El despertador sonó, indicando que Perrie y Jade se tenían que levantar para ir a trabajar.
"Cada vez duermo menos." Dijo Jade, quitando la cabeza del cómodo pecho de Perrie.
"Es el niño, llora más que antes." Dijo, como si fuera la cosa más obvio del mundo, Perrie.
"No me digas, no me he dado cuenta, mil gracias Edwards." Dijo irónica y con una sonrisa traviesa en la cara.
"Aquí somos las dos Edwards, guapita." La rubia se levantó y se dirigió al armario mientras hablaba.
"Si nos divorciamos no." Jugó Jade, aunque en secreto amaba ser una Edwards.
"Yo no podría llevar ese caso, sería demasiado doloroso." Dijo Perrie, para llevarse una mano al pecho y suspirar melodramaticamente.
"Eres muy poco profesional, Edwards." Dijo la mayor con la sonrisa jugetona intacta en la cara.
"Te levantaste peleona, ¿cierto?" Murmuró Perrie, entrando en el baño y quitandose la ropa.
"Empezaste tú." Se defendió la morena, mientras se cruzaba de brazos.
"¿Yo?"
"Si, tú, Louise."
"¡Pero si yo solo dije que el niño llora más!" Gritó desde la ducha la rubia, y después se escuchó un llanto.
"¿Ves? Ya lo despertaste, torpe." Dijo Jade mirando hacia la puerta del baño donde estaba su esposa.
"Vete a ver que quiere, ¿si? Me estoy duchando, si voy con una toalla mojada no pareceré seria."
"Nunca pareces seria, pero bueno." Dijo Jade y salió de la habitación, y, después de andar tres pasos y medio, llegó hasta la habitación del pequeño Luke.
Lo levantó de la cuna y lo tomó entre sus brazos, besando su mejilla levemente.
"¿Que pasó pequeño? ¿Mamá te despertó?" Preguntó la morena al chico de apenas un añito de edad, aunque ya se le notaban mechones rubios en su cabeza.
El pequeño la miró y la morena suspiró cansada.
"Vuelve a dormir, pequeño, la tia viene en un rato." Dijo la morena después de ponerlo en la cuna de nuevo.
Entró de nuevo en la habitación y vió a Perrie poniendose los pantalones, la única prenda que la faltaba.
"Lo despertaste, mala madre." DIjo la chica de ojos marrones y se diriguió hacia ella.
"Lo superará, tiene un año y ochenta y un días."
"Me sigue pareciendo raro que cuentes cuantos días tiene nuestro hijo."
"No vale solo con esperar hasta su cumple, hay que saber su edad día a día."
"Solo tiene un año, va-"
"Un año y ochenta y un días." Corriguió la rubia con una sonrisa.
"Lo que sea, la pregunta aquí es, ¿vas a estar asi toda la vida?"
"No." La morena suspiró aliviada. "Solo hasta que se independice."
"Pues casi toda la vida." Dijo sonriendo la morena, y abrazó a la rubia cansada. "Tengo sueño." Confesó la morena mientras ponía su cabeza en el espacio entre el hombro y el cuello de la rubia.
"Venga, que solo son ocho horas. Si quieres, te invito a comer hoy."
"¿Y a donde me llevarías, Edwards?"
"No sé... Pero da igual. me tienes a mí, cielo." Jade se separó de ella y golpeó levemente su hombro.
"Que modesta..." Dijo irónica la morena y acto seguido rodó los ojos.
"Mucha gente mataría por estar conmigo."
"Si,como tu secretaria." Dijo desvistiendose y esta vez fue el momento de Perrie para rodar los ojos.
"¿Otra vez? Ella solo es amable."
"Sí, para meterse en tu cama. Mejor dicho, nuestra cama."
"¿Estas celosa?"
"Si."
"Pues no deberías, yo solo te quiero a ti."
"Vete ya a trabajar, tonta."
"¡No soy tonta!"
"No, eres rubia."

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Always Be Together [Jerrie Thirlwards]《P.E. & J.T.》 ||One Shot|| ✔
FanfictionYa han pasado diez años, diez años desde que Perrie y Jadese comprometieron y formaron una familia. Secuela de "Pez es mia".