•Capítulo único•

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Las noches siempre son frías, tristes y desoladas cuando no puedo verlo, dicen que cuando te has enamorado totalmente comienzas a extrañar a esa persona a cada segundo que no esta a tu lado, eso me pasa con Jimin.
Las personas dicen que yo no se nada del amor, pero ¿quién lo sabe realmente? ¿cómo es posible que sean las 2.00 am y yo no pueda dejar de pensar en él? ¿entonces que es amor para ellos?
Es un sentimiento extraño, no tiene razón, solo sucede, se lleva tu lado razonable, te hace hacer locuras, te atonta de todas las formas existentes, pero también es una de las cosas más bellas que existen en este podrido mundo.

Me remuevo en mi cama por quinta vez, ya he dado giros para todos lados y no logro conciliar el sueño, ¿por que no puedo dejar de pensar en él?
¿será su culpa? ¿esta bien culparlo de mi insomnio?

Suaves golpes suenan por los cristales de mi ventana ¿ahora qué?
Me levanto de forma perezosa hasta llegar a ella y visualizar a mi chico en el patio de enfrente haciéndome señas.

— ¿Qué rayos haces? - le reprendó, ya es muy tarde para que este aquí, además mi madre me ha prohibido verlo.

— Lo siento bebé, pero es que no puedo estar ni un solo segundo más sin tí, vamos —hace una seña para que baje, ¿qué a caso esta loco? ¿cómo se supone que baje de aquí? — Vamos Jungkook, por el árbol —grita en silencio.

Se que hable de que en el amor nada es razonable, pues es la verdad, ya estoy dando pasitos por el tejado para llegar a ese bendito árbol, vamos, no creo que sea tan difícil.

Tomó una rama suplicando que pueda sostener mi peso, me columpio de ella para poder saltar a la superficie firme del árbol, la rama cruje cuando salto pero por suerte no se rompe, hago el mismo acto para bajar de poco a poco, solo falta dar un último salto, pero seguro me fracturo algo si salto desde aquí, la altura aún es demasiado alta.

— Vamos, yo te atraparé —abré sus brazos hacia mí, sí, esta loco.

Trato de resbalarme por el tronco del árbol, y extrañamente lo estoy logrando justo cuando me falta poco para bajar me suelto por el cansancio de mis brazos, espero el golpe contra el suelo pero este nunca llega si no unos brazos que me presionan contra el cuerpo de mi hermoso novio.

— Te extrañé — me da un beso casto en los labios.

— También te extrañé —lo abrace con más fuerza.

Tomamos asiento en el patio debajo de un gran árbol de eucalipto, el viento mueve las ramas de una forma tranquila, como que si estás se mecieran al compás de una melodía que el viento toca.

Lo bueno de este vecindario es que todas las casas están alejadas entre sí, y el bosque se encuentra algo cerca, así todo tiene una linda armonía en este pueblo, nadie se mete con nadie y todo es muy bello.

— ¿Por qué no he sabido nada de tí en días? — su voz suena dolida, al igual que mi corazón ¿cómo le explico que mis padres me ha prohibido verle?

— Yo, he tenido algunos problemas.. — en cielo esta lleno de estrellas como todas las noches, la tranquilidad se respira pero ésta no entra en mi sistema.

— ¿qué clase de problemas? — me cuestiona y arquea una ceja, esto es difícil.

- No me han dejado verte, no quieren que vuelva a verte. - mi voz se quebró, duele horrible el que te alejen de la persona que amas, es un dolor insoportable.

Cuando se trata de amor puro deberían apoyarlo no tratar de estropearlo, ¿por qué no entienden que yo amo a Jimin? Que daría lo que fuera por estar con él y no dejarlo núnca, ¿por qué tiene que ser así?

Comenzamos a escuchar ruidos, las sirenas de las patrullas de policía me taladraban los tímpanos, rápidamente mi patio se lleno de policías, quizá estan buscándome, no me sorprende que mis padres hayan hecho todo un espectáculo como siempre.

- Tengo miedo - susurré, no quiero que me alejen de él.

- No tienes porque tenerlo, ya nadie va a alejarme de tí - me tomó de la mano.

- Tengo que ir a decirles que estoy bien - me puse de pie y Jimin se puso de pie conmigo, no soltó mi mano en ningún segundo.

Nos adentramos lentamente entre los policías, había vecinos como espectadores ante la escena, aunque no entiendo que es lo que tiene que presenciar.

Ya me encontraba detrás de mis padres, creo que los oficiales quieren que les haga saber que estoy bien ya que no ha dicho nada cuando pase a lado de ellos, baje la mirada y Jimin le dió un pequeño apretón a mi mano, estaba a punto de hablar cuando escuche el llanto de mi madre.

- ¿Tomaba algún medicamento? ¿No sabe si había alguna razón por la cual lo hiciera? - hablaba el oficial tomando nota en una pequeña libreta.

- Tenía alucinaciones, esquizofrenia paranoide leve, solo tomaba sedantes para tranquilizarlo... - Contestaba mi padre mientras mamá negaba con la cabeza.

¿alucinaciones? ¿de nuevo con eso?

- Bien señor, la forense llegará pronto, lo siento mucho - le dijo a mi madre.

¿qué? ¿forense?

- Anota, presunto suicidio, el sujeto no contaba con pleno uso de sus facultades mentales. - le decía el oficial a otro.

Me abrí paso entre los policías, había un cuerpo inerte en el suelo, justo debajo del árbol a lado de mi habitación, sangre salía de su cráneo, tenía enormes ojeras, aún tenía esa bata que te dan en los hospitales, cabello negro, los ojos cerrados, un pequeño lunar abajo de los labios, era yo.

- Te dije que ahora ya nadie me alejaría de tí, Jungkook. - susurró Jimin entrelazando su mano con la mía.

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Insano ღ jikook. [oneshot]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora