Mi Primera Opción (Editando)

Capítulo 62: estrés

Faltaba muy poco para la boda y Gia estaba anunciando su propia muerte, Verónica y yo hemos discutido lo que no hemos discutido en toda la vida por los arreglos.

Gia había pospuesto la búsqueda de mi vestido mucho después de lo que se había planeado, sin embargo estaba feliz de ver a Chris, su madre nos recibió como si fuéramos sus hijas además estábamos casi todos juntos de nuevo, Chris, Vero,Taylor y yo, nos quedamos dos días más a petición mía, no me importaba lo que dijese Gia, me sentía en casa.

Nos alojamos en casa de Chris, almorzamos y fuimos en busqueda de mi vestido y el de las damas de honor. Primero escogimos los de las damas, azul turquesa, corto, con las mangas estilo campana, preciosos y para mi ninguno de esa tienda, el vestido que me había enamorado tiempo atrás ya no estaba; la chica nos sugirió ir a una tienda que quedaba a las afueras de la ciudad y así lo hicimos, era bastante lejos, apenas llegamos la chica de la boutique me reconoció,

-Tu eres la prometida del jugador de fútbol- todos nos miramos.

-Emm sí, mi nombre es Abbigail- le tendí mi mano.

-Soy Heather, dueña de esta boutique y fan de tu esposo- estrechó mi mano. -Te aseguro que encontrarás tu vestido-le sonreí.

-Gracias- comenzamos a buscar y a colocar muchos vestidos y después de probarme muchos ninguno me quedaba como quería.

-que difícil situación, Señora Gosling, tengo unos vestidos que no son demasiado elegantes como los que le he mostrado y para personas como usted-

-¿Personas como yo?- pregunté un poco molesta e incómoda.

-Sí, necesitan verse geniales ante las cámaras. Tengo estos, elegantes pero pedrería común y económica, estos son estilo Boho, a las personas no les gusta demasiado estos vestidos así que los guardo junto a estos; hay de todos los costos pero ya sabes, los gustos de las personas- No estuve de acuerdo con lo que dijo pero prefiero olvidarlo; comencé a buscar entre todos esos vestidos y vi dos preciosos, pero había uno que se parecía a el que me había enamorado.

-Me enamoré- dije.

-Yo también- dijo Vero.

-Estás preciosa, Bi- dijo Chris.

-Es hermoso, es el indicado- dijo Taylor. Sonreí. Realmente no me veía en otro vestido junto a mi prometido. Heather me colocó todos los accesorios para darle más belleza al vestido y vi como caían de los ojos de Verónica lágrimas, fui hacia ella para abrazarla.

- Te ves hermosa, estoy orgullosa de ti, no pude toparme con una mejor persona- dijo.

- Yo también, Vero. Te amo- dije.

-No quiero dañar el momento pero el Señor Gosling quiere hablar con usted- dijo Gia, como la estoy empezando a detestar. Miré a Verónica y me aparté.

-¿Hola?- dije.

-Hola, Biggi, quería saber como estabas ya que no contestas el teléfono- revisé mi teléfono y sí, estaba muerto.

-Lo siento, no sabía que estaba muerto, estamos bien, ¿tú?- pregunté.

-Muy bien, estoy bastante lejos de casa y te extraño- sonreí.

-Yo a ti también te extraño, ya encontré el vestido-

-Genial, ya quiero verte e irnos un tiempo solo los dos a donde tu quieras, mi amor- no puedo amarlo menos.

-Tengo que irme, amor. Nos vemos- dije.

-Claro que sí, no te podrás deshacer de mi- colgué.

Pasamos dos días fantásticos entre familia, también encontré los zapatos para el vestido pero tenemos que ir a casa para organizar el lugar y todos los detalles, me quedaré en casa de Josh, con sus padres y Vero; pero quería hacer una parada en mi antiguo hogar aunque tenga cosas que no desearía recordar hay otras que me reconfortan cada vez que vuelven a reproducirse en mi mente, cuando estaba en la puerta miré a Vero, siempre ha estado para mi y creo que estaremos juntas siempre, la tomé de la mano y entramos,

-Sabes, me alegra mucho tener la familia que tengo ahora, una maravillosa-

-Siempre-

-Hija, me da gusto verte- volteamos al escuchar esa voz, era mi madre y por lo que veo está viviendo en mi casa.

-Emm ¿qué haces en mi casa?- pregunté.

-Bueno, ya que no estoy con... en fin, no tenía a donde ir-

-Eso te pasa por buscar solo dinero en lugar de conseguirlo con esfuerzo como hace mi familia- sabía que le iban a doler mis palabras y lo noté en su rostro.

-Vayámonos Abbie- dijo Vero.

-Yo me iré, tranquilas- dijo mi madre.

-No, solo veníamos a pasar un buen rato pero la verdad, ya no se pudo- salí inmediatamente con mucho enojo, no sé de dónde salía tanta rabia.

-Tranquila, Abb- me tomó de la mano y nos fuimos a comer, tan buena ha sido mi suerte que me he encontrado con alguien bastante.. inadecuado, por decirlo de alguna forma.

-Hola Abbie, Verónica. ¿Cómo han estado?- dijo Sebastián.

-Ya sabes.. apostando aquí y allá- la verdad es que me dio risa.

-Organizando algunas cosas y ¿tu?- pregunté

-Supe que te vas a casar- la información vuela y más cuando se presenta en televisión. Sólo sonreí. -Ese chico es genial. Bueno, yo me he dedicado a hacer lo que más me gusta y no he corrido con la misma suerte que tú en el amor- incomodidad total.

-Tenemos muchas cosas en común que lastima que te odie, nos tenemos que ir; que tengas una buena vida- me tomó del brazo y nos marchamos. -Cree que con sus encantos cederás, idiota-

-¿Encantos?- sonreí.

-Los años le han caído perfectamente pero, no busco nada en este momento y mucho menos a distancia- dijo.

Gia nos había llamado para escoger la comida y la decoración, me encanta la decoración de la boda de crepúsculo así que todo lo que escogía era parecido a ella, después de hacer todo ello fuimos al lugar, nuestro árbol, en el que me casaría.

Todo estaba tan florecido, tranquilo, limpio, las letras que habíamos grabado hace tanto tiempo estaban ahí, recordando la fortaleza y el lazo que tiene nuestra amistad, grabé las iniciales de Josh y yo juntas para que ahora nos juntara el amor, sé que es cursi pero no lo sé, me hace sentir bien. Después de todos estos agotadores días, íbamos a encontrarnos con Josh en un nuevo destino, pero cuando estábamos abordando el avión recibí una llamada de un número desconocido.

-¿Hola?-

-Hola, Abbigail. Soy Danielle, secretaria de Vincent Inc. te necesitamos más pronto de lo que iniciaban tus prácticas así que te esperamos este lunes a las 9 am en el piso 4 de la compañía, estaré aquí para explicarte todo, gracias; nos vemos pronto.- la chica colgó y yo me quedé en shock, tengo que comprar el boleto ahora mismo o sino no llegaré, ¡mierda!.

-Vero, no podré ir contigo. Dile a Josh que nos veremos luego, tengo que empezar las practicas, se lo explicaré luego- dije como un huracán.

-Iré contigo- Sonreí y corrimos para comprar esos boletos, mi sueldo debe compensar esto, tomamos el primer avión hacia Francia, mientras estaba ahí pensé en Josh, en el apartamento que ni siquiera hemos organizado, en la ropa que tendré que comprar para mi primer día de trabajo porque ni siquiera sé dónde está mi ropa, en la boda, en Gia que llegará sola (eso me dio risa), que estrés es el que tengo en este momento.