Vingt et Un

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Ambas hicieron contacto visual, para luego sonreírse.

"Lo siento." Anyca fue la primera en dirigirse hacia la asiática.

"Yo también lo siento. No debí esconderte lo que estaba sucediendo con Jungkook. Debí decirte de qué se trataba."

"Siento haberte tratado tan mal, no lo merecías." Suspiró. "No sé cómo compensártelo, de verdad. No puedo creer que Namjoon sea la persona por la que tienes sentimientos."

"Así es." Bajó la cabeza enrojecida. "Me enamoré de él desde el primer día en que lo vi." Su rostro se entristeció de golpe. "Pero sé que jamás pondría atención en mí. No podríamos tener oportunidad."

"Pienso que todo es posible." Anyca se limitó a responder.

"No lo creo amiga, podría perjudicar a ambos." Yangmi advirtió. "No perdonan nada. Si llegaran a enterarse de un romance secreto entre el staff y los idols, estarían en graves problemas."

"Ya veo." Anyca sintió más miedo del que tenía antes.

El teléfono comenzó a vibrar y la chica no dudó en responder.

"¿Anyca?" Se escuchó del otro lado de la línea.

"Sí. ¿Quién habla?"

"Soy yo, el mánager de los chicos." Anyca colocó el teléfono en altavoz para que las demás pudiesen escuchar.

"Oh, qué tal."

"Necesito que vengan de urgencia al estudio, los chicos fueron nominados en una entrega de premios y la fecha estaba arreglada para dentro de dos semanas. Resulta que movieron el día del evento para hoy por la noche. Así que necesito que vengan a prepararlos." Habló demasiado rápido pero a pesar de ello la chica comprendió absolutamente todo.

"Está bien. Estaremos en el estudio en diez minutos." Informó tomando su bolso.

"El staff también está invitado al evento, pues asistirán todos los artistas de kpop. Entonces el equipo administrativo de la entrega de premios decidió que los estilistas, camarógrafos y gente encargada de producir a los idols podría estar presente." La chica sonrió al oír esas palabras, mientras que las otras aplaudían con delicadeza.

"¿Alguna vestimenta en especial?"

"Verás Anyca, yo sé que tú tienes un estilo..." Se hizo silencio por un segundo. "Peculiar." La chica hizo una mueca con los labios. "Así que la empresa quiere encargarse de arreglarte adecuadamente para el evento. ¿Estás de acuerdo con eso?"

La latina quedó unos segundos pensante. Evidentemente no le gustaba que criticaran su estilo, pero analizando la situación y sabiendo que se trataba de un evento de suma elegancia, no dudó en aceptar. "Estoy de acuerdo."

"Genial. Las esperamos lo antes posible, después de todo nuestros idols no serían nadie sin nuestra ayuda."

Cortó la llamada y las tres chicas estrecharon sus manos con emoción y luego de pagar casi instantáneamente,  fueron hasta la empresa.

"Jamás había ido a un evento como este." Habló Suni con entusiasmo mientras cada una pasaba sus tarjetas por el sensor.

"Yo tampoco, esto será estupendo." Comentó Yangmi.

Las tres chicas ya se encontraban dentro del camarín, esperando con ansias a que los idols llegaran así poder arreglarlos para la premiación. Anyca se comía las uñas nerviosa, mientras que con la pierna hacía vibraciones continuas. Estaba nerviosa.

¿Por qué? La respuesta era simple: temía con todas sus fuerzas que ella no fuese suficiente para aquel evento, que no lograse encajar.

Lo cierto era que jamás había estado en un lugar con personas tan importantes, con tanta elegancia, fama y dinero. Ella era una simple extranjera que venía desde latinoamérica en busca de trabajo. Ni siquiera en su país natal vivía del ostento. La situación económica la obligó a emigrar, y el país en el cual sintió que encontraría oportunidad laboral para lo que ella había estudiado era nada más y nada menos que Corea del Sur.

Los chicos ingresaron a la sala como lo hacían habitualmente, haciendo directo contacto visual con las estilistas para luego hacer una reverencia en forma de saludo. Los maquillaron y luego de eso les tocó ayudarlos a vestirse. Para dicha premiación se exigía que las mujeres llevasen vestidos fastuosos y los hombres de trajes, corbatas o moños con colores a elección.

Anyca tomó el color de tela que Jungkook había elegido y rápidamente corrió hasta los vestidores para alcanzarle un traje que consistía en una camisa blanca, saco y pantalones azul marino y una corbata haciendo combinación con aquel color. El idol abrió de golpe la cortina haciendo que la chica presenciara su amplia espalda y pecho desnudos. Ella parpadeó un par de veces para luego extenderle con nerviosismo la ropa, la cual el otro tomó sin rodeos. Entonces regresó al sector de maquillaje para ver cómo seguían los otros y asegurarse de retocar o acomodar lo que faltase. Se acercó a Hoseok y acomodó su corbata, a lo cual él sonrió con cariño y la abrazó. Ella se sonrojó para luego tomar distancia. Divisó a Yoongi sentado en uno de los sofás, con la cabeza recostada en el respaldo y los ojos cerrados. Luego vió que su cabello se había desarreglado levemente, entonces se acercó y se inclinó hacia el chico. Con las yemas de sus dedos acarició suavemente el cabello del chico, acomodando los pequeños machones celestes alborotados. Fue entonces cuando Suga abrió los ojos, teniendo el rostro de Anyca a poca distancia.

"Espero que te pongas algo decente." Min habló malhumorado y toda la ternura del ambiente cayó de golpe.

Anyca hizo una mueca de disgusto frunciendo el ceño y rápidamente alejó la mano del chico. "Eres un insulso Min Yoon Gi." Él sonrió levemente para volver a mirarla.

"Y tú una anticuada con la moda. Aun no puedo entender cómo es que escoges la combinación perfecta para nosotros pero tú no logras siquiera crear armonía con las telas que llevas puestas."

"Es mi problema." Anyca se justificó  para luego mirar el reloj. "Ya es hora, nos encontramos en el evento. Mucha suerte." Hizo un ademán para que los chicos comenzaran a abandonar la sala.

Jungkook fue el último en salir de los vestidores y cuando lo hizo, los ojos de Anyca vagaron sin recelo por su cuerpo. El traje le sentaba a la perfección y la chica sintió que su corazón se le saldría del pecho en segundos.

"¿Te veo allí?" El chico se limitó a decir mientras se acercaba a ella.

"C-claro. Estaré en unas horas." La chica tembló al tenerlo tan cerca, pues su colonia varonil la hacía enloquecer.

"Te espero." Le regaló una sonrisa y caminó hacia la salida.

Definitivamente el corazón se le había derretido.

...

"¡Oh por dios! Anyca, ¡Estás hermosa!" Yangmi no podía creer lo que estaba viendo frente a sus ojos.

Suni le había dado una mano con el arreglo a la latina, pues la ayudó a alisarse el cabello y a elegir el atuendo ideal.

La chica jamás se había visto de tal forma, era irreconocible. El vestido que la empresa le había prestado pronunciaba sus curvas a la perfección, resaltando sus pechos con un escote prominente y sus caderas y glúteos. El color rojo de la tela resaltaba su piel levemente bronceada y los zapatos de tacón la hacían ver más elegante aun. Llevaba el cabello lacio, joyas simples y un maquillaje que no solo resaltaba sus ojos grandes sino también sus labios con un labial rojo intenso.

Perfecta, simplemente perfecta.

Se miró al espejo y no pudo creer lo que estaba viendo. Se sentía bella, se sentía única y especial por primera vez en su vida.

Se sentía capaz de conseguir la atención de Jeon Jungkook.

Paint my Heart ⇨ J.Jk (Completa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora