Pain In My Bones [MJ]

Cap. 8. Ya eres mía

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[ADVERTENCIA]

ESTE ES UN CAPÍTULO UN POCO FUERTE, LEES BAJO TU PROPIA RESPONSABILIDAD, les recomiendo escuchar la canción mientras leen

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Cerré la puerta, me quité aquella blusa manchada por la comida y quedé en sostén, fue en ese instante cuando escuché la puerta abrirse y cerrarse, me di media vuelta encontrándome con Michael, quien me miraba de una manera extraña, mordiendo su labio.

— ¡¿Pero cómo entras sin tocar?! — grité para taparme lo más rápido que pude — ¡Lárgate de mi cuarto!

Al ver que no hacía caso quise ponerme la blusa pero él se acercó a mi y me acorraló contra la pared

— ¿Que...qué estás haciendo? — preguntaba nerviosa

Pasaba su mirada por mi rostro terminando en mis labios: — Es tiempo de que me pagues por perder la apuesta — dijo de manera seductora

— ¡Es...estás loco! — lo aparté bruscamente de mi yendo a encerrarme al baño

Sentí un agarre en mi cintura, haciendo que mi cuerpo se estremeciera, quería soltarme pero él no me dejaba

— ¡Michael! — terminé por darle un mal golpe en la cara, haciendo que por fin me soltara

Quise abrir la puerta pero me detuvo nuevamente, me cargó fácilmente y me dejó caer bruscamente en la cama

— Me estás asustando — argumenté mirándolo a los ojos

— Linda, te he dado mucho tiempo para esto, ya no puedo aguantarme más — decía acercándose a mi lentamente —, podemos hacerlo de la forma fácil o prefieres de la difícil — comenzó a subir su mano hasta mi entre pierna

— M...Michael...no quiero hacerlo. Por favor — salió un pequeño gemido

«No quería que nadie viera mi cuerpo»

— Ah...sé que lo quieres Campbell — susurraba —, tanto como yo te deseo a ti — llegó hasta mi oreja mientras comenzaba a morderla suavemente — ¿No te gusta esto? — jugaba con mi parte íntima

Se colocó encima de mi y comenzó a besarme, me besaba con una gran desesperación, estaba prácticamente jugando con mi lengua

Se detuvo unos instantes para quitarse la camisa, dejando ver su abdomen.

—...Te dolerá un poco linda — sonrió victorioso dando a entender que su miembro comenzaba a ponerse totalmente erecto —, ve lo que provocas Campbell, pero tranquila, tu decides si quieres que esto sea placentero

Empezó a morder mi abdomen, dejando marcas en él, en ese momento la razón comenzaba a venir a mi de nuevo, ¿qué estaba haciendo?

— Mike...ah...detente, esto...no está bien — trataba de decir pero no paraba, entre más me quejaba por sus mordidas más seguía

Tomaba mi cuello para besarlo, mientras con la otra pasaba por todo mi cuerpo hasta llegar a mi parte intima, metiéndose entre el pantalón y mi ropa interior para comenzar a jugar. Desabrochó mi pantalón, bastó un par de segundos para quitármelo.

— Eres perfecta — dijo analizando cada parte de mi cuerpo

— No...no quiero hacer esto...— me mentía a mi misma

— Aquí no hay nadie, dime que lo deseas

Quitó finalmente mis bragas y comenzó a meter sus dedos, mi espalda se encorvaba, haciendo que se quitara sus pantalones y bóxer, sin previo aviso entró en mi, haciendo que un fuerte gemido de dolor y unas pequeñas lágrimas salieran.

— Tranquila, deja que te acostumbres — susurraba

Comenzaba lentamente pero a medida que nuestros gemidos se intensificaban iba aumentando la velocidad, en unos segundos ya no dolía tanto, estaba empezando a disfrutar de él dentro de mi.

— Ah...Mike...ah...—gemía — M...Michael no...no pares...ah sigue — decía cambiando totalmente mi postura

— Sabía que lo pedirías tarde o temprano — sonrió satisfecho

En poco tiempo la habitación se llenó de gritos y gemidos, enterraba mis uñas en las sábanas de la cama, mientras encorvaba la espalda de tal excitación, salió suavemente de mi yendo a mi entre pierna para besar mi parte.

— Mike...ya...ya no aguanto...ah...

— Aún no — terminó volteándome —, espera linda

Entró de nuevo haciendo que derramara una pequeña lágrima, enrolló sus brazos por mi cintura, tomando mis pechos con sus manos, me aferraba a la cabecera de la cama y comenzó a envestirme fuertemente.

— Ah...Hannah...oh...

Seguíamos en esa posición hasta que caímos rendidos, con sudor en la cara y la respiración agitada.

Me incorporé nuevamente y vi cómo su miembro aún no se calmaba, seguía erecto, sonreí dentro de mi, y sin previo aviso comencé a masajearlo, sus gemidos comenzaban a escucharse por todo el cuarto.

— Oh...¿aún quieres más? — cuestionó con dificultad

—...Si — solté sorprendiéndome a mi misma

— Pídemelo — decía entre suspiros ahogados —, pide.

— Hazme tuya Jackson

— A sus órdenes — sentenció para abalanzarse sobre mi, entrando sin previo aviso

Gemíamos cada vez más fuerte, me abrazaba mientras estaba dentro de mi, podía sentir su miembro palpitando en mi interior, nos dimos media vuelta y ahora era yo quien tenía el control, moviendo mis caderas, sentía que llegaba a mi clímax, estábamos cansados y rendidos.

— ¡Ah...Hannah! — gritó hasta que por fin se corrió dentro de mi al igual que yo en él.

Caímos rendidos en la cama sin decir nada más, ahora sólo se escuchaban nuestras respiraciones de entre tanto silencio del cuarto

— Eres maravillosa — dijo para luego abrazarme

— Tenemos que repetirlo — sonreí más que satisfecha

— Que te quede claro — me alzó del mentón —, ya eres mía — terminó serio —. Mía y de nadie más Campbell — decía con la respiración aún un poco agitada

Terminé cerrando poco a poco mis ojos, dejándome llevar por el sueño que tenia producto del cansancio.

Continuará...

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Ok, no suelo escribir este tipo de cosas pero...😅

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