CRIMINAL [ZiGa]

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ㅡ¿Qué perra? ¿Estas listo o tienes miedo?.

ㅡJa, ja, ya veremos ㅡ Una risa fingida se escucha primero antes del cierre de la puerta del coche.ㅡ Vamos Zico, no hagamos esperar a este bastardoㅡ. Susurra el peliverde en la oreja del rubio antes de inclinarse un poco más para cerrar así la frase con un intenso beso y acomodarse correctamente. Se encontraba sentado en el asiento del copiloto listo para comenzar la carrera y obtener una victoria más.

Todos los viernes a media noche se organizaban las carreras ilegales en los barrios bajos de la ciudad mas grande de Corea del Sur. En ellos participaban cualquier persona de cualquier clase social, así como el vehículo elegido por cada uno, que van desde carros, motos, hasta camiones, todos con un estilo y velocidad única. Y por supuesto Zico, el llamado "Rey de los barrios bajos", participaba en cada una de ellas, primero en solitario pero luego, con la llegada de un, ahora, peliverde de palida piel a su vida, las carreras se convirtieron no solo en una subida de adrenalina, sino tambien, en las cómplices de los mejores orgasmos. Con un impala  ya muy desgastado pero más veloz que todos los demás, siempre lograba llevarse la victoria en las pistas y claramente esa noche no iba a ser la excepción.

La zona de salida y meta se encontraba repleta de gente, la mayoria bailando al fuerte ritmo de la música, algunos iban a apostar, otros a divertirse o pasar el rato y obviamente los conductotes con la egocentrica confianza de ganar esta vez. Había un total de 5 competidores, esta vez todos de 4 ruedas y motores personalizados.

ㅡBien chicos, saben las reglas, a la cuenta de tres ㅡ Señalo una bella pelirroja de buenas curvas y diminuta vestimenta. Se apreciaban los sonidos de motores listos para arrancar.ㅡ ¿Estan listos?, 1, 2, ¡A CORRER!.ㅡ

Los gritos e insultos por parte de la audiencia, así como el chirrido de las llantas fue lo que dio inicio a la carrera y el inicio para un trágico final de competencia.

ㅡ¡Vamos por una más Yoongi!ㅡ Grito lleno de adrenalina el rubio sin soltar el volante. Llevaban una gran ventaja a los demás, asegurando su ganada.

ㅡAsí es querido, ahora deja de hablar y pisa más el acelerador.

Llevaban más de tres cuartos de pista y Zico, con Yoongi encima de su regazo besando su cuello, fingiendo embestidas, se encontraba a nada de su orgasmo. Ambos amaban la velocidad y exponerse a esta les exitaba de sobremanera.

Pero quizá esa no fue la noche correcta para sumergirse en la pasión que derrocha un encuentro sexual, pues el descuido provocó que uno de los competidores los alcanzaran, empezando a golpearlos en los costados.

Comenzando una dura y peligrosa batalla que a ninguno de los tres les importó, uno llevado por la furia de las derrotas, y los otros dos por la adrenalida.

La zona de meta se encontraba a pocos metros y con ella las personas listas para presenciar la llegada del ganador.

Fuertes golpes fueron escuchados, dos carros lanzándose uno al otro, aproximandose. Y ya a nada de llegar a la meta uno de estos sale de la pista, volando por aires como típica película de acción y aterrizando estrepitosamente de manera incorrecta.

Al parecer a uno de los conductores se le había ido el volante de las manos así como el mismo control del auto y al parecer el ganador no es ningún rubio, ni mucho menos un peliverde a su lado. A la meta solo llega un hombre.

El auto destrozado atrás, que se trata de un ipala, alberga a uno de los dos jóvenes. Zico afortunadamente despierta en el momento, demasiado aturdido a causa de los golpes, para solo ver que su acompañante no se encuentra con él, sino a unos metros de distancia en el frio pavimento.

Como puede y con prisa logra salir del auto para llegar a él. Gritos de horror es lo que escucha, una gran masa de gente acercandose es lo que ve y el cuerpo de un peliverde inerte en sus brazos, es lo que siente.

ㅡ¿Yoongi?... ¿YoonGi?, vamos hermoso, responde. ㅡ el rubio golpea sin fuerza las mejillas del palido, una y otra vez sin embargo, no hay respuesta alguna. Siente las lagrimas deslizarse por sus pómulos. ㅡ ¡YOONGI! ¡YOONGI! ¡Vamos ya! ¡No es momento de dormir! No es momento de dormir...ㅡ susurra lo último no conteniendose más, soltando a llorar en sonoros lamentos.ㅡ ¡MALDICIÓN!, ¡MALDICIÓN!, ¡Rápido, ¿Qué jodidos esperan?!, esto no es una puta obra de teatro, ¡llamen a una ambulancia!.ㅡ

La paciencia del rubio se agota, así como los latidos del corazón del peliverde.

VFA...

G♥.