Había una vez un suelo que quería llegar alto. No quería que la gente le pisoteara todo el tiempo. Pensó en qué podría ser y llegó a la conclusión de que ser techo era la mejor opción, ya que todos miraban arriba cuando les decían que miraran arriba. El suelo creía que era imposible conseguir su objetivo, pero se le ocurrió un plan: dar la vuelta al mundo en 80 días. Dijo en 80 porque su película favorita era La vuelta al mundo en 80 días. Para llevar a cabo su plan debía hacer que el núcleo terrestre cambiase su posición por la de la atmósfera de la tierra. Como él solo no podía hacerlo, se puso en contacto con sus amigos los aliens que le ayudaron con mucho gusto construyendo un imán gigante que haría que el núcleo se posicionase en el lugar de la atmósfera. Además de eso le pidieron prestado a la estrella Lady Gaga(estrella que no está en la Vía Láctea) su bombona gigante de gas vacía. En ella metieron todos los gases de la atmósfera y los pusieron donde estaba el núcleo antes. Una vez cambiada sus posiciones, la gente empezó a usar los techos a modo de suelo. Y todos los suelos que antes eran techos del mundo empezaron a llorar. Y la gente se mojó los pies. El techo que antes era suelo se sentía muy culpable por causar tanta tristeza. Y se dio cuenta de que siempre había sido techo para los hombres topo que vivían en el subsuelo.