Una vida como cualquier otra

☆Capítulo 6 "Sin reproches"☆

De vuelta a casa volvió caminando, era un bonito día como para desperdiciarlo e irse en bus.
Mientras caminaba concentrada en sus problemas y pensamientos, se quedó viendo un peluche de una tienda, era un cerdito con nariz roja, se veía muy tierno, tanto que no miró por dónde iba y tropezó con una piedra. Al caer lo hizo brutalmente arriba de su pie. Ya en el suelo, sin esperanzas y con el rostro colorado de la vergüenza miró hacia arriba para poder levantarse, y al hacerlo alguien estiró su mano cerca de ella para que pudiera levantarse, al ver más arriba era un chico que ya conocía. Aceptó su mano y se levantó.

- ¿Estás bien? - Dijo el extraño preocupado.

-Sí, muchas gracias- Dijo amablemente.

-Yo te conozco de algún lugar- Dijo el chico.

-Auch, me duele muchísimo el tobillo- Morena intentó dar un paso y volvió a caer del dolor.

El chico levanta a Morena haciendo que ella apoye su brazo en el hombro de él.

-Tienes que ir al médico, ¿Viste tu tobillo? Lo tienes muy hinchado- Dijo asombrado.

-Ohh no, me duele muchísimo, llamaré al médico a ver si me pueden llevar al hospital. -

-Bueno esperaré a que te vayas, todo va a estar bien, te pasaré mi número para que te comuniques conmigo por si me necesitas y para saber cómo estás. -

Morena se asombró que un extraño le haya querido pasar su número, pero se lo aceptó. Ella llamó al médico y ya venían en camino.

*10 minutos más tarde*

Llegó el camión con los médicos, le tomaron sus datos, ella se despidió del extraño y se fue con su número escrito en un papel.
Morena llamó a su madre, ella no quería preocuparla, pero tuvo que llamarla igual porque tenía que saber lo que sucedió.

-Hola More ¿Todo bien? -

-Hola mamá, no tan bien. Déjame contarte, pero intenta estar tranquila. -

-Sí, cuéntame. -

-Me están llevando al hospital, me distraje mirando algo y caí arriba del pie y creo que me fracturé-

-Ay no Morena, no, lo que faltaba. Ya mismo voy para allá y sin reproches, no puedo creer que te hayas distraído, que ¿Mirando a un chico? Ya mismo voy para allá. -

- No digas pavadas mamá, no vengas, está todo bien no es para tanto, llamaré a la tía Ayana que creo que hoy no trabaja, tu sigue trabajando ma.- Dijo Morena muy decidida.

-No jovencita, iré para el hospital quieras o no, luego le pides a tu tía Ayana que te acompañe si quieres, pero yo voy a estar ahí para ti. -

-Ufff mamá, ok nos vemos luego. -

*Colgó*

-Morena Tzutz- La llama el médico

- ¿Si? -

-Ya llegamos, ahora iremos directo a radiografía, así te hacen una placa para ver qué te sucede en el tobillo. - Hace una pausa. - ¿Se te dobló el tobillo y caíste sobre él? -

-Si. -

-Bueno señorita, espere aquí ya le atendemos. -

Después de 15 minutos la atienden.

-Tzutz adelante, pase. -

Le tomaron fotos que poco después se las iban a mostrar, que serían las placas. Mientras estaba en radiología su mamá la saluda desde el vidrio de la puerta. Poco después de terminar salió a saltos y su madre la ayudó a llegar a ella y la llenó de besos.

- ¿Ya te hicieron las placas More? -

-Si mamá, supongo que está todo bien, tranquila, podes volver a trabajar. -

-No, me quedaré acá a esperar los resultados contigo. -

-Bueno está bien. -

*15 minutos más tarde*

-Tzutz ya tenemos tus placas, ven que te explicamos. -

Morena y su mamá fueron.

-Vemos que te facturaste el dedo meñique del pie al ser muy frágil y también tienes un esguince en el tobillo y por eso la gran hinchazón. Te pondremos un yeso, con esto no podrás mover el tobillo, así te curas lo más rápido posible. -

-Gracias, pero ¿Cuánto estará con el yeso? - Dijo preocupada su madre.

- 20 días aproximadamente, sino le ponen yeso tendrá que tener días de reposo absoluto, en cama así no mueve el pie. -

-Prefiero que me pongan un yeso- Dijo Morena decidida.

-Está bien, pase por aquí así se lo colocamos. -

Después de unas largas horas, le dan unos calmantes a Morena y ya con el yeso podía volver a su casa.

Al llegar a su casa Laika la esperaba en la puerta, aunque se asombró al verle el yeso, le ladraba y lo lamía. Es muy tierna esa perrita.
Cuando Morena ya estaba con su pijama, se acomodó en su cama, prendió la televisión para ver su serie favorita. Mientras miraba recordó en escribirle al chico y contarle cómo le había ido, aunque no estaba segura. Hablarle a un desconocido... ¿Y si el número era falso? Nono, de dijo así misma, no lo creo. Pero ¿Si ese chico es un acosador? No, se contesta a sí misma, se veía muy buena persona como para ser acosador, aunque las apariencias engañan, finalmente tomo la decisión.

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Beshoo😘

☆FGC☆