito es la Fantasía, ya saben, brujos, hadas, vampiros,

hombres lobo, ángeles, demonios, ninfas, náyades, criaturas mitológicas, y así.

Me fascina todo eso, claro, yo sé que nada eso es real, pero ojalá lo fuera, sería

impresionante tener la habilidad de ver las almas de las personas, o descubrir

que tu padre es un dios, o conocer a un chico sexy que resulta ser un ángel

caído que quiere matarte, o haber vivido una vida normal hasta que vas a un

club y ves a un chico guapo matar a un demonio. Eso no sucede en la vida real,

pero si lo hiciera....

-Clare, Clare. ¡Oye, Clare! - Grita mi madre - ¿Estás aquí, o dónde?

-Lo siento, mamá. - Respondo. Debería añadir a mi introducción que a veces