Capítulo 11: Propuesta

2.2K 335 173
                                    

Lugar:  Rusia

El viento entró por un pequeño orificio  de la ventana a lado de la cama del joven ruso,  donde él y el kansajo dormían tranquilamente,  Yurio rodeaba su pecho con sus delgados brazos,  durmiendo como un lindo felino luego de jugar toda la noche,  un sonido despertó al Kansajo,  su celular,  Otabek estiró su brazo para contestar sin despertar a su gatito,  marcaba un número desconocido...

— hola? — pregunto soñoliento

Yurio entre abrió los ojos, dio un gran bostezo y beso a Otabek en el cuello,  pero un gesto sorpresivo por parte del Kansajo lo hizo retroceder un poco

— Espera... Víctor... ¡¡¿Que quieres que haga qué??!!! — dijo un tanto alterado,  Yurio se asustó un poco pero guardó silencio para escuchar

Víctor contestaba al teléfono — Lo que escuchaste,  Otabek,  necesito que subastes en línea una de mis medallas de oro del Grand Prix y también el Cadillac rosa,  lo que consigas me lo depositas en una cuenta de banco ¿Tienes dónde apuntar?— respo...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Víctor contestaba al teléfono
— Lo que escuchaste,  Otabek,  necesito que subastes en línea una de mis medallas de oro del Grand Prix y también el Cadillac rosa,  lo que consigas me lo depositas en una cuenta de banco ¿Tienes dónde apuntar?— respondió,  el Kansajo estaba en shock — ¿Una medalla?  ¿Tambien el auto?... ¿Subasto al perro de una vez también?! — respondió Otabek un poco alterado...

— ¿Crees que estoy jugando? Necesito que lo hagas ya,  quiero ese dinero lo más rápido posible,  ¿me entiendes? — respondió el ruso

— Víctor... ¿Qué esta pasando?  ¿Y katsuki? — contestó

—Estoy muy cerca,  haz lo que te digo,  ¿Bien?  Te envío el número de cuenta por mensaje— dijo Víctor y luego colgó.  Otabek mostró preocupación en su mirada

— Beka, ¿Yuri esta bien? — dijo el joven ruso con un poco de angustia,  Otabek le sonrió y le revolvió el cabello

—Todo estará bien,  no te preocupes, Yura— le dice intentando calmarlo,  se levantó y se vistió para ir a casa de Víctor a hacer lo que pidió,  le pidió a Yurio que se quedara en casa y salió en la motocicleta.

Lugar:  Estados Unidos

Víctor y Sangwoo llegaron al departamento donde se hospedaban,  tras hacer la llamada a Otabek, platicaba con el coreano;

—Tendremos varios millones de dólares,  podremos pagar el viaje a donde sea que el comprador viva— comentó Víctor

— ¿Y ya sabes dónde vive? — preguntó Sangwoo

—todavía no,  pero Mike nos lo hará saber pronto,  le proporcioné todos los datos que encontré de él en la subasta, no le será difícil,  espero— respondió el ruso,  Sangwoo se pasaba las manos por el cuello,  tratando de ordenar los pensamientos y planes a seguir,  todo se tornaba más complicado y confuso.

Víctor pensó que debería asearse luego de tanto correr

—Me daré una ducha rápida,  cuando sal.... — no terminó la frase cuando cayó al suelo,  Sangwoo se asustó,  trató de despertarlo dándole pequeñas palmadas en la espalda,  pero no era nada grave,  Víctor no había descansado en días,  solo se quedó dormido del cansancio

ALIADOSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora