Jueves 8, marzo

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Querido David:

Ya no quiero quererte. Hoy entraste a nuestra clase, nos explicaste las ramificaciones de las venas, y yo lo único que podía pensar era "No lo mires, no lo mires"
Y tú me ignoraste como siempre. Y todo estuvo bien por un tiempo. Pero entonces llegó Ivonne, y comenzaron a hablar y yo sólo podía contener las lágrimas.
Esperaba que esa fuese la primera y la última clase en la que tuviese que verlos juntos.
Pasaste la mayor parte de la clase haciendo bromas de las que tú acostumbras, y yo intentando no mirarte, pero resultaba tan difícil.
Hoy he entrado de nuevo a esa aplicación, algunos chicos me han enviado mensajes, lo único que he buscado hasta el momento es que usen lentes, pues tus los haces ver increíbles, y nada de chicos de mi edad, ese es el problema.
Es algo curioso. Toda mi vida soñé con tener un romance de cuento de hadas con un chico "normal", un chico joven, divertido, inteligente, ingenioso... Perfecto. Y soñaba con que estaríamos juntos por el resto de nuestras vidas, y que con cada día lo vería madurar y cierto día veríamos su primera cana y envejeceriamos juntos.
Y ahora que te veo de pie frente al salón me doy cuenta que nada de eso me importa, que sólo quiero estar contigo, no importa el tiempo que pasamos separados, sino el que podemos pasar juntos.
Y sé que si nosotros quisiéramos las cosas podrían funcionar.
Pero tú sólo estas ahí, hablando tan animado como siempre sobre la anatomía.
Y ella esta sentada en el escritorio contemplando al que muchas han amado y muchas amarán. Tú.

Entre nosotros, todo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora