* 𝕆𝕦𝕥𝕣𝕚𝕘𝕙𝕥 𝔻𝕖𝕔𝕖𝕡𝕥𝕚𝕠𝕟 *

~ 𝕮𝖆𝖕í𝖙𝖚𝖑𝖔 60~

Quedarse dormido no le tomó  tiempo como Jungkook había pensado que lo haría. Había tomado un total tres segundos, no más, no menos. Nunca se había sentido tan desgastado, era como si Anne hubiera estado picando en su cerebro con imágenes nítidas y palos de metal, jugando con los nervios expuestos que envían descargas eléctricas por todo su cuerpo.

Cuando se despertó, afuera estaba oscuro, lo que significaba que estuvo durmiendo por mucho tiempo. Parpadeó a la celda, tratando de averiguar cuánto tiempo había sido. 

— Oye, ¿estás despierto? — A pesar de lo suave que habían sido las palabras, Jungkook saltó, su cabeza buscando de donde había provenido la voz, su corazón latía de forma errática. —Lo siento, no quería asustarte... —Jungkook se limitó a asentir y se incorporó lentamente, gimiendo un poco mientras lo hizo. Odiaba lo asustadizo que se sentía, lo paranoico que estaba actuando. 

— Dios, necesito una ducha— murmuró, más para él que para Taehyung. Su cabello estaba tan grasoso y sucio, se sentía más como una peluca que su propio cabello — ¿Qué hora es? —¿Qué estaba haciendo Taehyung aquí? ¿No le había dicho Anne que regresar a casa después de todo?

— Casi cuatro de la mañana. 

— Bien. 

— Has dormido más de veinticuatro horas. 

— Mierda—  Jungkook no podía creer que hubiera dormido tanto, pero eso explicaba por qué Taehyung estaba allí, podría ya haber estado en su casa. A Jungkook solo le quedaban unos pocos meses, no podía gastarlos durmiendo. Podría dormir cuando estuviera muerto. Porque enfrentándolo, ¿qué jurado podría creer todo lo que tenía que decir después de tanto tiempo? 

Probablemente pensarían que solo se estaba engañando a si mismo tratando de huir de su condena, tratando de convencerlos de dejarlo vivir. No tenía grandes esperanzas, pero no se atrevía a decírselo a Anne o a Taehyung. Anne estaba segura que podrían hacerlo y Taehyung estaba tan molesto cuando se enteró. Jungkook no quería aplastar cualquiera de sus esperanzas. Se dio la vuelta lentamente, colocando sus pies en el suelo y levantándose. Taehyung voló sobre sus pies para ayudarlo, sosteniéndolo de los brazos, ayudándolo a levantarse.

—Gracias— Jungkook murmuró y se soltó de su agarre, Taehyung lo dejo ir rápidamente, sin decir ni una palabra. 

—¿Cómo te sientes?— preguntó Taehyung cuidadosamente — Yo...yo pedí permiso para entregarte...—Abrió su mano y Jungkook le dirigió una rápida mirada antes de aceptar las píldoras, poniéndolas en su boca. 

—Gracias— dijo Jungkook de nuevo, evitando sus ojos. 

— Emm—Taehyung se rascó el cuello, aclarándose la garganta— Puedes ir a bañarte, esperare. 

Jungkook no podía mirarlo. No cuando tenía esa cara, esa interesada y preocupada cara. Por alguna razón se sentía demasiado incómodo. Todo estaba descubierto, ya nada estaba escondido y Jungkook se sentía desnudo. Ya no había nada para esconderse atrás, y ahora los dos andaban en cuclillas alrededor del otro, con miedo de decir o hacer algo malo que pudiera romper su ya tan rota relación. 

— Sí— Jungkook le lanzó una mirada fugaz. Notó, incluso aunque su memoria estuviera difusa. Taehyung llevaba la misma ropa de los últimos dos días. — Por favor dime que te fuiste a casa mientras estaba dormido— dijo y Taehyung tosió, luciendo un poco de vergüenza debajo de la consternación y preocupación— Dios, tú sólo...—Jungkook sacudió la cabeza.—¿Por qué te quedaste? ¿No te dijo Anne que te podías ir? También podrías usar la ducha, ya sabes. No es como si fuera a morir si te fueras a casa mientras duermo.— Taehyung frunció el ceño a la elección de las palabras y Jungkook se sintió un poco mal por haber mencionado la palabra con M.