𝒆𝒓𝒆𝒔 𝒍𝒐 𝒒𝒖𝒆 𝒎á𝒔 𝒒𝒖𝒊𝒆𝒓𝒐

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jeon jungkook + kim taehyung

debí fingir que hay otros. es mentira.
sólo tú eres. tú, mi desventura
y mi ventura, inagotable y pura.
jorge luis borges, el enamorado.

᭄࿐ྀུ
único fragmento
𝐄𝐑𝐄𝐒

era un día de abril cuando te vi por primera vez. cuando vi tus ojos, aquellos que brillaban más que las estrellas del cielo.

recuerdo la forma en que me miraste, haciendo que mi corazón latiera cada vez más fuerte, cada vez más rápido.

era un día de abril cuando te vi por primera vez. cuando me sonreíste y me hiciste ver que el sol no iluminaba nada a comparación de tú sonrisa.

recuerdo la forma en que las esquinas de tus labios se levantaron lentamente y poco a poco me dejaste ver una de las cosas más hermosas del mundo.

era un día de abril cuando te vi por primera vez. llegaba tarde a una cita con jimin y hoseok, iba tan sumergido en mis pensamientos que no supe en qué momento terminé encima tuyo.

acababas de salir de la cafetería de enfrente, al mismo lugar donde mis amigos esperaban por mi, con tu sonrisa característica y un batido de piña en tus manos. mis pies se enredaron al apurar mi caminar y caí sobre ti.

alcancé a colocar mis manos en el suelo para evitar el contacto con tus labios. aunque ahora me siento un poco mal por eso porque pudo haber sido una experiencia maravillosa tocar tu boca en la primera cita.

tenías una gorra negra cubriendo tu cabello, en ese entonces pelirrojo, y tus mejillas estaban sonrojadas. detallé tu rostro lentamente, desde los pequeños mechones que cubrían tu frente hasta los lunares que se encontraban esparcidos estratégicamente. no dijiste nada en ese instante, fue lindo. aunque en este momento si mantuvieras la misma calma estaría preocupado; me acostumbré a ti y tu inquieta presencia.

esperaste a que terminara de examinarte entero y me preguntaste si me encontraba bien, todo eso con una sonrisa. fuiste tan dulce al preocuparte si sentía algún dolor en mi cuerpo cuando fuiste tú quién se había llevado todo el peso del golpe encima.

te ayudé a levantarte y agarraste mi mano con fuerza, y una corriente paso por mi cuerpo al sentir tu tacto sobre mi. me miraste avergonzado, te disculpaste por tu poco cuidado y yo rápidamente negué y me acerqué instintivamente y tomé tus manos entre las mías, excusándome, hasta por tu batido de piña, quitándote la responsabilidad de nuestra caída.

fue algo que hice instintivamente, claro, pero fue el mejor impulso que he tenido en mi vida.

me sonreíste y bromeaste diciendo que no te había gustado en absoluto por lo cual me agradecías haberlo botado. reí y te propuse invitarte otro, uno en donde yo escogiera el sabor. estuviste de acuerdo y luego soltaste una pequeña risita.

y dios, por más corto que ese sonido fuera, para mi no dejaba de ser como una diminuta sinfonía que hizo que mi cuerpo de un momento a otro se llenara de felicidad.

— aunque antes debes saber que me llamo kim taehyung.

sonreí sin dejar de mirarte, y repetí tu nombre en mi cabeza, como si de una canción pegadiza se tratase.

— entonces creo que también debes saber que soy jeon jungkook.

te lleve de nuevo al interior de la cafetería y compré un batido de durazno. lo probaste y me diste las gracias como un niño pequeño al que le compran un caramelo. afirmaste que era mejor que el anterior y que realmente tenía buenos gustos. quise decirte que era algo obvio que los tenía porque me gustabas tú, sin embargo, no me tomé aquel atrevimiento porque temía asustarte y realmente quería verte de nuevo.

me ofreciste tomar y acercaste el pitillo a mis labios, tomé sin refutar, disfrutando la cercanía que me permitías. dijiste que era lindo en susurro y te escuché. te miré y quité con delicadeza la bebida de mi boca. pensaste que te iba a rechazar, pero, ¿cómo podría haber rechazado a alguien como tú?

— kim taehyung, tú eres más lindo.

era un halago, simple y concreto, pero era verdad.

reíste de nuevo y con un sonrojo en tus mejillas bajaste la mirada avergonzado. aún me pregunto de qué te avergonzaste en ese momento; si de un desconocido diciéndote la verdad o de que no supieras la verdad.

negaste levemente y yo fruncí el ceño cuando mencionaste que dejara de decir mentiras.

—  no taehyung, no son mentiras. eres muy lindo.

y a pesar de que el color de tu rostro no desaparecía, fue tu turno de fruncir el ceño. sé que fue raro para ti, sin embargo mantuviste una sonrisa y pasaste uno de tus dedos lentamente por tu labio inferior. ahora sé que no te gusta perder las discusiones y que haces eso cada vez que te llevan la contraria.

estabas a punto de contradecirme cuando sonó mi teléfono. rechacé la llamada sin ver el nombre del contacto, porque quería seguir escuchando tu profunda voz y claro, dejarte en claro mi punto.

preguntaste por la llamada y yo te silencié colocando mi dedo índice sobre tus labios.

— es más importante hacerte saber la obra de arte que eres, taehyung.

era un día de abril cuando te vi por primera vez. cuando me dijiste tú nombre y yo el mío, cuando dejamos de ser extraños y pasamos a ser algo más.

recuerdo como se sintió escuchar mi nombre salir de tu boca y el montón de mariposas que empezaron a nacer en mi estómago cuando pediste volverme a ver.

era un día de abril cuando te vi por primera vez. cuando tome la decisión de conocerte, de enamorar más de ti. no sólo de manera superficial, sino de manera verdadera y eterna. pura e intangible.

recuerdo nuestros primeros encuentros y como dejaste la timidez de lado y aquella noche estrellada chocaste tus labios con los míos. recuerdo el sabor de nuestro primer beso y el brillo de tus ojos al decirte te quiero.

era un día de abril cuando te vi por primera vez. cuando te hice saber que eras arte y decidí recordártelo siempre, cuando caí enamorado de lo que eres y representas.

era un día de abril cuando te vi por primera vez.


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eres lo que más quieroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora