Yerim, una chica inocente que trabaja en una cafetería llamada Brown Side, un día llega una nueva empleada llamada Wendy. Estas chicas comenzaran una amistad muy fuerte, la que poco a poco se desvanece para convertirse en amor.
Como era de esperarse, al día siguiente Wendy se encontró forzada a actuar como si no sucediera nada con su compañera, en lo cual no tuvo éxito.
—Nos vemos mañana Yerim, tengo que irme ya —Dijo fríamente la mayor, retirándose después de la jornada.
—Wen, ¿te pasa algo?, te veo decaída —Pregunto preocupada la menor —Si es por lo de ayer, lo siento, fue de último momento.
—¡¿Tienes el descaro de afirmar que era un trabajo de la escuela?! —Interrumpió la mayor con ira.
—¿E-Eh? —Respondió tartamuda la menor.
—Te vi ayer, estabas con alguien más. Me mentiste —Reclamo con aún más ira.
Su contraria quedó muda; se empezaba a ver como le hacía agua los ojos; su cara quedaba impactada por la situación.
Después de un corto pero eterno silencio, la mayor se había ido sin decir más.
Los días siguientes ninguna se dijirio a su contraria para otra cosa que no fuera por motivos de trabajo. Wendy renunció transcurridas dos semanas desde ese evento.
La menor buscaba una forma de disculparse y explicarle a Wendy lo que había pasado, pero no encontró una forma de hacerlo, pues no sabia donde vivía ni cuales eran sus conocidos.
El tiempo pasaba, Yerim seguía con sus estudios; en el trabajo llegó una suplente, amigable, pero no remplazaba el vacío de Wendy; el joven con que decidió salir aquella noche en vez de Wendy, la engaño; sus padres estaban decidiendo en rentar los cuartos en su hogar; pero, sin rastros de Wendy.
Una noche, Yerim se preparaba para la ola de exámenes que se aproximaban la siguiente semana; tomó un descanso para ir a cenar con su familia; sin embargo, alguien llamó a la puerta, su padre atendió.
—Hija, alguien te busca, dice ser tu amiga —Dijo su padre mientras regresaba a su asiento, con una sonrisa plasmada en su cara —Se ve que tiene algo de prisa, le insistí en que pasará, pero parece que sólo quiere decirte algo importante —Termino diciendo el señor Kim con una cara de satisfacción.
La joven se levantó directo a la puerta, al abrir esta, vio a una mujer de cabello castaño, ojos oscuros y piel pálida, la miraba con mucha ilusión, y con la misma sonrisa cálida desde el día en que se conocieron; Wendy esperaba en la puerta.
—Hola —Dijo rompiendo el hielo —Espero que no te hayas olvidado de mi —Añadió en broma.
—Cómo podría olvidarte... —Respondió con voz baja la residente del hogar.
—Veras, estas últimas semanas, han sido difíciles —Dijo con más seriedad unos segundos después sin decir nada —He querido llamarte... pero es difícil —Continuo hablando pausadamente.
—Yo también, pero esperaba que tú me llamarás —Interrumpió su contraria, provocando una pequeña sonrisa en la visitante.
—He venido para terminar con esto, Yerim —Dijo sonriente su contraria —Pronto me iré del país, te había dicho que quería dedicarme a la música, y hace unas semanas surgió una oportunidad para seguir mi sueño —Continuaba diciendo la joven —Quería decirte... pero, no veía como mirarte a la cara.
En la cabeza de su contraria, sólo retumbaba las palabras "me iré del país", esto le hizo recordar el mal que le hizo a Wendy aquel decepcionante día, intentando no corromper en llanto total y bajando la cabeza, por los disturbios causados.
—Me iré mañana y, quería despedirme especialmente de ti —Dijo sonrojándose y decidida a hacer algo.
La visitante dio un paso al frente, acercándose más a la joven, incluso llegando a asustarse Yerim de lo cerca que estaban, se dejaron llevar, para luego juntarse lentamente los labios de ambas chicas, un beso delicado, fragante, demasiado hermoso para expresarlo en palabras.
Ha pasado un año desde que Wendy se fue del país; también desde ese primer y último beso.
Yerim desde ese día sólo piensa en ella,ccomo si fuera la única persona en el mundo. Su mundo.
Cuando Yerim se encontraba ya viviendo sola y sobreviviendo de su trabajo a base de su carrera, una noche preparaba la cena viendo la televisión de fondo.
—¡Una nueva artista esta surgiendo en medio de la fama! Esta chica de tan sólo 27 esta conquistando al mundo entero con su belleza y hermosa canto, su nombre es Wendy. Su primer sencillo "Because I Love You" es todo un éxito... —Narraba el presentador de las noticias, mientras pasaban algunas imágenes de ella.
—Es Wendy... —Murmuraba la joven, comenzando a marcarse una sonrisa en su rostro y saltar de alegría pues por fin había vista triunfar a su amiga. —... pero para los que quedaron cautivados con sus encantos, desgraciadamente esta chica anunció esta semana su compromiso con Eliot Stevenson, al igual que ella, un novato de la nueva generación... -Anunciaron durante la cápsula.
Yerim pronto dejo de saltar, sintió un dolor en el pecho, un hueco en su corazón, sentía que se destruía por dentro; comenzó a llorar, sólo llorar de dolor, decepción y, sintiéndose la persona mas desdichada en ese momento.
Desgarrada, tirada en el piso, llorando y sufriendo, por amor.
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