VII

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Era de mañana, Guanlin salió de tomar su ducha matutina como de costumbre, pensó en ir a su cuarto y tal vez seguir durmiendo, hasta que un delicioso olor inundó sus fosas nasales.

Bajó las escaleras y fue rumbo a la cocina, ahí se encontró con un montón de hotcakes acomodados perfectamente en un plato, cubiertos de mermelada. Daniel era quién los estaba preparando, estaba dándole la espalda, mientras se concentraba en  cocinar.

Guanlin decidió aprovecharse de ello y robarse unos cuantos, estaba a punto de tomar uno hasta que sintió un manotazo. Daniel lo había descubierto, tenía la cara manchada de harina y ¿eso era un mandil de bob esponja?

"Ridículo" pensó.

—Ni siquiera pienses en comerte esos, los hice para Jisung, son los que mejor me han salido.— Dijo mirándolo con reproche.

—Piensas sobornarlo preparando el desayuno ¿en serio?— Se burló.

—Calla, que si me metí en problemas fue por tu culpa.—Se quejó el mayor

  —¿Mi culpa?— Cuestionó. —¿Acaso yo te dije que te metieras por la ventana?— Se indignó.

—No habría tenido que hacer eso de no ser porque la llave de repuesto no estaba oculta en la maceta como siempre. ¿Qué hiciste con ella? Eres el único que sabía de esa llave, estoy seguro de que la has estado usando últimamente, mocoso.— Daniel se cruzó de brazos. —Pequeño delincuente.

—No tienes derecho a juzgarme.— Kuanlin se encogió de hombros. —Tú fuiste quién me enseñó como escabullirme sin que nadie se de cuenta, además de que también me enseñaste a...

—¡Calla!— Daniel agarró un hotcake y lo metió torpemente  en la boca del más joven, tomándolo por sorpresa. —Sé un buen chico Linlin y come.— Kuanlin empezó a toser y a jalonear el brazo del mayor el cual seguía atragantándolo con el hotcake.

—¿Qué estupidez está pasando aquí?—Se quejó Jisung quién entraba a la cocina. Daniel alejó su mano de la boca de Kuanlin. —¡Buenos días Jisung-shi!— Se giró alegremente a mirar a su hyung. Cuando lo miró soltó un grito de horror. —¡Hyung te ves horrible!

Jisung tenía los ojos hinchados y unas ojeras muy marcadas en sus ojos. Miraba a Daniel con el ceño fruncido mientras se dejaba caer en una silla. —¿Y de quién crees qué es la culpa? Anoche te metiste a mi casa como un delincuente  y gracias al susto que me metiste no pude dormir en toda la maldita noche.

Daniel tragó saliva, Jisung era aterrador cuando estaba de malas.  Kuanlin tomó asiento enfrente del mayor mientras seguía tosiendo y tomaba un vaso de leche, miraba a Daniel con el ceño fruncido por casi ahogarlo.

Daniel se sentó al lado de Kuanlin, poniendo frente a Jisung un enorme plato de hotcakes. —Te hice el desayuno hyung— Dijo con voz cantarina tratando de ser adorable.

—¿Acaso tratas de sobornarme con esto Daniel?— Se burló Jisung mientras se llevaba un hotcake a la boca. —Te recuerdo que hay otros 6 individuos en la casa que han hecho este mismo truco varias veces. Ya no funciona sabes.— Sentenció.

—Te dije que no funcionaría.— Dijo entre dientes Kuanlin. Daniel le soltó un pequeño golpe en el tobillo haciendo que este soltara un quejido. Jisung se dio cuenta y le dio un golpe en la frente a Daniel. —No le pegues al niño, ni siquiera te ha hecho nada.

—Si claro, porque Kuanlinnie es un niño tan bueno e inocente que nunca hace nada.— Dijo con sarcasmo mientras miraba de reojo al menor, quien se removía incómodo en su asiento.

—¿De qué estás hablando?— Cuestionó Jisung. Kuanlin se levantó de golpe. —Iré a mi habitación.— Dijo mientras se iba corriendo escaleras arriba.

We Are- OngNiel (WANNA ONE)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora