Quiroz, Quiroz, Quiroz

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Capitulo O1 ~ Quiroz, Quiroz, Quiroz.

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<< Justin Bieber >>

Entré a la habitación, una obscura recamara al fondo de aquella gran mansión, perteneciente a la novia (semanal) de Erick, la cual se encontraba de Vacaciones con su familia en Hawái. Al fondo, se encontraban el rubio, Josephine, y Yuro, hablando entre cuchillejos trazando con un dedo una clase de ruta sobre un mapa extendido sobre la mesa. Me acerqué a ellos provocando un sonido al caminar sobre el piso de madera pulido. Ninguno de los tres se sobresaltó ni se inmutó a verme.

- ¿Consiguieron algo? - pregunté al estar detrás de ellos. Josephine levantó solamente su mirada, eh interrogó a Yuro con esta misma. Algo me ocultaban... Lo sentía en su ritmo cardiaco.

- Tenemos malas noticias. - Yuro se enderezó frente al escritorio de madera de pino, café obscuro casi negro, mirando como la flama de fuego carcomía los troncos de madera que los sirvientes habían ido a conseguir a la montaña esa mañana. Nos encontrábamos en un pequeño pueblo costero, al suroeste de Alaska, conseguir madera fresca era cosa de todos los días.

- ¿Malas? - pregunté sereno.

- Para ti. - giró lentamente, mientras que yo fruncía el ceño. ¿Malas noticias para mí?

- Somos un equipo, lo que es malo para uno, nos arriesga a todos. - Erick y Josephine levantaron sus miradas al escuchar aquella última frase.

Siendo parte del distrito alfa, los únicos en realidad, nuestro deber era del que dependía toda nuestra secta. Si yo no encontraba a Quiroz, y si no encontraba al hombre de la sangre azul, entonces todos moriríamos. Era un trato con el mismísimo Demonio, maldito sea el día en que se pactó. Por ello, no me sorprendía en lo más mínimo la reacción de mis dos compañeros: Si yo hacía algo mal, a ellos me los llevaba entre las piernas, conmigo, a lo más obscuro de las cumbres boscosas.

- Quizás tengas razón... Esto quizás pueda distraerte. - agregó Yuro, mientras que yo seguía sin comprender palabra: ¿Distraerme?

- Nada puede distraerme. - aseguré inflando el pecho, orgulloso de saber que eso era verdad.

- No estarás tan seguro de eso cuando...

- ¡Erick! - interrumpió Josephine de repente al rubio, generando que se callara la boca y no pudiera terminar su frase. La miró con vergüenza, y si decir palabra ni chistar, miró otra vez hacia el mapa.

- ¿Tienen la ubicación de Quiroz? - pregunté llegando a la histeria total. Nada importaba más que ella en aquel momento.

- Tenemos la ciudad donde está, sin embargo, no tenemos quien es, ni qué edad tiene, ni tampoco en que parte del sector encontrarla.

- La buscaré casa por casa si es necesario. - aseguré respirando agresivamente mientras posaba mi mirada en cada uno de los ojos pardos y violentos que se encontraban en aquella habitación. - ¿Donde es? - pregunté de repente. Los tres no dijeron palabra alguna. "¡Vamos! ¡Hablen!" - ¡¿Donde es?! - pregunté en un grito de lo más profundo de mi garganta.

Josephine y Erick intercambiaron una larga mirada; Yuro era ajeno a eso. Sin murmurar sonido alguno, ambos dieron un paso a su costado, dejando libre la vista del mapa extendido sobre el escritorio. Con el puño cerrado, y la quijada forzada, caminé vacilantemente hacia la mesa, y miré con detención el mapa. Recargue mis manos a los bordes de la mesa, mientras examinaba las rutas marcadas. Encerrado en un círculo con tinta roja, se encontraba un pequeño pueblo al sur de Texas... Brownsville.

Mis ojos se quedaron en blanco. No levanté la mirada, no podía dejar que ninguno de los tres notara mi debilidad, no me era concebible, si lo hacían no me creerían capaz de enfrentar al pasado, un pasado que hacía tres años, me reusaba a hablar de él.

- Más exactamente, Perklin, High School. - Agregó Yuro, provocando en mi otro mini infarto. Trague gordo. "¿Que pasaría si 'Ella' sigue en Perklin?"

- Justin... - Josephine se acercó a mí los pocos pasos que nos dividían, y posó su mano en mi hombro. - ¿Quieres que yo lo haga? - preguntó mientras que Yuro y Erick la miraban. Yo seguía inmerso en mis pensamientos.

"Ella no te recordará, Justin... Te verá y no sabrá quién eres". Aclaró mi subconsciente. "Tu solo tienes que ir a buscar a Quiroz. No mires a Le... A Ella. Quiroz, Quiroz, Quiroz."

- El único que la puede encontrar soy yo. - una ronca voz salió desde el fondo de mi pecho. Trague gordo. "Quiroz, Quiroz, Quiroz".

Los tres presentes intercambiaron miradas entre sí. Yuro asintió la cabeza mirando a Erick, el cual salió disparado por la puerta. Los miré nerviosos.

- ¿A dónde va?

- Por tu ropa. - Aclaró la pelirroja, que con El paso de los años, su cabello era un tono más oscuro. - Ya eres Senior Year, tienes que llegar con buena impresión a Perklin. - agregó con una falsa sonrisa en el rostro. Yo suspiré vencido.

¿Por qué Brownsville otra vez? Pensé que ya habíamos terminado allí, habíamos confirmado que No era el lugar, que Quiroz no se encontraba ahí. Pensé que después de confirmar que Le... La chica, No era Quiroz, ya no volveríamos a aquel pueblucho nunca jamás... Y ahora estoy empacando para regresar a Perklin High School.

C O N T I N U A R A ~

The Red Pawn~ Segunda Temporada &lt;TERMINADA&gt;Donde viven las historias. Descúbrelo ahora