No recibí alguna otra fotografía o carta por tres días. Me alivie un poco y pude respirar tranquila un par de veces. Tal vez había obedecido, nada le costaba apuntarse
«veinte
No recibí alguna otra fotografía o carta por tres días. Me alivie un poco y pude respirar tranquila un par de veces. Tal vez había obedecido, nada le costaba apuntarse