Capítulo 5

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LORDAG 15:15

Se está tan agusto aquí, pienso mientras beso a Isak en la frente.

Tumbado boca arriba con los ojos cerrados recuerdo lo de anoche. No sé como sucedió pero me gustó, mucho. Isak Valtersen me gusta y mucho.

Después de salir corriendo con la bici llegamos a su casa empapados, no quería separarme de él ni un instante y no me negó mi auto invitación a quedarme a dormir en su cama, ya que era lo que más deseaba en esos momentos.

Nos tumbamos en la cama y después de varios besos Isak se quedó dormido entre mis brazos, es demasiado adorable pensé mientras le veía dormir.

Hoy me he despertado contemplando la espalda de Isak, me doy cuenta de que aun lleva la sudadera gris que se puso ayer por la noche. Comprobé si aun dormía pasándole la mano suavemente por el hombro. Inconscientemente se ha girado y ha apoyado la cabeza en mi pecho acurrucándose mientras cerraba los ojos de nuevo, siento la calidez de su cuerpo contra el mío, estoy helado. Siempre estoy helado.

Le beso en la frente pensativo. No sé que voy a hacer con mi vida, Sonja ahora mismo me la trae sin cuidado y lo único que quiero es estar con esta preciosidad que tengo entre mis brazos.

Inmediatamente oigo vibrar mi teléfono otra vez, ha sido el causante de que me haya despertado.

13 llamadas perdidas de Sonja

Al leerlo bloqueo el teléfono como las otras doce veces restantes y pongo los ojos en blanco dejando el teléfono en la mesita.

Cierro los ojos de nuevo y suspiro profundamente, en casa de Isak se respira una paz increíble, todo está tranquilo, no se oye nada ni a nadie. Solo puedo pensar en que estamos él y yo acurrucados en su cama bajo el calor de las sábanas mientras una ligera luz de invierno atraviesa las cortinas y le da un toque de calidez a la habitación.

Podría quedarme aquí todo el día, o toda la vida...

Noto como el dedo pulgar de Isak me acaricia suavemente el cuello y abro los ojos.

Unos ojos verdes me contemplan desde mi pecho como un cachorrito.

Le devuelvo la sonrisa y después me regala un beso lento y suave. Separa sus labios de los míos lentamente sin perderse detalle de los ojos azules que le contemplan y apoya la cabeza en el brazo que tengo por debajo de su cuello. Con esa misma mano lo abrazo y lo acurruco contra mí como si quisiera protegerle.

Entre mis brazos siempre estarás seguro Isak, aunque me sea imposible estar contigo.

Me acerco a su cara, contemplando unos ojos que no se separan de los míos, y rozo mi nariz contra la suya moviéndola suavemente de un lado a otro. Él me sonríe. Me encanta darle mimos. Pego mis labios a los suyos y le doy un beso suave disfrutando de todo él, presiono levemente su labio inferior con mis dientes y después le beso en este.

Cierro los ojos relajado mientras sigo dándole besos suaves y lentos, no quiero perder detalle del sabor de esos maravillosos labios y de esa sonrisa tan preciosa.

Entrelazo mis dedos entre los mechones rubios que le sobresalen de la capucha y le acaricio la cabeza, puedo notar como cierra los ojos y hace rozar su nariz con la mía de nuevo.

-Que película era?

-Solo una de Nicolas Cage- me dijo refiriéndose a una película que vio hace una semana.- Una en la que no sobreactúa

-Pero eso es posible? - le pregunto irónico

-Creo que si

Nos quedamos callados disfrutando de la paz que se respira entre nosotros y aquella habitación.

JUST EVEN by MaybehappenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora