~Maldita Gorda~

19 mayo

Pasaron varios meses desde aquella vez en Laurier. ¿Adivinen que? Perdí tres kilos en un mes, pero dos semanas despues recuperé el doble. La verdad es que a pesar de ese triste final me sentía muy orgullosa de mi ya que nunca había llegado tan lejos. Lo lamentable es que cuando rompí la dieta me costó mucho retomarla, la motivacíon no era la misma. Recuerdo que no desayunaba en las mañanas y en las tardes comía una ensalada césar. Tambíen me la pasaba tomando mucha agua, pero cuando llegaba a casa me lanzaba hacia la nevera y luego al horno a devorar todo lo que mis ojos vieran y se le antojaran: pastel, pollo, yogurt, jugo, coca cola; luego me dirijía hacia la despensa y terminaba la cena con un cuarto de galletas maria acompañadas de un buen vaso con leche.

Varias veces, luego de comer, corría a mi habitacion a llorar y preguntarme por que me comía todo eso y porque aunque la conciencia me decía detente, mis manos y mi boca no obedecían.

En el cole seguían burlándose de mi, incluso me dieron un nuevo apodo "Peppa pig".

Un chico me pegó un chicle en el cabello. Tuve que cortarmelo unos centímetros mas abajo de mis hombros.

Vaya días.

Sí no me equivoco, a finales del mes de Abril mi hermano organizó una fiesta para poder pagar un ordenador que dañó del colegio luego de que nuestros padres se negaran pagárselo por haber perdido una materia. Me pidió ayuda sirviendo las bebidas. Mi hermano y yo no hablábamos mucho. No nos odiamos, pero era como si los dos fuésemos dos simples conocidos viviendo bajo el mismo techo.
Al principio le dije que no, pero al oírlo decir que Lucas estaría en la fiesta acepté. El sabía que sentía algo por su segundo mejor amigo. Fue inteligente mencionarlo.

No fuí la única a quién mi hermano Charlie le pido ayuda. También su novia Danielle y su mejor amiga Sheira ayudaron.

Cuando llegó el día de la fiesta, recuerdo que estaba vestida de negro (solo las chicas como yo entenderan por qué).

Decidí prepararme con tiempo antes de que llegara el primer invitado. Me encontraba en la cocina sacando de una bolsa unos vasos de plástico color rojo hasta que de repente aparecío Lucas. Me puse tan nerviosa que pensé en salir de ahí lo mas rapido posible, pero me quede quieta cuando él se me acercó y gentilmente me pregunto si sabía donde estaba la escoba ya que había hecho reguero. Toda timida le dije que no se preocupara que yo lo barría. Él me lo agradeció y después se fue.
Para muchos será algo tonto, pero para mi, en ese momento, a parte de haber logrado perder tres kilos, fue lo mejor que me había pasado en meses.

Maldita Gorda a regresado❤

Quería darle las gracias a Sthephany por la gran ayuda que me esta dando con la historia💕