La Belleza de Kita

Capítulo único

Un día mañanero tan placentero, Osamu Miya abrió sus ojos, estirando su cuerpo sobre la cama y volteó hacia el otro lado para mirar a su amado Kita Shinsuke. Lo observaba con detalles; los labios, las pestañas, el pelo y la piel tan blanca que lo volvía loco. Acariciaba sus mejillas, era tan suave como una pluma y le dió un beso húmedo a esos labios rosados y Kita se despertó.

Buen día, mi Sumu. — se sonrojó diciendo Kita. Le tapó la sábana y giró su cuerpo hacia otro lado. Osamu no pudo contenerse y abrazó con todo lo que tenía adentro. Le agarró la mandíbula y se dieron un beso apasionado.

Buen día, mi amado. — susurró Osamu al separar los labios. Se levantaron y hicieron el desayuno juntos. Kita se fue a la Preparatoria Inarizaki y Osamu, al taller del subsuelo del edificio donde está viviendo.

Vinieron los alumnos y también Tendou Satori, que también es artista plástico como el peligris. Osamu y Tendou se conocieron en una escuela de arte y se hicieron amigos. Tendou confesó su amor y Osamu lo rechazó. El pelirrojo lo admira muchísimo, sabiendo que es su amor no correspondido.

Miya estuvo viendo las obras de sus alumnos, corrigiendo y explicando las técnicas, el complementario de colores, ya que se acerca la exposición dentro de un mes y todos tenían que estar listos y Osamu también tenía que terminar su obra.

Llegó la noche, cuando el pelirubio volvió de la Preparatoria.

Shin, bienvenido a casa. — le dió un beso en la frente y vendó los ojos de Kita con el pañuelo. Se lo llevó hasta el taller y quería sorprenderlo con la obra terminada. Sumu sacó el pañuelo.

Abre los ojos. — susurró en tono seductivo el peligris. Shinsuke se sonrojó excitado y abrió sus ojos y le dió escalofríos al ver el cuadro.

¡Esto es demasiado! — Se tapó la boca con la mano derecha y lloró. ¿Por qué la desnudez? — preguntó incómodo Kita.

Es porque me encantas tú, tu belleza y todo de ti. — dijo el peligris mirando los ojos al pelirubio. 

Lo voy a exponer, me siento orgulloso de haberlo terminado. — se emocionó Osamu. Shin se perturbó y se enfureció.

¡No lo pongas en tu puta exposición! ¡Yo no quiero ver ese cuadro y que todos lo miren! — gritó Shinsuke largándose corriendo. Al peligris le dió un ataque de pánico por lo sucedido. Se angustió. Tuvo que llamar a Tendou porque no sabía qué hacer ante eso y al rato llegó Satori y empezaron a beber mucho y cuando estaban en medio pasado de tomar bebidas. Osamu preocupado empezó a hablar y le mostró su obra al pelirrojo, quien quedó fascinado, lo contrario a su Kita

¡Uawwwh! Esto es hermoso, ¿Éste es Kita? — preguntó fascinado Tendou. Osamu asintió su cabeza y se apoyó en el hombro de Satori, llorando desconsolado.

Debes ponerlo en tu exposición, tu trabajo es único con mucho estilo y muy diferente a los demás. Además, la obra tiene muchos sentimientos, es realmente poderosa con sólo al ver. — le explicó Satori pero el peligris no se quedó conforme y quería dar lo mejor para su amado.

No quiere ver a Kita molesto por la obra que le tomó un año completarlo y teme perderlo porque lo ama demasiado.
No hubo llamadas ni mensajes de texto ni ninguna novedad de Kita y hasta él llamó a su hermano Atsumu para saber cómo estaba Shinsuke.

Atsumu, ¿Cómo está Kita? — preguntó en tono agudo y bajo. Se le notaba que estaba muy preocupado al respecto mientras suspiraba.

Lo veo muy desanimado en esos días y se ve perdido. No se concentra en el entrenamiento para nada. — respondió el gemelo.

Fui un idiota insensible. — murmuró Osamu.

Siempre fuiste un idiota desde que entraste al arte. Igual te quiero mucho. — dijo Tsumu. Sumu se rió y le correspondió por el dicho.

No te olvides de mi exposición el viernes próximo. Vení con Tobio. — se despidió el gemelo artístico. Pasaron días y el tiempo se pasó volando rápido. Los alumnos y Osamu hicieron los preparativos. El peligris echaba mucho de menos a su amado.

Al final, llegó el día de la exposición, Osamu estaba nervioso y desconcertado ante la multitud. Vinieron mucha gente famosa, artistas plásticos y los familiares y su hermano gemelo Atsumu con su novio Tobio e incluso Tendou parloteaba con la gente a su alrededor.

Estaban los cuadros colgados en las paredes y aún no podía ser feliz por el éxito de su exposición, ya que lo único que Sumu pensaba era en Kita, fue al baño para lavarse la cara y tenía las ojeras, ya que no había dormido bien durante semanas y se sentía dolorido por dentro por lo de Kita. Mientras se secaba la cara con el papel, escuchó la puerta del baño abriéndose, se fijó y se sorprendió al ver a Kita a su lado.

¿Por qué no está el cuadro? — preguntó lamentándose Shinsuke. Osamu parpadeando, ya que quería asegurarse que sus ojos no lo engañaban y quería entender lo que estaba diciendo.

¡Fui un egoísta y debes mostrar tu talento que llevas dentro! Es sólo que me entró el pánico viéndome en el cuadro y que lo vayas a exponer ante desconocidos, solo pensé en mí y como me verían los demás. ¡Perdóname! — continuó hablando en tono bajo llorando. El peligris agarró las manos de Kita y las puso sobre el pecho.

No me importa el cuadro, no me pidas disculpas, sólo me importas vos y quiero renunciar a todo el arte por vos, porque yo te amo mucho y no quiero perderte. — decidió en tono firme. El pelirubio se emocionó y lo abrazó fuerte. Sumu y Kita no pudieron contenerse y se besaron apasionadamente con todo el amor que se tienen. Tardaron unos quince minutos. Tuvieron que acomodarse la ropa para la exposición, querían largarse de ahí y continuar con todo, pero Osamu era el anfitrión y se contuvieron a regañadientes.

Toda la gente aplaudió y felicitaron al artista por la obra que había hecho y Sumu no entendió hasta que vió el cuadro colgado, Sumu se quedó petrificado. Tendou y Atsumu se acercaron y le hicieron unos golpecitos en el pecho.

Lo trajimos juntos. — dijo sobreactuando Satori y hizo el bailecito con los dedos balanceando. Le dió un guiño. El peligris se entusiasmó y abrazó a los dos al mismo tiempo. Llegó Kita muy contento y se acercó agarrando la corbata a Osamu.

El amor hacia el arte que llevas, también lo es conmigo. Yo soy tu arte y ámame. Te amo mucho, mi Sumu. — expresó en tono alegre Shinsuke.