Una mañana casi corriente

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  Jungkook escuchaba las voces de Jin y J-Hope, ¿Acaso era un sueño? Una mano tiraba de él hasta la cocina. El olor a pan tostado lo despertó un poco más. Quería volver a la cama, se estaba tan calentito y cómodo. Un bol de cereales apareció ante él. Sin pensarlo un segundo, agarró la cuchara y empezó a masticar

  - Vas muy ajustado de tiempo. Menos mal que suelo madrugar. Mira que no ponerte el despertador.

  Alzó el rostro para encontrarse con un sonriente y aún cansado Jin. Una sonrisa se posó en sus labios Era obvio que, aunque el mayor soliese madrugar, la noche anterior había sido tan movida qué si hubiese podido, habría dormido hasta la hora de comer. Su presencia allí solo se debía a él, a su reunión con el PD.

  - ¿Deberíamos irnos a dormir los dos? Yo tengo sueño, y por lo que veo tú también- susurró el menor bostezando adormilado.

  - ¡Qué va, esta noche dormí muy bien! – Mientras Jin alzaba el brazo para atrapar dos platos donde dejar las dos rebanadas de pan recién tostadas, Jungkook recordó la razón de su tardío descanso anoche. Alzó el rostro y habló.

  - Quizás entonces debería darle las gracias a Jimin también.

Jin dejo el cuchillo con mermelada, y lo miró.

  - ¿Por qué a Jimin?

  - ¿O quizás es todo lo contrario, y debería echarle la culpa? Ya sabes, no te veo muy descansado, ¿Fue él quién te tuvo entretenido toda la noche?

 El mayor lo miró sin poder creer lo que escuchaba. Jungkook en cambio, dejó el bol en la encimera para salir rápidamente de allí.

  ¿Cómo había sido capaz de decirle eso? En cuanto vio su expresión, comprendió que acaba de salir de su boca, lo cual había sido alentado por los pesados sentimientos conservados de ayer y el sueño que, como todas las mañanas, lo había controlado como un liviano títere. Cerró la puerta del baño y se miró al espejo.

  No era momento de preocuparse sobre sus relaciones personales. Iba tarde a la reunión del PD, donde propondría iniciarse como productor y compositor. Su carrera profesional daría un gran paso, en caso de conseguir el permiso.

  Se desvistió y entró en la ducha. El agua caliente cubría cada milímetro de su piel, despertándolo por completo. Las gotas de su pelo chocaban con el suelo, silenciadas por la alta música de su móvil. Impaciente y apresurado, vistió su bata y salió con urgencia a escoger ropa.

❀❀❀❀

  Una ligera música provocó de nuevo su despertar. Era consciente de su sensibilidad ante cualquier perturbación a la hora de dormir, pero eso no suavizaba su mal genio. Se levantó bruscamente, su paciencia tenía un límite.

  - ¡Hyung!

  El quejido hizo al líder anticipar la caída de Taehyung, a quien consiguió atraparlo por la cintura a tiempo de estrellarse contra el suelo.

  - ¿Es que quieres matarme de un susto? – pregunto el menor frotando sus ojos.

  - Si te molesta vete a tu cama. Entre tú y la música, me es imposible dormir.

  - ¿Qué música?

  Un silencio de tres segundos hizo comprender al mayor que la molesta canción había desaparecido. Suspiro enfadado mientras se dejaba caer en la cama de nuevo. Taehyung lo miró curioso.

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