Mi obsesión favorita| Cap. 30 Salió huyendo...💕

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No ingrese de nuevo a clases, estoy completamente segura que podía encontrarlo de nuevo y no quería verlo. Tampoco quería volver a casa, prefería ir a otro lugar pero no hay muchas opciones.

Decidí que era mejor caminar sin rumbo alguno. Caminé y caminé sin levantar la mirada, solo observar mis pasos. Y termine en el lugar menos indicado, o quizás si lo era pero no en estos momentos.

El cementerio.

Era el lugar menos escalofriante que había conocido. Caminé hacía el nombre que nunca quise oír o ver. Me dije a mi misma que no debía llorar recordando, pero era tan difícil no recordar a alguien que fue importante en tu vida, apesar de solo tener un cortó tiempo con esa persona.

-Hola...- saludé a la lápida- Se que es demasiado raro que venga a visitarte pero... ¿Qué esperabas? Nunca estuviste.

El silencio siguió rodeando, pero eso no me detuvo.

-Nunca estuviste para protegerme, siempre me pregunte porque te uniste a el- una lágrima se deslizó por mi mejilla-. Te he odiado durante tanto tiempo por la vida que me has dejado, nunca tube la oportunidad de... Amar. Recuerdo una vez que estábamos jugando y me lastimé, tu me dejaste ahí y fuiste a verlo a él ¡A él! ¡Yo era tu hija! Maldición, yo era tu hija y preferiste verlo a el.

-Yo no la odió, fue una buena madre- esa voz donde la he escuchado- tu deberías pensar lo mismo.

Me limpié las lágrimas, me gire encontrando a una persona que nunca pensé volver a ver.

-Tu!, eres la persona menos indicada de hablar conmigo.

-Claro que puedo hablar contigo, soy tu hermano... Pero tu estabas con Boston en la cafetería, eres su amiga y a la vez mi hermana, no lo puedo creer.

-No tu no eres mi hermano, dejaste de serlo cuando me abandonaste... Y te equivocas yo no soy ni fui amiga de Boston- lágrimas ya habían empezado a caer.

-Lo siento te dejé... Pero nadie me quita el derecho de ser tu herma...

-Sabía que aquí te encontraría. Que patética te ves llorando por esa... Que decía ser tu madre y quien es este patán... Nos vamos ahora.

-No iré a ningún lado.

-Felicity, vienes ahora- dijo tomandome por el cuello.

-No trates a mi hermana asi.

-Jajajajaja, el hijo prodigo a vuelto... No tienes el derecho de decir lo que puedo hacer con la estúpida de Felicity. Asi que nos vamos.

-No, no voy a ningún lado...

Me soltó, pero solo por unos momentos. Me tomó por el brazo llevándome con demasiada brutalidad.

Yo solo lloraba y le gritaba a Richard para que me ayudará, pero hizo lo mismo de hace varios años...

Salió huyendo...

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