MAC.

⟻VI. COSAS QUE PASAN.⤛

Se fueron las luces junto a las palabras de mi padre y comenzó a sonar música movida. Obviamente era oscuro pero tranquilo a pesar de todo, se notaba que la gente se divertía tomando y bailando, algunos con tabaco en boca y chicas a su alrededor y otros ven esta oportunidad para conseguir contratos y clientela de alto rango, aunque había personas que simplemente presumían su dinero.

Yo estaba en una esquina posada en una mesa blanca alta, tomando un Between the Sheets cóctel el cual se podía beber a cualquier hora del día.

Ya no llevo la cuenta realmente de cuantos me he tomado hasta ahora.

—Cualquiera viéndote de lejos diría que eres más de beber un cóctel dulce que uno tan seco.

—Y yo diría que eres más de estar en un campo de batalla que en este tipo de evento formal.

Nos dedicamos unas miradas intensas llenas de coqueteos y nos acercamos peligrosamente, cara a cara, pero sin llegar a tocarnos. Prediciendo lo que posiblemente estaba a punto de ocurrir decidí apartarme para darle un buen sorbo a mi cóctel y proseguí a preguntar.

—¿Qué haces aquí? ¿No deberías estar en una misión?

—La misión está bien, no te preocupes jefa. No me perdería este drama por nada —ladeo su cabeza mientras sonreía.

Él es Lucas. 20 años, digamos que es un compañero de trabajo el cual no dejaba de entrometerse en mi vida, pero no puedo negar que a veces me servía como distracción, después de todo, este muchacho y yo tenemos historia por detrás. Portaba un aspecto agradable y seductor vistiendo un blazer azul rey oscuro de dos botones, una camisa blanca, un pantalón del mismo color que el blazer y sí que tenía buen cuerpo para lucirlo, tenía una corbata roja que conociéndolo se la quitaría en cualquier momento. Al detallarlo más a fondo mi vista se topó con una ligera barba que estaba perfectamente en forma de candado, Pelinegro, ojos marrones y un buen sex appeal.

—Entonces qué me dices —dijo el sacándome de mi mente, haciendo que pusiera una expresión de pérdida

—¿Qué?— Volteó los ojos gracias a mi reacción, poniendo ambas manos en sus bolsillos.

—Te parece si te acompaño el resto de la velada mi hermosa dama —saco una de sus manos y agarró la mía regalándole un pequeño beso.

—Lo siento Lucas, hoy creo que tengo a Mac algo ocupada —y el otro entrometido hizo aparición después de un rato.

Oliver, Oli o Nerd como le decía yo por cariño. Un poco tarde para presentaciones, lo sé, pero no podía dejar sin describir mejor al que es lo más cercano a mejor amigo que he tenido en mi vida, y a pesar de ser un nerd no era nada feo, más bien, él es un atractivo castaño con lentes, posee unos llamativos ojos verdes, una muy buena altura y una hermosa sonrisa blanca y derecha, gracias a su adicción al cuidado dental. Además de ser mi compañero en muchas cosas, es el que se encarga de limpiar mi desastre. Crecimos y entrenamos juntos, así que no es un completo enclenque, podría llegar a considerarlo parte de mi familia, aunque nuestra relación desde hace un buen tiempo, se ha visto algo complicada. Entre él y yo, hay algo que no puedo describir en simples palabras, es raro y confuso.

Si de edad hablamos es contemporáneo con Lucas. Irónico ya que ellos dos no suelen llevarse muy bien.

Oliver me jalo del brazo dejando a Lucas con mala cara llevándome para algún sitio, llámenme loca pero la situación de que dos chicos se peleen por mí me parecía divertida y por eso mismo no se ha escuchado queja alguna saliendo de mi boca.

Me arrastró a una de las habitaciones de arriba que este salón poseía, estaba equipada con unos muebles y un mini bar, era algo así como una sala o un lugar de reuniones informales.