Edward Smith y Sadie Sink son mejores amigos desde la infancia.
Ellos vivian en texas (braham)
pasando los años, ella empieza a sentir sentimientos hacia Edward.
cuando se lo hace saber, el la rechaza, entonces ella....
sí quieres saber que es lo...
Nos dimos un beso tan lindo pero con un toque de lujuria, fue tan perfecto
-oye bonita, ¿quieres dormir en mi casa hoy? Ya es tarde y no quiero separarme de ti -dijo tiernamente-
-¿solo dormir? -cara pervertida-
-¿qu-quieres o no? -nervioso y ruborizado-
-jaja claro que si tomatito, solo le avisaré a tu suegra
-e-esta bien -aún más rojo-
Le dije a mi mamá que me quedaría con Edward, mi mamá lo quiere mucho y le tiene mucha confianza, y obviamente aceptó.
Llegamos a su casa, mi suegra salió, Edward me dijo que se fue de viaje por un asunto de trabajo con tiempo indefinido, asi que estabamos solos
-¿quieres un batido de fresa?!! -grita desde la cocina-
-si!!!! -le contesto-
Siempre llevo un short y una camisa en mi bolsa por cualquier cosa, asi que me lo puse mientras Edward me preparaba el batido
-llegando-toma tu ba....tido -me ve sorprendido- wow
-¿que pasa?- dije sonrojada- ¿me veo mal?
-no, no, para nada, te ves... hermosa
-gracias- dije sonriendo sonrojada. El dejó el batido sobre la mesa y camine hacia el
-eres hermosa rojita
-tu crees?
-claro que si, y, no sabes cuanto me pone verte con ese short que traes puesto
-Edward!!!!- dije y el se empezó a reír mientras me ponía aún más roja
-sólo digo la verdad- dijo poniendo unos mechones de cabello detrás de mi oreja, para después tomarme de las mejillas y besarme.
Edward tomo mis muslos y me cargo haciéndome sentar sobre la mesa. Abrí mis piernas para que el pudiera estar en medio.
Comenzó a meter sus manos de bajo de mi camisa, primero en el estómago y siguió subiendo a mis pechos. Estos últimos comenzó a apretarlos y sentí como jalo mi pezón izquierdo. Tuve que separarme para gemir.
Edward al escuchar ese gemido me volvió a besar más intensamente.
Se acercó más a mi y ya que el estaba en medio sentí su erección... una gran erección.
Dejo de besarme para después juntar nuestras frentes.
-que pasa?- dije
- sabes que quiero esto, pero, no quiero que tu primera vez sea en la cocina- dijo dándome un beso en la frente
-... agradezco eso, ¿sabes?
- lo único que te diré es que... yo seré tu primera, y última vez- dijo mirándome a los ojos.
-tenlo por hecho- dije para después besarlo
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