El show de marionetas.

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Ya era tarde en el pueblo de Gravity Falls; donde la gente era estúpida, pero feliz.

El sol brillaba débilmente sobre una vieja caballa situada en medio del bosque. La cabaña del misterio había servido como trampa de turistas por mas de 30 años, todo gracias al ingenio de su dueño Stanford Pines, o al menos ese era el nombre por el que era conocido en el montañes pueblo. Un hombre mayor, ya en sus sesenta (tal vez mas) años de edad.

Pero las cosas para el viejo Stan cambiaron drásticamente cuando le tiraron a sus dos sobrinos-nietos en las vacaciones de verano. Pero al final el viejo Stan uso su ingenio y convirtió a sus dos visitas indeseables en mano de obra gratuita.

Dipper y Mabel, nunca se quejaron de trabajar en la vieja cabaña; de hecho les agradaba. Ambos chicos eran gemelos, es mas; nadie los hubiera identificado sin no fuera por que uno orinaba sentado y el otro parado.

Ambos eran muy unidos, después de todo, eran ellos dos solos contra el mundo. Si no se apoyaban mutuamente, ¿quie lo haría?

Ambos estaban siempre para el otro, excepto cuando Mabel se interesaba en un muchacho. A Dipper no le molestaba que su hermana lo dejara de lado por una cara bonita, le agradaba ver a su hermana acosando (por que no se le podía decir de otra manera) a los pobres chicos lindos que tenían la desgracia de conocerla.

Pero esta vez Mabel avía llegado demasiado lejos. Maldicion, la chica monto todo una obra teatral, solo para agradable a uno de esos muchos chicos de los cuales la niña se enamoraba perdidamente.

En el teatro de Gravity Falls. Allí se podía ver como se llevaba a cabo una obra de títeres. También como dos niños de 12 años corrían por todo el lugar.

Mabel corría sin descanso con una especie de diario en brazos, la libreta estaba forrada con un color rojizo y tenia una mano dorada de seis dedos, con el numero "3" grabado. La castaña huía de su hermano, o bueno, del cuerpo se su hermanó. Ya que aunque fuera Dipper por fuera, no lo era por dentro, por que el cuerpo del castaño avía sido poseído por un demonio multidimensional con forma de dorito. Si, algo normal en Gravity Falls.

El verdadero Dipper se encontraba manejando a dos marionetas, ya que aun cuando solo fuera una alma fuera de su cuerpo, no dejaba de ayudar a su hermana.

Mabel optó por escapar en una decoración de la obra, bajando del techo del teatro como si estuviera en un ascensor.

Pero el castaño vestido de padre fue mas inteligente. Tomando la cuerda que sostenía la decoración, fue subiendo poco a poco a la castaña.

—Vamos, mocosa —dijo el chico con ojos de gato—. Dame el diario y prometo no destruir tu estúpida obra.

Mabel estaba acorralada, no quería que todos sus esfuerzos se fueran a la coladera. No tuvo mas que aceptar los términos del demonio.

—De acuerdo, Bill, tu ganas —Mabel estiro el diario para que el chico tomas el diario—. No tengo de otra.

—Asi es —Bill sonreía de oreja a oreja mientras jalaba la cuerda—. Además ¿quien sacrificaría todo su trabajo por un torpe hermano?

El castaño termino de subir a la chica y le arrebato el diario de las manos.

—Recuerda tu promesa, no arruines mi obra.

—Oh descuida, mocosa —el castaño sonrió de oreja a oreja—. Ahora que tengo esto, lo ultimo que me interesa es tu estúpido show de...

No pudo terminar ya que una de las marionetas del show lo golpeó en la cara, mientras que otra golpeo el diario, haciéndolo caer al suelo.

Bipper: el dios del caos y la locura.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora