Prólogo

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<<¿Cómo termine involucrada en un problema de esta magnitud?>> penso mientras veia fijamente el techo de su cuarto mientras un nudo se formaba en su garganta, coloco su mano temblorosa en su corazón, <<Ahí esta, ese latido irregular, como si por escasos momentos quisiera dejar de latir.>>

Su mente fue golpeada por el recuerdo de lo que la llevo a esa situación.

"Limpiaba sus pinceles al final de la clase, se preguntaba porque sus pinturas jamás llenaban las expectativas de su profesor. Cada pintura que realizaba, no lo llenaba, expresaba que sus obras eran sin sentido y escasas de sentimiento.

-¿Qué quiere que digan las pinturas que jamás son suficiente?- sumergió con enfado los pinceles nuevamente, les dio una ultima escurrida y lanzó todos los pinceles en la charola de la clase, cuando una pintura llamo su atención, era de uno de sus compañeros, que parecía que se había esperado a que el salón se vaciara para poder revelar lo que dibujaba con cierto egoísmo, como sí al verlo te robaras su esencia. En el cuadro de mostraba una hermosa chica, contenía luces y colores tan vivos, era un deleite para la vista y los sentidos, el chico se puso enfrente de ella, interrumpiendo sus pensamientos. Entro en razon.

-La conozco.- concluyó.

-Claro que no.- la tapo con una manta, dando por acabada la conversación.

-¿Te gusta?- preguntó omitiendo el cierre de la conversación.

-No.- llevo sus pinceles a lavar.

-No seas tímido, puedo ayudarte.- sonrió contenta, pues se imaginaba presenciando una de las mejores historias de amor, como las que solía leer.

-No estas escuchando, no quiero que te metas.- dijo frustrado, pues presentía que se había topado con alguien que no entendía la palabra "discreción" y menos "sutilidad".

Ella volvió a ignorar sus deseos, tomo emocionada sus cosas, tenía que ir a planear algo, que a lo mejor la llevaría al éxito, o sin querer, a su propio fracaso."

>>Por su puesto, eso fue lo que paso, eso fue lo que la condeno. La primera lagrima demostró lo que venía<< el dolor de estomago la hizo retorcerse en su cama, su vista se enfoco nuevamente en esa pintura sobre su silla, un "10" resaltaba en la esquina.

¿Cuanto tuvo que pasar para que ella sacara un 10 en arte? Nada, solo tuvo que meter sus narices por ultima vez.

Las narices de Bobby BrownDonde viven las historias. Descúbrelo ahora