Beyazkar

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Érase una vez en una tierra inmemorial aislada de todo y rodeada de un frondoso bosque, Gomatz y Zaida vivían junto a sus subordinados los cuales eran apenas cinco.

Zaida deseaba ser madre, y todas las tardes junto a la ventana en su aro de ébano solía perderse en sus pensamientos, aquel día sin percatarse pinchó su dedo derramando así tres gotas de sangre en un poco de nieve que se había colado por la ventana.

Al ver el color rojo de su sangre con el blanco de la nieve, en voz alta deseo ser madre de una niña blanca como la nieve con los labios rojos como la sangre y con cabello negro cual ébano.

Gomatz la observaba desde el umbral de la puerta, pues sintió su sangre siendo derramada y sin que ella se percate la escucho, él la amaba tanto y quería que sea feliz y aun con miedo de perderla decidió darle un hijo.

Poco tiempo después nació, como lo deseo aquella tarde una niña, su piel era blanca sus labios rojos  y aunque su cabello era poco el color negro se hacía presente, se podía ver en sus ojos ella era especial y al ser Zaida una humana no logro sobrevivir al parto.

Gomatz estaba destrozado por la pérdida de Zaida pero aun así amaba a su pequeña fruto del amor que un día se tuvieron, le dio el nombre de Beyazkar y cuido de ella junto a una de sus subordinadas Arana, ella era muy bella y aunque Gomatz no la amaba una relación carnal se había formado entre ambos.

Para Gomatz su hija era primero, y el amor incondicional que le demostraba hizo que en los 16 años que habían trascurrido la envidia y el rencor crezcan en Arana, quien en un intento por ser la única en su vida, ordeno a Aron su subordinado que matase a Beyazkar y le trajera su corazón, esta era la única forma en que Gomatz sería solo para ella.

Aron había sido el último en llegar y solo servía a Arana quien lo transformo, por lo cual debía obedecer, se llevó a Beyazkar al bosque, allí daría fin a su vida. Cuando se encontraban en medio del mismo, y el sol poco a poco se iba acercando al horizonte, tomo su daga en un intento por atravesar el pecho de Beyazkar, ella sintió a Aron y dio vuelta, sus miradas se cruzaron, y el sonido de la daga contra el suelo se hizo presente, Aron advirtió que debía huir, irse lejos, no volver.

Beyazkar entendió lo sucedido y corrió adentrándose aún más por el bosque, mientras Aron mataba un jabalí para sacarle el corazón que sería entregado a Arana.

Existían leyendas sobre criaturas que habitaban el bosque seres que fueron despreciados y sin motivo para vivir, en medio de los arboles pudo reconocer lo que en el pasado fue una cabaña, la noche había caído debía entrar, allí encontró siete seres de pequeño porte y aspecto grotesco, una mirada basto para sembrar pánico y saber de qué criatura se trataba, uno de ellos quería matarla para después comérsela, mientras otro les hizo recordar a cierta humana que estaba al pendiente que no los aborrecía y les proveía de alimento, de esto 16 años habían pasado pero aun la recordaban.

La similitud y belleza se podía apreciar y en un acto de reciprocidad cuidaron de su hija, pasaron los años y su cambio se dio, ellos sabían que sería difícil mantenerla oculta pues hace 1 año que Arana sintió su presencia y mato a Aron por su traición. En pasadas ocasiones ya la habían visto rondando el lugar, mientras Gomatz salía del reino en busca de su hija, recorriendo grandes distancias sin imaginar que se encontraba tan cerca.

Lo inevitable pasó, Arana se había preparado y Beyazkar no soporto tal poder y cayo, Los siete sabían que no era el final, que intentaría arrebatar su corazón, sin embargo la engañaron conocían la magia y con ella las ilusiones, le hicieron creer que la mato y arranco su corazón, mientras se la llevaban lejos.

Por más de una década trataron de encontrar a su padre, pero este había acabado con su eternidad, no pudo perdonarse haber perdido a su mujer e hija, con la llegada de los nuevos fundadores también le llego la muerte a Arana quien al ser una subalterna de Gomatz no podía seguir viviendo.

Treinta años transcurrieron y Beyazkar lucia igual, el contaste de su cabello negro hacían que su piel luciera más pálida y sus labios más rojos, cuando los nuevos fundadores tuvieron a su tercer hijo Damián, este en un afán de explorar llego al medio del bosque donde encontró a Beyazkar, intento acercarse pero los siete no lo dejaron, le prohibieron el paso, y amenazaron con matarlo.

Damián se presentó y los siete entendieron, ¡él podía ayudarla!, su origen era el mismo y al poseer la habilidad de sanar con un suave tacto en el corazón logro liberarla, así Beyazkar volvió.

-Fin-  

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⏰ Última actualización: Jul 03, 2018 ⏰

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